*Narra Javier
Fue un día ajetreado, hubieron bastantes pacientes. El que más me dejo asombrado fue un señor. Estaba ya en sus 60 años y empezaba a sentir depresiones e instintos suicidas. Todo por que su hijo lo rechazaba. Eso me impactó mucho. Espero no tener que pasar por el rechazo de un hijo nunca.
Me dirigía a casa, estaba cansado. Sólo quería llegar y pasar tiempo con mi hijo y mi esposa. No se por que sentía que los extrañaba más que nunca. Estuve como 15 minutos en el tráfico.
Al llegar, olfateo un rico aroma a.... ¿Carne molida? Se me había olvidado que hoy es "martes de taco". No faltaba Damián corriendo hacia mi para saludarme. Dontai lo acompañaba y entre los dos llenaron mi cara de besos y baba.
Pero faltaba algo, mi bella esposa me esperaba en la cocina. La saludé con un beso. Se veía.... Diferente. Dicen que las embarazadas tienen un brillo especial. Pues en ese momento Lucía se notaba resplandeciente.
- ¿Adivina que? Fui hoy a la cita y vas a ser papá.... ¡De gemelas!- dijo ella con cierto entusiasmo y extendía sus brazos mientras me abrazaba y me felicitaba.
Iba a ser papá nuevamente, de gemelas. Esto sin duda iba a ser un proceso difícil. Pero no imposible. Las nenas siempre son de papá.
Tuvimos una cena llena risas y discutimos el día tan ajetreado que tuvimos. Yo lavé a Damián y lo llevé a su cama para dormirle.
- ¿Quieres que te lea un cuento?-le pregunté a mi hijo.
- ¡Si! ¡De dragones!- dijo el muy entusiasmado. Esta era una oportunidad muy buena para hablarle a Damián sobré la maternidad y sus hermanas.
- Me parece bien: Había una vez en un castillo lejano, una dragona que tenía un pequeño dragóncito. Mamá dragona amaba pasar tiempo con su hijo. Ella pronto tendría otro bebé. Quizás serían 2 más. El pequeño dragóncito pensó:"mamá no podrá hacer todo sola. ¡Yo tengo que ayudarle!" Entonces cada vez que alguien venía atacarles salía el valiente dragóncito a defender su familia. Y todos en el pueblo de dragones lo querían. Un día, los huevitos que puso su mamá dragona se abrieron. De allí, salieron 2 pequeñas dragóncitas. El dragóncito las amaba mucho y las defendía siempre. Como él era muy fuerte y valiente siempre estaba ahí para ellas y ayudaba a su mamá a cuidarlas. Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
- ¡Yo quiero ser valiente, papá! ¡Yo quiero ser como el dragón! - dijo Damián brincando en su camita.
- Me parece bien. Cuando vengan tus hermanitas tu podrás ser el dragóncito que las cuide y las defienda ¿si? - le conteste mientras trataba de volverlo a acostar.
- ¡Si! ¿Cuándo vienen? ¿Mañana?- contestó él muy ansioso.
- Bueno Dami, hay que esperar un poco. Pero ya eres valiente y fuerte. Buenas noches, te amo.-
Damián me pidió que me quedara con el un rato y luego se durmió. Estaba muy contento, por fin Damián aceptó a las hermanitas. Me llenaba de mucha alegría.
Cuando iba a dormir vi a Lucía profundamente dormida. Se veía tan hermosa. Aunque estaba roncando un poco, no cambiaria dormir junto a ella por nada del mundo.
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Gracias por leer. El próximo capítulo es un poco más triste. Pero tranquilas no es triste el resto de la novela. Las quiero.
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¿Qué hago con 6 hijos?
Teen FictionUna serie llena de ternura, Lucia y Javier se conocen desde muy pequeños se han declarado un amor eterno. Quieren tener al menos 6 hijos. ¿Cómo lograrán sobrevivir día a día con tantos hijos?