Cebollita

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C i n c u e n t a  y  c i n c o

Jimin volvió del trabajo agotado, ni bien entró al departamento lanzó sus zapatos. luego lo recogería, sin embargo, se sorprendió cuando se topó con su suegro y Haeri observándole curiosos. Su rostro se volvió rojo de la vergüenza, sonrió avergonzado e hizo una venia al hombre mayor y recogió sus zapatos acomodándolos en el mueble ubicado al lado de la puerta.

Haeri comenzó a balbucear y mover las manos hacia su padre.

— Buenas tardes Jimin, —saludó el padre de Yoongi acercándose para que pueda tomar al bebé.

— Buenas tardes, —tomó a su bebé para darle besos en la mejilla—, ¿cómo está, hace tiempo que está aquí?

— Estoy bien, vine a visitar a mi nieto y cerciorarme de que mi hijo no se volvió calvo. Mi suegro comenzó a perder el cabello muy joven, dijo que se quedó sin nada después de que naciera mi esposa.

— No se preocupe por la cabellera de Yoongi, voy a asegurarme de alimentarlo bien y hacerle muchas mascarillas. Últimamente anda muy alterado, o sea, más de lo normal.

— ¿Y tú cómo te sientes?

— Cansado, —soltó un suspiro y le hizo señas a su suegro para ir al sillón, sus pies le dolían—,  es difícil trabajar y ser padre a la vez. Los gastos de la casa aumentaron el triple.

Jimin tomó asiento con su hijo en brazos, le iba a pedir al padre de Yoongi que hiciera lo mismo, sin embargo, le dijo que ya volvía y que esperara un momento.

— ¿Qué va a hacer el abuelo? ¿Te vino a visitar, jugaste mucho con él?—le preguntaba hablando en modo ballena, como si el bebé le fuese a contestar.

Después de unos minutos su suegro regresó con dos potes, en uno había trozos de banana y en el otro papilla.

— Haeri ya puede empezar a comer fruta, ¿ya le han dado? —Jimin negó—, ya tienes seis meses y le está saliendo su primer diente. ¿Ya dijo alguna palabra? —volvió a negar—. Bueno, su papá dijo su primer palabra a los ocho meses.

El hombre mayor se acercó y le tendió el pote con trozos a Jimin, le quitó el bebé para sentarse, lo acomodó en sus brazos para ponerle el babero y darle con cucharita la papilla de banana. En todo ese proceso el papá de Haeri observó con una mueca deseando tener la misma destreza.

— ¿Cual fue su primera palabra de Yoongi?

— Babo*.

— Desde pequeño ya tenía marcada su personalidad.

— Sus primos mayores iban mucho a la casa y ellos le enseñaron esa palabra.

Yoongi apareció con el cabello desordenado y los ojos hinchados por haber dormido más de diez horas seguidas. Tomó asiento al lado de su novio y le quitó el pote.

— Hola cariño, ¿cómo te fue en el trabajo?

— Bien, ya veo que tomaste una pequeña siesta.

El aludido le sonrió inocentemente lanzándole un pequeño beso en el aire. Luego dirigió su mirada a su padre y su corazón se apretó.

— ¡Cielos! Haeri está comiendo por primera vez, —abrazó a Jimin por los hombros sin perder la vista de como su bebé estaba apretando en su puño la cucharita.

— En realidad en la hora del almuerzo comió papilla de zapallo y papa, pero le saqué fotos y vídeos por si lo quieren ver.

Jimin comenzó a sentirse sentimental porque su bebé ya no era tan bebé y Yoongi ya estaba con las lágrimas apunto de salir, pero las borró y carraspeó su garganta tratando de guardar la compos.

— ¿Por qué no me despertó? Le hubiese ayudado.

— No quería interrumpir tu sueño, estabas muy cansado. Además, había leche almacenada lo suficiente como para que tomaras una siesta de diez horas.

— ¿Tiene las fotos en su móvil? —preguntó Yoongi levantándose hacia la mesada donde lo había visto.

— Preguntas por cortesía, mocoso, —lo acusó.

Volvió al salón sonriendo al ver la cantidad de fotos que su padre había sacado. Tomó asiento al lado de Jimin para mostrarle las fotos.

— Gracias por ayudarnos papá.

— Si, si, no mires la conversación con tu madre, —le advirtió.

— ¿Por qué?

— ¿Quieres saber cómo viniste al mundo? —Yoongi negó avergonzado y comenzó a sonrojarse—, entonces no revises. Si vuelves a cuestionarme no voy a ponderar por ti.

— No creo que vuelva a pasar.

Jimin rio divertido por la situación y ocultó el rostro de su novio en un abrazo de oso.

Babo* (바보): tonto.