Flores Para Todos Los Niños - {{ Sope - Omegaverse }}

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- No dudes que estaremos ahí para lo que necesites.

- Lo que haga falta nos lo pides. De verdad. Lo que necesites.

- No entiendo como puede haber gente tan desgraciada en este mundo. Rezaré para que tu esposo despierte pronto.

- Que rezos ni que leche, confía en los médicos.

- Ya entiendes lo que digo.

He Sook y otros padres y madres intentaban dar ánimos a Jungkook; el cual por primera vez desde el incidente había ido para recoger a su hija al ser cada vez más consciente de que por un rato más fuera del hospital no iba a cambiar mucho; a la salida de la escuela aquel viernes. Si bien sabían que algo había pasado no habían tenido confirmación de que sucedía en realidad hasta aquel día, y rápidamente la noticia había corrido como la pólvora entre los grupos de Kakao Talk de padres. Lo único que sabían era que por algún motivo el profesor Jung Hoseok estaba llevando a Iseul a la escuela. Pero ahora sabían por qué y no tardaron en ir a felicitarlo por ser tan "amable y considerado" por dejarles su casa tras ir a dar sus ánimos al omega.

Yoongi observaba aquel escenario con una mezcla extraña de sentimientos. Sabía que en realidad el resto de padres solo conocían la mitad de la historia. Solo sabían que la agresión había tenido como detonante el temprano embarazo de la pareja. Desconocían que existía otro motivo principal que era que eran una pareja omega. A ojos de todos seguían siendo una pareja alfa omega. Por ello no podía evitar pensar con cierto desagrado que seguramente más de la mitad allí presente no responderían igual si supieran aquella segunda parte.

Pero por el momento no veía mucho peligro al respecto así que prefirió pasar del tema, centrándose en Chinmae que fue a paso rápido a reunirse con su padre, fundiéndose en un fuerte abrazo que el adulto devolvió llenándole el cabello; algo lleno de pinzas gracias a Iseul; de besos, mientras Mickey; el cual se había convertido en las delicias de otros niños; intentaba por igual lamerle el rostro.

- ¿Que tal ha ido la escuela hoy? - preguntó cariñosamente tras admirar la micro trenza que de alguna forma Iseul había logrado hacerle en un lado de la cabeza firmemente sujeta con aún más pinzas, esta vez con decoración de perlitas blancas.

- Un poco aburrida. El profesor de deporte es muy estricto y nos ha hecho correr mucho, y luego hemos tenido un dictado.

- ¿Así? ¿Y que tal te ha ido?

- No muy bien... - murmuró bajando un poco la mirada e inflando los mofletes - La profesora dice que no tengo muy buena letra y no entiende lo que he escrito. Y también he tenido algunos errores.

- Ahora en casa lo miramos tranquilamente y así te hecho una mano. ¿Te parece bien?

Chinmae asintió rápidamente logrando hacer sonreír un poco a su padre, el cual se irguió tomándole de la mano para irse al coche tras despedirse de Jungkook. Sin embargo con Hoseok tan solo se echó una veloz mirada antes de meterse en el coche. Tras aquella conversación por teléfono no habían hablado mucho salvo precisamente para quedar aquel día por la tarde.

Volvió enseguida a su casa, y tras preparar la comida fue a sentarse con su hijo en su escritorio para ir echando un ojo a su dictado haciendo tiempo hasta que Hoseok apareciera.

- Muy bien. Intenta mantener el bolígrafo sujeto de esta forma. ¿Es más cómodo?

Llevaba un rato ayudando a Chinmae con pequeños trucos para que mejorase su caligrafía con unos cuadernos de ejercicios que le había comprado tiempo atrás después de haber corregido las faltas de ortografía.

- Un poco...

- ¿Quieres probar con la sujeción del bolígrafo?

Al ver que Chinmae asentía sacó del estuche la pequeña sujeción de silicona para ponérsela en el bolígrafo para así sujetarlo mejor.