¿Qué hago con 6 hijos?

Que te parece si...

*Narra Lucía
3 enero 2013
7:30 am
Stephanie en multimedia

- Damián, come. Papá te va a llevar a la escuela. Stephanie baja de ahí. ¡Javier! ¿Cuándo piensas bajar? - decía mientras sacaba a Stephanie de la nevera. No había escuchado la alarma y me levanté tarde. Traté de vestir a Damián los más rápido posible para su escuelita y poder hacer el desayuno.

- Ya voy, no ajorres. La belleza tarda.- decía Javier tratando de ser gracioso.

- Javier no estoy jugando. Damián llegará tarde. - dije molesta.

- Ya estoy aquí, hola hermosura. ¿Cómo esta la hermosa princesa? - decía Javier besando la cabeza de Stephanie.

- Un beso Damián, que te vaya bien hoy. Te amo. - dije abrazando a Mi hijo. No podía creer que ya esté en la escuela. Se qué sólo es Pre-escolar pero aún así me siento vieja. Sólo era ayer cuando por primera vez pude lactarle y me sentí la mujer más completa.

- ¿y Joanne? - pregunto Javier dándome un beso.

- Durmiendo, como siempre, ya váyanse. Te amo.- dije mientras impulsaba a Javier para que se fuera.

Volví a entrar y vi a Stephanie junto a Dontai sentada en el piso jugando con la mantequilla. Seguramente la había sacado de la nevera y pensó que sería gracioso embarrarse con ella. Dontai lamia su cara y ella parecía no importarle. Ahora lo nuevo de Stephanie era abrir la nevera para sacar lo que tuviera a su alcance. Joanne se la pasaba durmiendo. Se qué cuando empiecen a ir a los colegios tendré que despertarla a las 3 de la mañana.

- Stephanie, la mantequilla se come, no se usa de humectante. - Stephanie me miro y sonrió de manera traviesa. Se parece tanto a su papá. Tanto trabajo que pase para traerla a este mundo y ella me paga pareciéndose a su papá. - Vamos a limpiarte y a ver si tu hermana por fin se despierta.- subí al cuarto de las gemelas y Joanne estaba despierta. Jugaba en su cuna.

Lave a las chicas y las vestí para pasar un largo día en la casa. No pensaba salir a ningún lado. Baje con mis hijas a la sala y prendí el televisor. Allí sintonicé un canal para bebés y Las chicas parecían hipnotizadas. Yo rei, es increíble lo que la televisión puede hacer.

- Tu y las chicas deberían tomar un poco de sol. Te amo.- recibí un mensaje de texto de Javier .

No era mala idea salir al parque. Estaba cerca de la casa y podríamos ir caminando. Es un buen ejercicio.

Cambie mi camisa y salimos al parque. Stephanie y Joanne estaban en el coche. Eran las 9:48am. El parque consistía de unas chorreras y unos columpios. También tenía un pasamanos. Decidí irme a los bancos y sentarme. Allí estaba una señora como en sus treinta años. Tenía un niño de 5 años. El pequeño se había caído del columpio y la madre estaba pendiente a su teléfono. «Levántate cariño» fue lo único que le dijo sin dejar de mirar el teléfono.

- Usted es la peor madre que he visto, su hijo se acaba de caer. ¿Cómo no puedes ir a ver si todo esta bien? - dije molesta.

- ¿Disculpe? - dijo ella con actitud arrogante.

- Mírame a los ojos, ¿Eres retardada? Tu hijo pudo haberse dado un golpe fuerte y tu como sí nada en tu teléfono. Mujeres como tu no deberían ser madres.

- Quédate pendiente a tus mocosas y yo me encargo de lo mío.- dijo refiriéndose a mis hijas. Sentí como la adrenalina corría por mi cuerpo. Justo cuando iba a tirar el primer puño llega otro papá y me detiene.

- Oye, oye... Tranquila. - decía el muchacho. Respire profundo y salí del parque. Jamás me había sentido con tanta adrenalina. No creo que sea normal. Camine hacia mi casa y trate de abrir la puerta. No encontré la llave, estaba tan molesta que le di patadas a la puerta. No se que pasaba conmigo. Cuando miré a las niñas ellas me miraron extrañadas. Joanne río de manera tierna, parecía burlarse de mi. Entré y me senté en el sofá nuevamente. Puse a las bebés en el piso. Tenía que calmarme y respirar profundo. ¿Que pasa conmigo? Regularmente soy dulce y gentil. Ahora estoy que no se me puede ni hablar.