You Could Be Mine

Capítulo 54

Tom Hiddleston caminó por el pasillo de regreso al altar ante la atenta mirada de algunos de los invitados que decidieron aguardar un momento a que se reanudara la ceremonia. La mayoría murmuraba cosas mientras el avanzaba a paso lento, sentía que le faltaban fuerzas para llegar de nueva cuenta a aquel lugar en donde minutos antes estuvo parado al lado de Ruby, seguro que esa tarde comenzaría una vida a su lado.

Se paró frente a sus invitados y se aclaró la garganta, él nunca tuvo problemas para hablar frente a la gente, pero esa tarde sentía que las palabras no saldrían de su boca.

— Lo... Lo siento mu mucho— tartamudeó y se aclaró de nuevo la garganta. –Disculpen que los haya hecho perder su tiempo, hoy no hay boda... Jen... Jen les va a dar un par de indicaciones— dijo y recorrió una vez más ese pasillo, ahora prácticamente iba corriendo.

— ¡Tom!— le gritó Mark, pues Tom iba caminando demasiado rápido a la parte en donde se llevaría a cabo la fiesta. — ¡Tom!— gritó una vez más y el actor lo volteó a ver.

— ¿En dónde estabas?— preguntó Tom y caminó hacía él.

— Estaba investigando quién fue el idiota que dejó pasar a Ricky Wilson... Los de seguridad lo confundieron contigo, por la ropa— comenzó a explicar.

— ¡¿Qué no notaron que ya había comenzado la ceremonia?!— Tom se exaltó.

— No... Por cierto, Benedict dijo que me estabas buscando— habló.

— Sí... ¿Por qué nunca confiaste en Ruby?— se cruzó de brazos.

— Al principio solo presentí que no debía confiar en ella, tus otras chicas de la aplicación eran "sinceras" contigo... te querían por interés y se les notaba... Pero Ruby, nunca creí que fuera diferente a las demás. Entonces la noche que la llevaste por primera vez a tu casa la vi con Ricky platicando en el jardín, y ni siquiera platicaban, parecía que estaban peleando y Ruby lloraba... La verdad es que no escuché nada de la conversación— explicó Mark.

— ¿Y por qué no me dijiste?— preguntó Tom.

— Cuando te enteraste que le di el dinero me corriste... no creo que me hubieras hecho caso— aseguró Mark.

Su asistente tenía razón, no le hubiera creído nada, estaba tan enamorado de Ruby que sus palabras no hubieran logrado efecto alguno en él.

— ¿Qué pasó?

— Ruby fue honesta conmigo, dijo que estuvo conmigo por interés... y bueno, no fui al único al que engañó...— comenzó a explicarle a Mark.

Mark escuchó atentamente la explicación de Tom. Él siempre tuvo razón con respecto a Ruby: ella era una interesada.

— ¿Y entonces qué va a pasar con Love Way?— preguntó Mark, él parecía ser el único consciente de la aplicación.

— ¿Qué va a pasar de qué?— preguntó Tom.

— Pues todavía te quedan dos meses con ella, ¿no? Está en el contrato— señaló el asistente.

— Justo para eso te buscaba. ¿Qué propones?

— Pon la queja, ella estaba dispuesta a ponerla... Tú puedes y deberías hacerlo— aconsejó Mark.

— ¿Te haces cargo? La verdad es que yo ya no quiero saber nada de ella...Y sí tienes razón, ella estaba dispuesta a levantar la queja aquella primera vez. Lo peor de todo fue que esta segunda vez no estuvo conmigo por el dinero, le interesaba más mi familia que yo— Tom le pasó el celular a Mark.

— Tom, esperemos a mañana, ¿sí?— sugirió Mark.

— Amigo, ¿te llevó a tu casa?— preguntó Ben interrumpiendo la plática.