The Queen.

UNA CARA DISTINTA.

Todo estaba pasando tan rápido que no reaccione como siempre lo hago.

- Tu no me dices que hacer gato!-. Expreso Sasuke con ese tono prepotente de cualquiera de nuestros círculo social con el estúpido pensamiento de poder creer que puede humillar a los empleados.

Sasuke termino por soltar mi brazo al igual que Kakashi la muñeca de Sasuke.

- Sus insultos no me interesan, pero lo que si le puedo decir señor UCHIHA es que mi trabajo es cuidar de la señorita Haruno y no permitir que nadie la toque si ella no lo desea -. Responde Kakashi en un tono hostil.

- Si claro, no me digas solo tú la puedes tocar a libertad cierto?!-. Responde Sasuke sarcástico.

Kakashi se enfureció más, pocas veces había visto a Kakashi de esa manera, Sasuke por otro lado estaba de igual manera y yo prácticamente estaba en medio de ambos.

Era esa clásica pelea llena de testosterona y antes de que Kakashi respondiera hablé.

- Pueden salir al gimnasio una vez más y molerse a golpes hasta que saquen su orgullo de machos alfas si gustan, de lo contrario les pido que ambos se den media vuelta porque me quiero vestir para largarme de este lugar -. Dije con fastidio viendo a ambos sin importarme que me ganarán en altura.

Sasuke reflejó una mirada de rabia, supongo que pensó que lo defendería de Kakashi o que le llamaría la atención. Y Kakashi..... Bueno es él.

Ambos hombres se dieron media vuelta, yo solté la toalla de mi cuerpo quedando solo en bragas y después me puse el vestido mis sandalias, tome mi bolsa y camine a la salida no sin antes detenerme.

- Kakashi que alguien se encargue de lo rutinario con mi locker te espero en 20 minutos en el auto-. Dije tranquila y después salí de las regaderas sin esperar respuesta.

Estaba checando los pendientes del día de hoy y al frotar mi rostro con ambas manos recordé el golpe que me dejó el estúpido con el que me enfrente.
Busque un espejo en mi bolso y miré mi reflejo y en efecto estaba rojo lo cual me indicó que sería un moretón sin duda.

Pasando el tiempo Kakashi llegó justo como lo pedí, llegó bañado y cambiando como habitualmente viste.

- Kakashi.... Gracias y perdón-. Dije una vez que él comenzó a conducir.

- Es mi trabajo, no entiendo a qué viene el perdón, no hizo nada malo-. Responde sin mirarme enfocado en manejar.

- Sasuke es astuto y se dio cuenta de lo que tenemos nosotros-. Contestó mientras buscaba mi maquillaje para ocultar un poco el golpe.

- Francamente a mí no me afecto en nada, en cambio a ti Sakura no lo sé, eres una mujer con una reputación y personalidad respetable, si no te molesta en nada que sé sepa que tienes de amante a tú jefe de seguridad y guardaespaldas entonces a mi tampoco me afecta, pero ese no es el caso verdad?!-. Escuché sus palabras.

Los dos estábamos concentrados en nuestras cosas él manejando y yo maquillando mi rostro, sin dejar la conversación.

- Sabes que me importa un comino lo que piensen los demás pero no es conveniente si quiero hacer tratos con Sasori -. En esta ocasión si nos vimos los dos a los ojos todo gracias al semáforo en rojo.

Por muy extraño que parezca sentí como si estuviera terminando una relación de 5 años y una sensación de perdida me invadió el pecho.

- Perfecto entonces supongo que ya no habrá lunas rosas -. Contesto Kakashi avanzando una vez más.

Sus palabras sonaron duras y cortantes y eso me provocó enojo y dolor.

- No he dado nada por hecho-. Respondí a manera de tratar de evitar la lejanía definitiva.

-Estoy a tus dispocisión en ese caso -. Respondió con esa estúpida sonrisa de lado.

- Gracias-. Fue la única palabra que salió de mis labios y una sensación de tranquilidad llegó.

Muchas veces dije que la relación era solo sexo pero también era consiente de que un sentimiento más había surgido en estos 5 años de solo follar, Kakashi era indispensable para mí pero no era amor definitivamente.

- Toquemos otros temas, hoy se hará la subasta de la chica rosa?-. Pregunto Kakashi.

- Sí, tengo a tres candidatos la duda es saber cuánto están dispuestos a pagar-. Dije terminando de maquillarme y guardar mis cosméticos.

- Es complicado pero supongo que al aceptar la subasta están dispuestos a pagar, aunque solo será uno al final de todo-.

- Exacto, tenemos que preparar la sala especial para este trato-. Dije dando un suspiro de cansancio.

En ocasiones llevar la casa en donde las mujeres vendían su cuerpo, provocaban pesadillas que no me dejaban dormir.
Sabía que a cada mujer le gustaba lo que hacía pero que lo hicieran en mi propiedad y ser yo la que lleva a los clientes me volvía como un proxeneta y eso me llevaba a un lugar más profundo de dónde ya me encontraba.

- Todo está listo, me adelante para que todo esté listo y solo se presenten los clientes y la jovén-. Escuchó la voz de Kakashi mientras me pierdo observando las nubes en el cielo.

-Perfecto en ese caso vamos a casa para poder hablar con ella y hablarle sobre mi proposición-. Respondí automáticamente.

La culpa llegó con más fuerza y mis ojos se cerraron para poder imaginar ser libre de está jaula de oro en la que mis padres me dejaron encerrada de por vida.

- Es un caso especial supongo, muy pocas veces recurres a evitar que sean damas de compañía en la casa-. La voz de Kakashi me saco de mi ensoñación y abrí mis ojos para voltear a verlo mientras el seguía conduciendo.

- Sabes que las mujeres que están en esa casa apesar de que se vendan, ellas están por gusto y sus propios propósitos al tener una buena ganancia, también sabés que en todos estos años solo he subastado a tres mujeres vírgenes cuatro con la de hoy y su situación es diferente, ella lo hace para su hermano enfermo y pretende cumplir con el trato de 3 años para recolectar dinero, la única solicitud que pidió es salir de la casa sin ninguno de los hombres como vigilante pues ella sigue estudiando, además la conozco-. Dije recordando muy bien el recuerdo que llegó a mi memoria el día que ella dijo su nombre.

- Se puede saber de dónde?-. Pregunto Kakashi curioso.

- Su abuelo fue uno de los guardias de mi abuelo y en unas ocasiones la llevo a la casa para jugar conmigo pero como yo soy mayor que ella supongo que no me recuerda -. Respondí desanimada.

Me sentía fatal por el hecho de conocer a Tenten de hace años y ahora ayudarla a qué pierda algo valioso me llenaba de rabia para mí misma.

- Tengo un vago recuerdo ahora que lo mencionas-. Kakashi contesto en un tono más bajo y con cierta culpa.

- Por eso le voy a dar trabajo como secretaria en la empresa-. Dije de inmediato.

Kakashi era muy conocedor de la historia de la familia y también era conocedor de cada empleado que pasaron por la nómina de los Haruno y solo eran contados los que tenían la libertad de traer a sus hijos o nietos a jugar con la princesa Haruno, en este caso yo.

- No eres tan mala Sakura, eres noble -. Dijo dando un leve apretón a mi rodilla.

Nos habíamos detenido en el portón para que las rejas eléctricas se abrieran y fue imposible no soltar esas clásicas lágrimas rebeldes.

- Solo tú lo sabes Kakashi, tú me conoces a fondo, tú conoces la verdadera Sakura-. Dije tratando de contener el llanto.

Sentir la mano de Kakashi sobre mi cabeza es su clásica caricia de apoyo me terminó por romper.

- Y siempre la voy a cuidar Sakura, cuidare esa bondad en ti y esa mujer de sentimientos puros-. Respondió Kakashi.
Sus palabras siempre eran ese bálsamo para mí alma herida rota y enjaulada.

Sentí como el auto avanzó una vez más y ese simple acto me hizo sentir como si volviera a mi jaula de oro una vez más.

Calme mi llanto controle nuevamente mis sentimientos y con mis dedos limpie las lágrimas que bajaron sobre mis mejillas y el modo perra adinerada se activó una vez más.