Capítulo 31

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Tom Hiddleston tenía planeada una romántica cena para la noche de navidad, pero en cuanto Ruby terminó de intercambiar mensajes con Simon se metió a su recamara y tomó su vieja laptop para comenzar a trabajar. Tom pidió dejar eso para otra noche y hacer algo con él, pero ella dijo que no podía posponer su trabajo con la banda, pues Simon le advirtió que tendría que tener listos unos cuantos posters para esa semana.

A Simon no le bastaba con haberse llevado a su novia a su fiesta de navidad, ahora la estaba poniendo a trabajar. Él trató de ocultar su molestia pues Ruby esa noche estaba muy contenta.

Ruby estaba más que feliz, había pasado una noche increíble el lado de Ricky, además pudo ser sincera con él y eso le quitó un peso de encima, pero justo en esos momentos en que lo único que quería era dormir se sentía bien trabajando en los posters del grupo. Aunque claro que notó que Tom se molestó, a ella no le importó, no iba a permitir que él arruinara su noche.



Los siguientes días Ruby se la pasó trabajando por las mañanas con las cosas de la tienda, y cuando tenía algo de tiempo libre lo dedicaba a continuar con el trabajo del grupo, dejó poco tiempo para pasarlo al lado de Tom y vaya que para ese momento él ya se estaba quejando por la nula atención que recibía de parte de ella.

— Solo saldrás a comer 30 minutos, ¿qué diferencia hay entre que hagas lo que sea que estés haciendo ahorita a dentro de media hora?— reclamó Tom, él estaba sentado frente al escritorio de ella esperando convencerla de salir a comer.

— Mucha, es media hora, William, esto debe de quedar para hoy, el show es en unos días— volvió a explicar por tercera vez, pues Tom no dejaba de insistir en querer llevársela.

— ¡Por Dios, Ruby! Debes comer algo...— comenzó a regañarla Tom cuando entró Stefan, pasó directo a uno de los pasillos centrales para buscar algunos cables.

— Ruby, no quiero meterme en algo que no me importa, pero estoy con Tom...— habló desde el pasillo central. — Debes salir a comer algo, has pasado casi tres días con eso, Simon entenderá que se lo envíes un poco más tarde de lo normal— Stefan se acercó a su escritorio. — ¡Sal a comer!

La chica se rindió, igual estaba por terminar.

— Gracias— le susurró Tom a Stefan, él solo le dio una palmada en la espalda y salió de la bodega.

— Ustedes se pusieron de acuerdo, estoy segura— Ruby pasó al lado de Tom y él la siguió un par de pasos atrás.

Ruby no estaba feliz por tener que abandonar su trabajo momentáneamente, le faltaba muy poco para terminar el poster de la primera presentación de Kaiser Chiefs, la cual tendría lugar el 31 de diciembre, faltaba muy poco para ese concierto y a ella le hacía ilusión poder pasar aquella noche con Ricky y el resto de la banda.

Después de navidad, en una de esas largas llamadas que ya solía tener con Wilson durante la madrugada le hizo saber que pasaría con él aquellas fechas, Ricky estaba muy emocionado por recibir el nuevo año al lado de Ruby.


Mientras esperaban a que les llevaran su pizza Ruby sacó el celular para escribirle a Simon, le diría que enviaría el poster en un par de horas pues en esos momentos estaba comiendo, lógicamente al bajista del grupo no le molestó, le dijo que aún tenían tiempo.

— ¿Piensas estar enojada todo el día conmigo solo por preocuparme por ti? – Tom se cruzó de brazos y se recargó en la mesa.

— No estoy enojada— Ruby se dispuso a responder el mensaje de Simon cuando Tom le arrebató el celular, antes de guardarlo en la bolsa de su pantalón alcanzó a leer que ella le estaba escribiendo a Simon, sintió unos terribles celos. — ¡Hey!— se quejó ella.

You Could Be MineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora