Oᥒᥱ-Shots Mᥲrkᥴhᥱᥒ

Ɖɛar Ɓullɣ

–¿Alguna vez te has detenido a hablar con él o a indagar en su vida?– Jisung lo miró mal.

–Hyung, ¿quieres que sea el terapeuta personal de mi bully? ¿Qué está mal contigo? No debí contarte, ni siquiera te importa lo que me pase–

Mark se levantó rápidamente al notar que su hermanito entraba en crisis por su poco tacto al hablar. Se sentó a su lado y comenzó a acariciar su espalda con delicadeza.

–De acuerdo, yo lo haré –El menor volvió a mirarlo desconcertado, ¿acaso no entendía la situación? –Y si no funciona, le daré sus buenas patadas en el trasero– Ambos rieron, pero el mayor no lo tomó como una broma.

——

Iba caminando y pateando las piedras que se encontraban en su camino cuando escuchó su nombre –¡Zhong Chenle!–

Se giró con curiosidad y se encontró con un chico poco más bajo que él. Sonrió. Lo conocía bien.

–Supe que molestas a mi hermano– La voz dura del mayor hizo que Zhong se encogiera un poco en su lugar, odiaba ese tono, lo hacía sentir inferior.

–Pues sabes mal. No es mi culpa que se lo haya tomado a pecho –Respondió con simpleza para seguir con sus pasos e ignorar al otro, sin embargo, éste lo tomó del brazo y lo arrastró hasta su casa.

Por más que Zhong exigió a gritos que lo soltara o le explicara a dónde se dirigían, el canadiense simplemente hizo oídos sordos ante su petición, al igual que todas aquellas personas que los veían desde la distancia con indiferencia.

——

Jisung se levantó aterrado –Hyung– Tartamudeó un poco al verlo con cierto chino en la puerta de su hogar.

–Hola, Sungie– Saludó a su hermano y continuó con su camino hasta llegar a su habitación.

Empujó al más bajo para que entrara sin mayor forcejeo y luego cerró la puerta con seguro.

El menor lo miró con terror ¿Qué clase de demente te arrastra hasta su casa y te encierra con él? De seguro me mata, pensó.

Entonces la mano del moreno se posó en su hombro y le quitó su mochila con cuidado.

–Cuéntame de tu familia– El otro pestañeó varias veces –Sé que no tienes amigos y tampoco secuaces; que sabes tocar instrumentos complicados y muy costosos; tu promedio es bueno pese a que nunca haces los trabajos; y los reclamos que hay contra ti siempre quedan en nada. Eso quiere decir que alguien te encubre y debe ser tu familia, por supuesto–

–No sabía que eras detective ni que Jisung era un soplón. Es bueno saberlo, así tendré más cuidado–

–Escucha, no estás en condiciones de hacerte el sarcástico– El otro miró a su al rededor, era cierto, y el miedo en su pecho se lo confirmaba.

El canadiense comenzó a mover unos papeles de su escritorio hasta hallar el que necesitaba.

–Éste eres tú y, si no me equivoco, estos son tus padres– Le mostró unas imágenes –Encontré muchas así en internet, pero ninguna de los tres, eso me hace pensar que la relación distante que tienes con ellos es el motivo de tu conducta...– Y agregó –Terrible–