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Me despierto por los rayos de luz pegar en mi rostro, me siento en la cama y miro a mi alrededor, la enorme habitación con tonos claros. Ayer Yoongi decidió dormir en la habitación de invitados, dijo que quería darme mi espacio, no quería presionarme y se lo agradecía de sobre manera, no se que hubiese hecho si lo tenía a lado de mí mostrando su hermosa figura, tal vez estaría perdido. Me levantó de la cama y caminó al armario, hay demasiada ropa, Yoongi traslado la mayoria de mis cosas aquí, como lo es mi ropa, tuvo el tiempo de explicarme dónde estaba cada cosa, aunque me sorprendió saber que había comprado más ropa para mí y para el bebé, se lo agradecí de corazón. Un sonido de llantos llama mi atención, miró el Walkie Talkie que está situado en el tocador, lo tomó y salgo de la habitación caminando a la de a lado dónde se encuentra Yongmin; entro y es un hecho, está llorando.

-Ya llego papi- lo tomo en mis brazos con cuidado de no lastimarlo, su llanto se empieza a detener cuando me ve, acarició su rostro con cálidez- Ya mi niño- lo empiezo a mecer con mis brazos y él vuelve a cerrar sus ojos; escucho el sonido del timbre ser tocado. Miro a Yongmin que arruga su frente y yo solo me encargo de arrullar lo, cuándo veo que se ha quedado dormido lo vuelvo acostar dentro de la cuna.

Salgo de la habitación con cuidado de no hacer ruido y despertar a Yongmin, bajo las escaleras hasta la parte inferior, miro a todos lados y no veo a Yoongi, me acerco a la entrada y no veo nada por la pantalla, ¿Ya habrá abierto Yoongi?, me encaminó a la cocina cuando ciento un rico aroma entrar por mis fosas nasales; dentro no hay nadie pero si hay dos platos de desayuno y la tetera recién apagada. Unas risas llaman mi atención, giro en mis talones y me encaminó a esas risas que cada vez se escuchan más fuertes, me detengo enfrente de una puerta negra, la abro con cuidado asomando mi cabeza.

-Que cosas dice Joven Min- miro la cabellera negra de aquélla mujer que sonríe libremente mostrando su blanca dentadura, mi corazón se oprime- Se lo que quiere...

-¿Yoongi?- me adentró completamente y miro a Yoongi que tiene una camiseta demasíado pegada mostrando su formada figura, un pantalón pegado mostrando sus formadas piernas, joder, siento mi miembro vibrar.

-Jungkook- se levanta y puedo notar la mirada de la mujer plasmada en Yoongi y eso me molesta demasíado, ¿Por qué lo está mirando?, Yoongi se acerca a mí y me sonríe acariciando mi rostro; parece ser solo nuestro momento pero se ve interrumpido por la pelinegra que carraspea.

-Oh si- Yoongi se voltea para ver a la pelinegra y sonreirle, siento mi sangre hervir con solo ese gesto- Jungkook ella es mi secretaría, Jung Yang mi- la pelinegra se levanta y hace una reverencia.

-Mucho gustó- sonríe dulcemente y juro que quiero golpear esa sonrísa con mi puño, miro a Yoongi que solo tiene una sonrísa, a él también quiero golpearlo por vestirse así de provocativo.

-El mío- sonrío, como si esto me gustará, Yoongi se voltea a verme sin borrar su sonrísa y de verdad quiero borrarla, ¿Por qué sonríe tanto?.

-¿Quieres desayunar?- acaricia mi cabello y yo asiento en silencio, mira a la pelinegra que está parada en su mismo lugar sonriendo grandemente- ¿Ya desayunaste?- la pelinegra niega con la cabeza mientras sonríe tímidamente.

-Entonces vamos a desayunar- pasa a mi lado para salir se la oficina, la pelinegra borra su sonrísa y me mira detalladamente, luego vuelve a sonreí y pasa a mi lado para salir pero antes me mira de reojo, ¿Qué fue eso?.

Salgo de la oficina y caminó a la cocina llevando conmigo el Walkie Talkie por si Yongmin despierta; entro a la cocina y la pelinegra está a lado de Yoongi sonriendo entretenida mientras lo ayuda hacer algo en un sarten, no se que es y tampoco me interesa, solo quiero que esa se aleje de Yoongi, solo quiero que le deje de sonreír así, como si fuera la octava maravilla, joder. ¿Qué es esto?, acaso... ¿Estoy celoso?, ¿Yo Jeon Jungkook, celoso de esa? Oh no no.

Quiero que lo deje de ver así, comiéndose lo con la mirada, la pelinegra acomoda un mechon de cabello detras de su oreja sin apartar la mirada de Yoongi, sonríe tímidamente cuando Yoongi le dice algo que al parecer es gracioso para él y ella pero para mí no, es una porquería, con los humos altos me siento en la silla con los brazos cruzados sin dejar de mirar a la pelinegra, quiero gritarle que Yoongi es mío, SOLO MÍO.

¿Qué te pasa Jungkook?, ¿No que quieres pensar las cosas?.

No puedo pensar las con esa pelinegra aquí, sonriendo como niña tonta cada vez que Yoongi abre la boca para decir algo que no tiene gracia alguna. Yoongi me pasa una taza de té y deja una a su lado de café, se sienta a mi lado y me sonríe tomando levemente mi mano antes de soltarla y tomar sus palillos listo para comer; no puedo hacer lo mismo teniendo a está enfrente de mí mirando a Yoongi de esa manera, quiero arrancar su maldito cabello dejándola pelona, se lo merece por ver así a Yoongi. Todo es culpa de Yoongi, su maldita sonrísa, sus penetrantes y felinos ojos, su perfecta sonrísa, su cuerpo de diós griego, quiero golpearlo por ser perfecto y ganarse la mirada de todas las arpias como la pelinegra.

-Pienso volver mañana al trabajo, pienso hacerlo hoy en casa, así puedo adelantar unas cuantas cosas y poder tener la semana libre- Yoongi charlaba plenamente con la peligra que solo le sonreía dulcemente, con los humos altos tomo mis palillos y empizo a comer.

-Eso suena bien, en la empresa se te extraña demasíado, nada es igual si no estas tú Yoonie- la pelinegra sonríe dulcemente y juro que me acabo de enterrar las uñas en la piel por estar las apretando con fuerza, ¡¿Yoonie?!, ¿Cómo se le ocurre llamarlo así enfrente de mí?, ¿No sabe quién soy?, miro a Yoongi que también me mira para después apartar la mirada nervioso con un sonrojo en sus mejillas, por algún motivo mi enojo se disminuye, ¿Me estaba mirando?, mi corazón se mueve con fuerza.

-Lo se, todos son unos inútiles, entiendo porque siempre me dices que debo ser paciente antes de entrar a cada junta- Yoongi bebe de su café y relame sus labios y joder, claro que me enciendo con solo esa simple acción.

-Soy perfecta Yoonie, es claro que trato de ayudarte en todo, ¿Quien te salvaría si no fuera yo?- la pelinegra apoya sus codos en la mesa mirando dulcemente a Yoongi y de verdad que quiero golpearla, acaso, ¿No me ve?, estoy aquí estúpida, mirame, tengo en la maldita frente grabado "Yoongi de MÍ propiedad", ¿No lo ves?, date cuenta que solo vas a terminar llorando. Quiero que lo deje de ver.

-Nadie- maldita sea Min Yoongi, juro que cuando esa se largue le haré la vida de cuadritos y lo obligare a que se ponga de rodillas y me pida perdón por tratar de coquetear con esa plástica, y que piense sobre las estupidez que hizo. Si, lo se, estoy siendo posesivo pero mierda, es Yoongi, MÍ Yoongi, solo mío, de nadie más.

Solo a mí me puede mirar, solo a mí me puede besar, solo a mí me puede abrazar; solo yo puedo verlo, solo yo puedo besarlo y abrazarlo, solo yo puedo tocar ese maldito cuerpo de diós griego; ninguna moji gata va a llegar a tratar de quitarme lo que es mío, no lo voy a permitir.

Eres demasíado celoso Jungkook. Sabes que amas a Yoongi más de lo que esperabas.

Si si, lo hago, ¿Y qué?.



Una vez más vengo inspirada jsjs.

Esperó lo disfruten que se acerca lo mejor, supongo que lo veo así.

Los amo💖💖

¿Por qué tú?/ Yoonkook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora