The Queen.

TRATO DE PUREZA.

SAKURA.

Una vez calmada bajamos del auto y como si nada hubiera pasado continuamos con la misma vida.

- Yoshi trae a caso rosa a mi oficina-. Ordené a uno de los hombres encargados de las mujeres.

- Enseguida-. Fue la única respuesta que dio el hombre y después desapareció.

Kakashi y yo continuamos caminando hasta que llegamos a la biblioteca.

- Estás mejor?-. Fue la pregunta que me hizo Kakashi una vez que estuvimos adentro de la biblioteca.

Una exhalación irónica fue mi gesto antes que mi respuesta.

- Es una pregunta que no me debes de hacer nunca Kakashi, sabes perfectamente la respuesta-. Fue lo que salió de mi boca en un tono gélido.

- Lo lamento-. Fue su única respuesta.
Y supe inmediatamente que su intención no era molestar sino  todo lo contrario.

Solo asentí para darle a entender que todo estaba bien.

- Lo del auto...-. fue una frase a medias de mi parte pues Kakashi me interrumpió.

- De qué hablas?!-. Fue la pregunta que él hizo dándome a entender que sabía perfectamente a qué me refería y yo agradecí mucho la confianza que el me brindaba y el apoyo incondicional.

- Nada, de nada en específico-. Dije tranquila mientras me sentaba.

- Bien -. Fue su única respuesta.

Los dos quedamos en silencio y después de unos minutos más Tenten llegó.

- Sabes perfectamente a qué se debe está reunión, ya decidiste la cantidad?-. Pregunté sin dejar de revisar mi celular.

- Sí -. Fue todo lo que la escuché decir y en esta ocasión si tuve que alzar mi rostro para verla a los ojos.

Ese maldito nudo en mi garganta cada vez era más grande e insoportable.
Tome las mismas malditas fuerzas de ser fuerte y poderosa ante los demás y volví a ser Sakura Haruno, "La Reina"

- Bien, tengo a solo tres candidatos, hoy en la noche te vas ha arreglar directamente con ellos, les dirás la cantidad y solo uno será el que esté dispuesto a pagarla, yo estaré presente para dar por verídico la transacción que se te hará en ese momento a una cuenta que se te otorgó para ésto, después de eso no necesito decirte que pasará -. Dije dando una mirada desinteresada.

El semblante de Tenten era firmé pero ese miedo en sus ojos fue imposible no verlo.

- Comprendo perfectamente, solo me estoy preguntando una cosa, como debería de vestir?! -. Su pregunta por primera vez me saco una sonrisa burlona pero discreta. Era algo muy tonto que preguntara ese tipo de cosas pero inmediato comprendí que todo era a causa de sus nervios.

- Mira te seré honesta, eso depende de ti, pero te recomiendo que te vistas elegante, no caigas en lo vulgar, los candidatos son hombres elegantes, darles ese enigma de no ver mucho tu cuerpo llamará más su atención y no temas -. Dije dándole un poco de seguridad y confianza.

- Tengo... Tengo miedo, y si me golpean? Son... Son viejos y gordos? -. Esta vez sus preguntas por primera vez si tuvieron un poco de lógica con forme a su situación.
Efectivamente ahora todo su rostro reflejó miedo y la culpa me golpeó.

Para evitar seguir viéndola me puse de pie y caminé a la ventana de la biblioteca para ver las nubes.

- Niña se que tal vez esto es mucho para ti y lo que estás haciendo no es fácil, vas a vender algo que se supone las mujeres entregamos por amor, pero también entregamos la virginidad por deseó o simplemente porque el chico es muy guapo.
Pero no te preocupes los candidatos son jóvenes no pasan de los 30 y son muy apuestos, mínimo deberías de sentir placer de perder "eso" con alguien que por lo menos te excite y no, no serás golpeada nosotros nos encargamos de tu seguridad -. Respondí sin dejar de ver las nubes.

Observar ese simple acto de las nubes me hace sentir como si con el mismo movimiento mis problemas, actos y fantasmas del pasado se fueran con ellas.

- Muchas gracias señorita-. Fueron las palabras que escuche decir de parte de ella y un enojo surgió.

- No se agradece nada a quien te ayuda a qué te vendas -. Voltea a verla mientras daba mi respuesta.

- Es curioso lo sé pero, de cierta forma siento como si tratara de protegerme lo que más puede, en algunos lugares tal vez todo ésto sea peor y pasen atrocidades peores -. Las palabras de Tenten solo lograron por terminar de enojarme y ella se dio cuenta de eso pues su mirada cambio a una de miedo.

Que ella sea agradecida conmigo por ayudarla a vender su cuerpo era tan jodido para mí y mi poca estabilidad mental y moral.

- No te discuto eso, existen lugares mucho peores que ésto, yo solo soy menos.... Cruel, ahora retiraré si no quieres que tú cliente sea uno tan repugnante y te de como un festín para mis hombres después de que tu cliente te usé, no te confundas yo no soy amable solo vendo lo que tú aportas y con ello también obtengo ganancias -. Dije cuando me paré frente a ella mientras le daba una mirada de desprecio.

Lo único que hizo fue bajar la cabeza y después salir de la habitación.

- No era necesario ser tan cruel-. La voz de Kakashi se escuchó después de que Tenten se fuera y su estúpido comentario me irritó más.

- Soy cruel!! Todo mundo lo sabe, soy el Cerezo Rojo, soy una mujer dura y así debe de ser, no importa nada más, sabes que si dobló las manos él me va a destruir -. Dije en respuesta.

El maldito recuerdo del pasado llegó como siempre llega, de golpe y sin ningún aviso.
Kakashi se paró frente a mi y nuestras miradas se encontraron.

- Orochimaru ya es historia -. Dijo dando a entender que no tenía que preocuparme de nada.

La rabia, el dolor y los recuerdos explotaron en mi garganta.

-NO LO ES Y LO SABES PERFECTAMENTE, SABES QUE ESE PERRO DESGRACIADO SOLO BUSCA UN MALDITO PUNTO DÉBIL PARA JODERME IGUAL QUE COMO PASÓ CON IRUKA-. Me fue imposible gritar al estar llena de ese maldito sentimiento de odió por esa maldita víbora que destruyó mi ilusión del amor y mi humanidad.

- Sakura lo de Iruka fue... Inevitable-. Kakashi trato de abrázame pero se lo negué al moverme.

- Orochimaru está obsesionado conmigo, me ama de una manera enfermiza, mi padre solo le ordenó que le diera dinero a Iruka para que desapareciera, sabes que Iruka era solo el hijo del capataz de la hacienda y su único pecado fue enamorarse de mi, Orochimaru me lo dijo cuando me tuvo retenida mientras me hacía observar como torturaba a Iruka y como terminaron por matarlo justo después de darme un beso -. Dije casi pérdida en mis recuerdos.

Ése día se marco un antes y un después de una Sakura y otra.
Tenía solo 17 años cuando conocí por primera vez el amor y ver la manera en la que me arrebataron ese amor, de esa manera cruel y despiadada aprendí la lección más importante en esta vida de mierda rodeada de dinero.

El amor te hace débil y un blanco fácil para tus enemigos.