Londres, Octubre 13 Y 14, 1886
Adrien pasa las primeras horas de la noche de apertura dando subrepticias miradas a su reloj, esperando impacientemente a que las manillas lleguen a medianoche.
La inesperada llegada temprana de los gemelos Murray ha complicado su agenda, pero si la iluminación de la hoguera procede según lo planeado, debería ser suficiente.
Es la mejor solución con que puede salir, sabiendo que en pocas semanas estará a cientos de kilómetros, dejándolo solo en Londres.
Y mientras Lila podría resultar útil, él necesita un vínculo más fuerte.
Desde que descubrió el lugar elegido para el reto, ha estado tomando lentamente más responsabilidad para el circo. Haciendo todo lo que André le pidiera y más, hasta el punto donde le ha dado rienda suelta con todo ya sea desde aprobar el diseño de las puertas hasta ordenar la lona para las carpas.
Lo preocupa, el alcance del vínculo. Nunca ha intentado nada de esta escala, pero parece que no existe una buena razón para no empezar el juego tan fuertemente como sea posible.
La hoguera le proporcionará una conexión con el circo, aunque no es del todo seguro lo bien que funcionará. Y con tantas personas involucradas, parece sensato agregar un elemento de seguridad a la reunión.
Ha llevado meses de preparación.
André estuvo más dispuesto a dejarle organizar la iluminación, habiéndolo considerado invaluable para la planificación del circo con sólo leve coerción. Un ondeo de su mano, y los detalles eran todos suyos.
Y lo más importante, André estaba de acuerdo que fuera un secreto. La iluminación misma asumió un aire de una Cena de Medianoche, sin ninguna pregunta permitida como los ingredientes o el menú.
Ninguna respuesta es dada a cómo las flechas están apuntadas para crear semejante efecto sorprendente. Cómo las flechas están hechas para pasar de un tono vibrante a otro.
A aquellos que indagaban, durante los preparativos o los ensayos, se les fue dicho que revelar los métodos arruinaría el efecto.
Aunque, sin embargo, Adrien había sido incapaz de ensayar la parte más importante.
Es bastante fácil para él deslizarse lejos de André en el patio abarrotado justo antes de medianoche.
Se dirige hacia el hierro retorcido, moviéndose lo más cerca posible al caldero vacío. Toma un cuaderno grande, encuadernado en cuero de su chaqueta, una copia perfecta de uno que había sido cerrado bajo llave en forma segura en su oficina. Nadie en la multitud nota cuando él lo lanza al fondo del caldero.
Aterriza con un ruido sordo que es amortiguado por el ambiente ruidoso.
La tapa se voltea abierta, exponiendo el elaborado árbol de tinta a la noche moteada de estrellas.
Permanece cerca del borde del retorcido metal mientras los arqueros toman sus lugares.
Su atención permanece enfocada en las llamas a pesar de la presión de los clientes en torno a él mientras el fuego se amplifica a través de un arcoíris de matices.
Cuando la última flecha cae, cierra los ojos. Las llamas blancas arden rojas a través de sus párpados.
Marinette esperaba sentirse como una pobre imitación de su padre durante sus primeras presentaciones, pero para su tranquilidad la experiencia es muy diferente de lo que vio tantas veces en teatro tras teatro.
El espacio es pequeño e íntimo. Las audiencias son lo bastante modestas como para seguir siendo personas individuales en vez de fusionarse en una multitud anónima.
Descubre que es capaz de hacer cada actuación única, dejando que la respuesta del público sea lo que la informe de qué hacer a continuación.
Mientras lo disfruta más de lo que pensaba que le gustaría, está agradecida de tener tramos de tiempo para sí misma en los intervalos. A media que se acerca la medianoche, decide ver si puede encontrar un lugar para ver discretamente la iluminación de la hoguera.
Pero a medida que se dirige hacia el área de la que se refieren como los bastidores a pesar de la falta de un escenario, ella se ve rápidamente barrida por el de alguna manera ordenado caos circundante al inminente nacimiento de los gemelos Murray.
Varios de los artistas y el personal se han reunido, esperando ansiosamente. El doctor que ha sido traído parece encontrar la situación bastante extraña. El contorsionista va y viene. Aidan Murray se pasea al igual que uno de sus gatos.
Marinette se esfuerza por ser tan útil como pueda, lo que consiste principalmente en ir en busca de tazas de té y encontrar maneras nuevas y creativas para asegurar a las personas que todo estará bien.
Eso le recuerda tanto a consolar a sus viejos clientes del espiritualismo que se encuentra sorprendida cuando es agradecida por su nombre.
El suave grito que suena minutos antes de la medianoche llega como un alivio, unido a suspiros y aplausos.
Y entonces algo más le sigue inmediatamente.
Marinette lo siente antes de escuchar los aplausos haciéndose eco provenientes del patio, el cambio que súbitamente se propaga a través del circo como una ola.
Recorre su cuerpo, enviando un involuntario escalofrío por su columna, casi tirándola a sus pies.
—¿Estás bien? —dice una voz detrás de ella, y se da la vuelta para encontrar a Kagami apoyando una mano cálida sobre su brazo para estabilizarla. El destello demasiado conocedor que Marinette está empezando a encontrar familiar brilla en los ojos sonrientes de la contorsionista.
—Estoy bien, gracias —dice Marinette, luchando por respirar.
—Eres una persona sensible —dice Kagami—. No es inusual para una persona sensitiva verse afectada por semejantes eventos.
Otro grito se hace eco desde la sala contigua, uniéndose la primero en un suave coro.
—Tienen una coordinación notable —dice Kagami, volviendo su atención a los gemelos recién nacidos.
Marinette sólo puede asentir.
—Es una lástima que te hayas perdido la iluminación —continúa Kagami. —También fue notable.
Mientras los gritos de los gemelos Muray se calman, Marinette trata de sacudirse la sensación que sigue hormigueando sobre su piel.
Todavía está insegura sobre quién es su oponente, pero la jugada que acababa de hacer, la había hecho temblar.
Siente la totalidad del circo rebosando alrededor de ella, como si una red hubiera sido lanzada por encima de él, atrapando todo dentro de la valla de hierro, revoloteando como una mariposa.
Se pregunta cómo se supone que va a tomar represalias.
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Le cirque des Rêves (Adrinette/Feligette)
FanfictionSummary: El circo llega sin previo aviso. No hay anuncios que lo precedan. Simplemente está allí, cuando ayer no lo estaba. Dentro de las capas de lona a rayas negras y blancas es una experiencia completamente única, llena de asombros impresionantes...