Mi papá me mima.

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L.J Morgan. Be Quiet And Drive (Far away) - Deftones.

L.J y Gustabo estaban sentados en la terraza de una de las cafeterías del muelle del Pier mirando la puesta de sol con un cigarrillo y unas cervezas. Eran las ocho de la tarde y Horacio, quien los había citado allí, todavía no aparecía.

Morgan se había contenido durante varios días de preguntarle a su amigo de cresta que había pasado aquella noche con el comisario ruso. Era algo que prefería saber cuando quedase con él en persona, además durante los últimos días había trabajado turnos largos y apenas tenía tiempo para sentarse y tomarse un café.
Por fin cuando había salido temprano del trabajo, Horacio le mandó un mensaje citandola a ella y a Gus en el muelle para hablar.

- No sé porqué coño el caranabo siempre llega tarde.- Bufó Gustabo encendiéndose otro cigarrillo.

Ella se mantenía serena gracias a que estaba muerta de sueño porque si no lo mas probable es que estuviera mordiéndose las uñas.

Cuando estaban a punto de dar las ocho y cuarto su amigo apareció y se sentó con una sonrisa que casi partía su rostro en dos.

-¿A que no sabéis quien ha comprado entradas para la fiesta de Halloween del casino?- Exclamó a toda velocidad sin dejar tiempo a que sus dos amigos dijeran algo.- ¡El Papu! Ha comprado para toda la malla después de que le suplicase durante días.- Finalizó con un chillido de emoción.

-Tú siempre has sido su ojito derecho.- Se rió Gustabo negando.

Morgan no conocía mucho al superintendente pero por lo que Gustabo y Horacio le habían contado era un hombre muy serio y estricto. Aun que también era cierto que tanto los comisarios como sus dos amigos eran su mayor debilidad, los trataba literalmente como a sus hijos, y si su hijo más pequeño y adorable le pedía algo se hacía el duro durante un rato para luego acceder como si no quisiera.

-¿Tú vienes Morgan?- Preguntó Horacio haciendo un puchero con sus labios, como un cachorrillo.

-Jordi me ha dado libres esos dos días, así que estaré allí con Gio, Isa y algunos compañeros.- Concedió viendo la sonrisa del crestas crecer.

Tanto como el CNP tenía un papá, la EMS lo tenía, y ese era Jordi. Era muy serio en cuanto a trabajo se refería pero también era muy buen mentor y consejero, no había ni un solo EMS en el hospital que no le admirase, empezando por ella misma.

-Vale, fiesta, genial. Ahora canta, ¿te has comido ese culo ruso si o no?- Exclamó Gustabo mirando fijamente a su hermano que se ponía rojo como un tómate.

Horacio pareció meditar su respuesta durante un rato, dejando escapar una sonrisa muy tierna.

-No, no nos hemos acostado.- Afirmó para continuar.- Pero si que pasaron cosas, incluso dormimos abrazados.

L.J estuvo apunto de levantarse de la mesa y gritar de la emoción, pero como toda buen actriz sonrió fingiendo que no tenía ganas de salir corriendo a contárselo a Greco.

Greco. Vaya con el Henry Cavill vikingo. Solo recordar lo que se le había escapado como una broma y la respuesta de él estando solos se le calentaba la cabeza impidiéndole pensar con claridad.

-Vamos, que comiste verga rusa.

-Si, pero no lo digas así, suena fatal.- Admitió mientras Gustabo se reía diciendo "golaso, espectaculaaaar".

Morgan deseaba preguntarle como se sentía al respecto del avance de su romance con Volkov pero antes de poder hablar ambos chicos se giraron a mirarla con ojos vacilones.

-¿Y tú con Greco?- Cuestionó Horacio subiendo y bajando sus cejas.

-Nada, nos marchamos de allí al ver como os dabais filete.

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