Mi Maldito Error - Mia y Miguel RBD

Capítulo No.2

*Esta historia solo se centra en Mia y Miguel. Los demás personajes son secundarios.*

—Peter.... Vine a ver como está Mia... Yo... —dijo Miguel

Peter se le acercó con una mirada amenazadora y lo agarró por el cuello de la camisa. Miguel nunca lo había visto así, Peter era todo dulzura con él y con Mia, pero en ese momento su mirada no reflejaba nada de dulzura.

—¿Tienes una mínima idea de lo que hiciste? Después de mucho insistirle y tratar de calmar a mi niña Mía... me confesó lo que pasó.

Miguel bajó la mirada apenado y avergonzando.

—¿Como pudiste hacerle eso? Yo siempre pensé que Mia estaría protegida contigo, que estaría salvo...

—Yo... De verdad lo siento...

—No me digas que lo sientes y agradece que no te parto la cara en este instante. Vete de aquí, ya hiciste suficiente daño.

—No Peter, yo necesito hablar.....

—Peter... ¿Quién es? —preguntó Franco llegando a la puerta y dándose cuenta que era —Ah Miguel, pasa adelante

Miguel entendió por la reacción de Franco que no sabía nada aún, sino no le hubiera dicho que pasará.

—Con su permiso —dijo Peter con una mirada de pocos para Miguel y se retiró

—Claro Peter. Miguel pasa.

—Yo vine a ver como esta Mia...

Fueron a la sala de estar y se sentaron en el sofá.

—Ya... ¿Ya te dijo algo el doctor? —preguntó Miguel

—Pues está bien.. Bien...

—¿Habría algún problema si voy a verla?

—No —respondió Franco rotundamente —ahora no la puedes ver porque se esta bañando. Pero después va a comer conmigo y la voy a llevar al colegio.

—¿Cómo? O sea, ¿Ya va a regresar?

—Si, al principio no quería, pero la convencí. Miguel yo no sé que pasó entre ustedes, pero debe haber sido algo bastante fuerte. Tanto que Mia no se puede recuperar.

Miguel respiró profundamente, escuchar las palabras de Franco, recordar lo que le dijo Peter, sabiendo que su amor, su único amor, estaba sufriendo y todo por su culpa.

—Al principio no le quise preguntar, me pareció que podía ser una pelea de noviecitos y no me quise meter, pero realmente no para de llorar, esta muy triste. ¿Qué pasó?

Miguel se da cuenta de que le tiene que contar a Franco toda la verdad. A esa persona que le dio toda su confianza desde el primer día, aún cuando lo único que quería era vengarse de él.

Como decirle que había roto su confianza, que había lastimado a la única persona que ambos habían prometido proteger.

—Lo que pasa es que.... Lo que pasa es que yo la engañé.

—¿Qué?

—Si, mira Franco... Yo.... En ese momento yo no me sentía bien, yo estaba mal... Y... Perdí el control de las cosas... —dijo Miguel suspirando, dándose cuenta que sus palabras y explicaciones no podían cambiar el daño que había causado. Bajó la cabeza resignado. —Me acosté con Sabrina.

Franco no lo podía creer, no podía creer eso de Miguel, parándose del sofá dolido, furioso e impotente.

—Miguel... ¿Por qué? ¿Cómo le pudiste hacer una cosa así?