Storms (+18)

Cap 14: Dramas y nuevos pretendientes.

La estructura del lugar es una de las más grandes que he visto, y claro, no soy experta en clubes, nunca había entrado a uno, pero de algún modo éste en particular luce un tanto extravagante ¿Todos los clubes son así? Por el bien de la existencia humana espero que no. No se necesita ser adivino como para percibir la testosterona y la adrenalina de las personas presentes. No imagino frecuentar esta clase de lugares todos los fines de semana, me sorprende cuan hermosa puede lucir Alice aún, después de tanta fiesta.

El ambiente dentro del club parece de otro universo, y es que, las diferentes coloraciones de las luces consiguen darle ese aspecto fresco y sofisticado que estoy segura, debe atraer a millones de personas por año. Me mantengo sujeta a la mano de Evan quien me conduce hacia unas escaleras, abriéndose paso entre la cantidad tan exagerada de personas que se pegan unos a otros.

Al llegar a unas escaleras alcancé a vislumbrar al otro lado de donde nos encontramos, al Dj y al equipo de técnico que lo acompañan. No puedo dejar de observar el aspecto de muchos chicos que tropiezan con nosotros, ese aspecto ya lo he visto antes en Lionel y ese solo pensamiento me pone nerviosa.

―¿Todo bien? ―pregunta Evan sobre mi oído, a lo que respondo alzando la voz.

―No estoy acostumbrada a este tipo de lugares.

―Ya te lo dije, No tienes de que preocuparte..., estarás bien, además el área VIP es muy diferente a esta ―vuelve a tranquilizarme, antes de colar su mano a mi cintura― Solo déjate llevar y confía en mí. Haré de esta la mejor noche de tu vida ―sus labios apenas y rosan el lóbulo de mi oreja, siendo eso suficiente como para hacerme sonrojar.

Las palabras del chico a mi lado logran desconcertarme, haciendo que una sonrisa nerviosa se escape de mis labios, mientras continuo con la vista puesta en esos ojos grisáceos que me observan traviesos. Nunca había visto este lado de Evan, conquistador y vanidoso. Este chico parece bastante cómodo en este lugar, se mueve con seguridad, muy diferente al joven serio y aislado que normalmente deja entre ver en el internado. Sus ojos grises hoy más que nunca brillan con intensidad, permitiéndome disfrutar de esa nueva faceta, además luce muy atractivo. El color vinotinto de la camisa abotonada que se ajusta a sus brazos tatuados, realzaba el color de su piel, mientras que el pantalón negro le da ese toque relajado que no acostumbro a ver en él.

La conversación frente a nosotras me despierta de mi laguna mental y me concentro en James, quien se detiene frente a nosotros, extendiéndole al señor robusto y de semblante rudo nuestro código de reservación, haciendo que éste inmediatamente le haga entrega de nuestras tarjetas VIP.

―Adelante ―dice James abriéndonos paso.

Jadeo sorprendida al visualizar el área que se extiende frente a mis ojos. Es un área descomunal y bastante elegante. A nuestros pies se despliega la niebla artificial proveniente de una máquina de humo―típico en las discotecas―de alguna manera esta clase de efecto parece conservarse solamente aquí, gracias a la pequeña puerta que separa esta zona del área general. Por otro lado, las luces en este piso hacen una transición entre los colores dorado y naranja, lo que cobra todo el sentido al percatarme del cartel en la pared a mi izquierda, donde descansan unas luces de neón que citan el renombre del espacio "VIP Gold Coin"

Las pantallas en las paredes trasmiten el video de In The Name Of Love de Bebe Rexha y Martin Garrix, canción que el DJ no para de mesclar y que provoca un disparo en mi estómago.

¡Joder! Esto sí que es subir de nivel.

Las mesas de vidrio permanecen repletas de bebidas alcohólicas, mientras los sofás de tela conservan esa apariencia adecuada para los invitados. Mi ansiedad va en aumento cada que noto algo de mi interés, y las ganas de divertirme acrecen conforme avanzábamos a nuestro lugar.