❝Tu aroma se disipó en el aire, tus mentiras ahora solo son ecos que resuenan en mis oídos, y las huellas de tus dedos, lejos de yacer simplemente en mi piel, ahora solo se aferran con fuerza, quemándome.❞
S E G U N D O L I B R O
Kita Nanami ya n...
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Capítulo largo.
Las primeras pastillas del día son las vitaminas, luego vuelvo a pegar el rostro a la almohada para dormir. Me paso todas las horas que juntas forman mañanas, tardes y noches enteras durmiendo, después, Hinami viene con comida. Ayer trajo su famoso arroz yakimeshi al cual apenas le di diez cucharadas, y hoy viene con un poco de fideos chinos del restaurante de nuestra calle.
Nirāni salió con su pareja, así que mi mentora solo compra un par de woks.
El individuo que poco a poco va creciendo dentro de mi estómago vuelve mi apetito más inestable que de costumbre, hoy devoro como loca la comida china, a diferencia de ayer o antier.
Y mientras como, Hinami está sentada a mi lado, en la cama, haciendo lo mismo.
ㅡMañana iremos por ropa bonita para el bebé, ¿qué dices? Detesto ponerle género a los colores, así que compraremos mamelucos rosas, azules, amarillos y los que más te gusten. Estaba pensando, si en unos meses no te conseguimos una casa donde vivir, podemos usar el cuarto de invitados aquí para él o ella, ¿qué tal?ㅡ vuelve a emocionarse con respecto al tema.
ㅡ ¿Puedo saber por qué tanto entusiasmo? ㅡ pregunto, observándola de reojo. Escucho su risa.
ㅡ Tienes razón, perdón. Es que me fascinan los niños.
ㅡ Pareces más emocionada que yo. ㅡ suelto.
ㅡ Es normal que estés así, no te sientas mal. Además, no todas las madres primerizas suelen sentirse emocionadas con la idea de tener un hijo. Unas incluso pasan por la etapa de negación.
Entierro los palillos en los fideos, y de esta forma los enredo en los mismos.
ㅡYa ni siquiera sé cómo sentirme. Nunca estuvo en mis planes ser madre, al menos no a los veinte.
ㅡ Ya no pienses más en eso, todo llega a su debido tiempo. Yo siempre quise ser madre, y mírame, cuarenta y nueve años y jamás he podido cargar a un niño mío entre mis brazos.
Mis labios se silencian cuando ella decide tocar su tema. Prefiero no preguntar sobre aquello, aunque tenga curiosidad por hacerlo.
ㅡ Por esa razón dejé a mi ex marido ㅡ continúa.ㅡ porque al saber que mi matriz infantil no podía hacer bien su trabajo, prefirió irse con otra mujer y tener una familia en secreto. Tuve que enterarme por mi mejor amiga.
ㅡ Qué imbécilㅡ gruño, arrastrando las palabras. ㅡ ¿Por qué tienen que hacer eso? Dicen quererte y luego se van sin razón alguna, parece que corremos con la misma suerte, Hinami-san.
Ahora es ella quién se queda callada.
ㅡ Y luego dicen que nosotras las mujeres somos las complicadasㅡ bromea, yo suelto una corta risa. Ya no tiene caso volver a derramar lágrimas, no ahora. ㅡ pero, ¿quién necesita un hombre? Lo único bueno que tienen es ese pedazo de carne que se cargan entre las piernas, y a veces ni a un buen pedazo llegan.
