La Luz de tus Ojos - Gonkillu AU

Capítulo IV

—¡Killua!

El chico se dio vuelta sorprendido al escuchar que gritaban su nombre, y vio de inmediato como alguien se acercaba a él a toda velocidad, luciendo una sonrisa brillante y amable.

—¡No pensé que estaríamos en el mismo grupo de la clase de deportes hoy! —jadeó— ¡Es genial! ¿Cuál es tu deporte favorito? ¡Oooh tienes un amigo! Es un gusto conocerte, ¡mi nombre es Gon Freecs! —sonrió mientras extendía la mano.

—Ah, es un gusto... soy Ikalgo —sonrió también éste algo confundido mientras la estrechaba.

—¿Por qué te acercaste corriendo? —le preguntó Killua sin saber cómo reaccionar.

—Oh, te vi a través del patio, así que decidí venir a saludar.

—¿No tendrás problemas con tu profesor?

—¡Claro que no! Me disculparé luego, venir a saludar era más importante. —Sonrió despreocupadamente.

Killua lo miró sin entender.

—Bueno... nosotros debemos practicar con...

—¡Oh! ¡Voleibol! ¡Es uno de mis favoritos! —lo interrumpió— ¿Saben cómo se juega? Puedo enseñarles si quieren, estuve en el equipo algunos años...

Killua miró a Ikalgo buscando alguna pista para salir de la situación, pero éste parecía fascinado por la presencia brillante de Gon y lo miraba con una sonrisa boba.

—Bien... realmente soy malo para los deportes, así que adelante —suspiró resignado— ninguno de los dos entendió nada de lo que el profesor decía, así que...

—¿Quién es su profesor?

—Leorio —respondió Ikalgo.

—Oh, sí, a veces tiende a hablar de más —rio— es mi amigo, así que debería ir a saludarlo más tarde también.

—¿Tu amigo? —preguntó Killua con curiosidad por primera vez, y Gon lo advirtió de inmediato.

—Sí, me ayudó con muchas cosas cuando era pequeño, así que es como un hermano mayor para mí.

—Es buena gente —le aseguró Ikalgo mirándolo con una sonrisa, pero Killua parecía haber perdido el interés para entonces.

—Bien...supongo...

—¡Esto es genial! ¡Podemos practicar juntos y hablar al mismo tiempo!

—Hey, no creo que eso sea buena idea...

—Vamos Killua —sonrió Ikalgo— estará bien mientras el profesor no se de cuenta.

—¡Claro que estará bien! Seré realmente discreto —le dijo guiñándole el ojo, mientras un grupo de chicas pasaba por detrás y comenzaban a cuchichear emocionadas al ver a Gon.

Killua se percató de esto y comenzó a sentirse cada vez más incómodo.

—No creo que puedas ser discreto si hablas así de fuerte... —masculló molesto.

—¿Ehh? ¡No es así! Vamos, de verdad no causaré problemas.

—...bien.

—¡Ok! ¡Juguemos entonces! —les dijo mientras tomaba la pelota de entre las manos de Killua, y se ponía en posición.

—¡Hey! ¡Espera! Ni siquiera sabemos las reglas, al menos podrías explicarnos...

—¡No es necesario! —rio— aprenderán jugando, ¡solo imítame y estarás bien!

Las chicas del grupo comenzaron a juntarse alrededor y a echar miradas cada vez menos discretas.

Killua suspiró exhausto, e imitando lo mejor que pudo a Gon, lo miró con ojos desafiantes.

—¡Lanzaré el balón así que intenten pegarle con los brazos juntos! —les advirtió antes de tirar suavemente la pelota en dirección a Killua. Éste recibió el golpe cerrando los ojos, y casi se golpea la nariz, pero logró direccionarla hacia el chico.

—¡No cierres los ojos! —rio Gon divertido— así lo haces es más difícil...¡Tu turno Ikalgo!

—¡Bien!

—¡Genial! ¡Van muy bien! —los felicitó con una sonrisa amable—. Ahora tú Ki...

Killua no alcanzó a escuchar el resto de su nombre cuando sintió el impacto de un fuerte golpe sobre su espalda, que lo hizo caer al piso con un ruido sordo, golpeándose la cabeza.

Lo último que alcanzó a ver antes de quedar inconsciente, fue el rostro preocupado de Ikalgo que se acercaba a ayudarlo, y los gritos enojados que profería Gon mientras agarraba a alguien por el cuello y los demás intentaban detenerlo.