Mi Maldito Error - Mia y Miguel RBD

Capítulo No. 4

Miguel estaba perdido en sus pensamientos y en sus recuerdos, cuando Diego lo encontró para decirle que Sabrina estaba en el colegio y que lo estaba buscando.

La verdad era que Sabrina era última persona que queria ver y tampoco quería que Mia la viera, no quería hacerle más daño de lo ya le había hecho.

También recordó que ellos habían acordado encontrarse para ver los análisis, así que esperaba que Sabrina le diera el resultado que el anhelaba. Por lo que la encontró en la entrada de la cafetería.

—Hola Sabrina.

—Hola Miguel.

—Mira... después de todo lo que ha pasado... No sé... Se me olvido preguntarte... ¿Qué tal?... ¿Cómo te fue?

—Pues, justamente vengo del hospital.

—¿Y que pasó? —dijo sintiéndose en su interior aterrado de la que podía ser su respuesta.

—Pues me llamaron para darme los resultados de los análisis.

Miguel respiró profundamente, armándose de valor de lo que podría resultar.

—¿Y cómo salieron?

—Dieron.... Negativo.

—A ver Sabrina, ¿Estás segura?

—Si, los primeros salieron mal por todos los medicamentos que estoy tomando, pero...

Miguel sintió como le volvió el alma al cuerpo y el alivio de saber que Sabrina no estaba embarazada.

—Mira... Neta, nos sabes el peso que me acabas de quitar de encima.

—Que bueno Miguel —dijo pero con la intención de continuar en su vida. Miguel iba a ser suyo y nadie lo iba a impedir.

Miguel se sentía mejor, su felicidad no estaba completa ya que le hacía falta Mia, pero ya podía intentar arreglar las cosas con ella sabiendo que Sabrina no estaba embarazada.
Suponía que para Sabrina también era un alivio, ambos no estaban en edad para ser padres, así que le dio un abrazo.

Pero justamente en ese momento llegó Mia y los vio. Inmediatamente vio el cambio en su rostro y su dolor. Se separó de Sabrina inmediatamente pero ya era muy tarde y ya Mía se había ido corriendo.

Trató de alcanzarla pero no pudo, Mia había desaparecido. La buscó por todas partes, pero no la encontró. Fue a buscarla en su cuarto pero solo se encontró con Celina y Vico.

—¿Donde está Mia?? —preguntó desesperado.

—No sabemos donde esta Miguel —le respondió Celina

—Necesito encontrarla, por favor, díganme ¿Donde está?...No es posible que sus mejores amigas no sepan donde está.

—Mira Miguel, ya te dijimos que no sabemos donde está Mia y punto.

—Miguel, cálmate por favor... ¿Qué te pasa? —preguntó Vico bajando la escalera.

—Si... La verdad estoy un poquito nervioso —dijo tratando de calmarse —pero bueno, ¿No me pueden decir donde está?

—Mia no está, salió porque aprovechó la tarde libre —respondió Vico.

—Gracias... ¿Y donde está??

—Mira Miguel, no tenemos la menor idea de donde está, nosotras también nos morimos de hablar con ella, pero por tu culpa no podemos —le reclamó Celina

—A ver... A ver.. ¿Por mi culpa?

—Mia no quiere saber nada de nosotras por no haberle dicho la verdad, por tu culpa está pasando todo esto.