L.J Morgan
Morgan se encontraba trabajando en el hospital otro de esos turnos de veintitantas horas.
Tras las fiestas de navidad bastantes EMS que no habían podido tomarse esos días libres habían cogido vacaciones. Con lo cual los demás tenían que hacerse cargo de los turnos.
Su relación con Lara Harris había mejorado bastante, ya la directora había tenido un cambio de comportamiento brutal. Por eso cuando, la pelirroja supo que tenía una guardia de treinta horas le dió su teléfono personal por si necesitaba ayuda o sentía que no podía más. Pero L.J amaba su trabajo, y mientras se notase con capacidad para tratar a los pacientes, aguantaría sus horas.
Desgraciadamente, su estado fue decayendo con las horas. Empezó con un par de toses, luego se le taponó la nariz haciendo que su voz sonase nasal. A eso de las seis y media de la tarde ya sentía dolor en todo su cuerpo y frío, mucho frío que aun con la camiseta térmica, la blusa de trabajo y la bata no pudo combatir. Isabella fue la primera en darse cuenta de ello, notando su rostro pálido a excepción de las mejillas y la nariz, que estaban claramente enrojecidas.-¿Te encuentras bien?- Cuestionó la rubia sin acercarse todavía. Ella como pudo hizo una mueca que intentaba simular una sonrisa, para toser de nuevo, haciendo que su amiga tocase su frente para luego negar resignada.- Sos una culia', tenés fiebre.
Claramente, quería hacerse la fuerte y fingir que nada pasaba, pero al ser doctora su responsabilidad era curar a la gente, no traer virus al hospital. Además desde que era bastante pequeña cuando sufría fiebre se ponían malísima al subirle un poco las décimas. Tenía pesadillas todo el rato, era incapaz de estar de pie sin tambalearse y distorsionaba la realidad.
-Avisaré a alguien, pero vos tenés que ir a casa.- Exclamó su amiga antes de avisar por radio al superior. Morgan a su lado se moría por tumbarse o sentarse porque el dolor de sus articulaciones y el frío la estaban matando.- Dame tu celular, llamo al comisario para que te recoja si puede, no podés conducir.- Dijo la rubia una vez dejó de hablar por radio.
Como una autómata, ya por el aumento de la fiebre y el malestar, le tendió el teléfono dejando que llamase a Greco.
-Hola, comisario Rodríguez, soy Isabella.- Saludó la chica alegre.- Sé que aún no acaba su turno, pero Morgan está enferma y no puedo dejarla conducir a casa con la fiebre, y tampoco creo que pueda.- Trató de decir sin que la morena la oyera.- Si claro, yo me encargo de preparar la receta y de ayudarla a cambiarse. De acuerdo, le espero entonces, adiós.
Tendiendole el teléfono de nuevo la miró sentada en la silla con cara de querer morirse.
Toda su vida había sido una chica bastante resistente, tenía buena tolerancia al dolor, pero las pocas veces que había sufrido fiebre había comprobado que eran batallas perdidas. Simplemente era algo que la dejaba para el arrastre por días.
Isabella notando que parecía estar dispersa la ayudó a levantarse y se la llevó hasta el vestuario, dónde le puso un termómetro mirando el resultado sorprendida.-Amiga 40°C, ¿cuanto rato llevas sintiéndote mal?- Preguntó.
-Pues como una hora o dos.- Balbuceó con la garganta y los labios secos.
La rubia parecía reticente a creerse aquello, pero realmente no mentía, simplemente le subía la fiebre muy rápido.
Tras anotar los demas síntomas en un informe decretó que estaba sufriendo una gripe fuerte, por lo que escribió la receta pertinente dándole también una baja de cinco días, como solían hacer en casos de gripe para evitar propagación por el hospital.
Como un ángel de la guarda la ayudó a vestirse su ropa de abrigo, aun que la morena se moría de frío todavía, y la acompañó hasta la puerta, dónde Greco y Conway esperaban de brazos cruzados.
Podría haberse sorprendido por ver al superintendente allí, o babear como habitualmente por el aspecto de su novio, pero entre que las neuronas no le hacían bien la sinapsis y lo mal que se encontraba solo se dejó llevar hasta ellos donde Greco la recibió en sus brazos inmediatamente.
![](https://img.wattpad.com/cover/238812179-288-k463712.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Remedy
FanfictionEl comisario Greco Rodríguez cree que su día no podría ir peor. Tras varios códigos 3 fallidos, dos accidentes con el z y aguantar el enfado del Superintendente por el comportamiento inmaduro de los alumnos, está casi seguro de que ha cumplido la cu...