Imperfecto [Disponible En Físico] |JungHope| ♡

Capítulo 22

Tres días pasaron para que Hoseok fuera dado de alta y finalmente todos regresaron a sus casas. Jungkook y el pelirrojo volvieron a la casa de los Señores Jung donde el padre Omega los recibió con una gran cena. Estaba feliz de que Hoseok volviera saludable a casa sin importar lo que hubiera sucedido.

Jungkook estuvo pensando en aquello durante los tres días, todos parecían ignorar el tema de lo que había sucedido y se enfocaban solamente en Hoseok, mientras que Hoseok ignoraba el tema de su salud y se enfocaba en lo que había sucedido. El Omega aún continuaba algo triste, pero Jungkook podía entenderlo, él mismo aún pensaba que era algo muy difícil de superar.

Comieron todos juntos mientras guardaban silencio ya que todos estaban sumamente agotados por los desvelos del hospital. Pero el silencio no fue nada incomodo, fue un silencio familiar, de esos en los que todos están de acuerdo en que lo mejor es evitar cualquier tipo de conversación que pudiera hacer recordar o hacer sentir extraño al Omega, pero mientras todos pensaban en esto, Hoseok pensaba en si aún seguía en pie aquello de que le dieran toda la comida que pidiera.

Tenía un fuerte antojo de helado que no podía comprender, porque él nunca fué antojoso, pero por alguna razón toda la situación le había dado ganas de comer cosas dulce, específicamente un helado. Bajó los palillos con los que comía la deliciosa cena y con ellos se bajaron sus orejitas. Jungkook lo volteó a ver casi entrando en pánico al ver que su Omega cambiaba de humor.

Tomó la mano del Omega y entonces ambos se vieron a los ojos.

─ ¿Estás bien? ─ Le preguntó al pelirrojo haciendo que éste se sonrojara.

─ Es que tengo ganas de... ─ Jungkook no escuchó lo que Hoseok le dijo ya que al final terminó balbuceando.

Se acercó un poco más a su Omega inclinando la cabeza, para escuchar mejor.

─ No te escuché, ¿Podrías repetirlo? ─ Preguntó, el pelirrojo asintió.

─ Es que tengo ganas de... ─ El Alfa parpadeó confundido, no había entendido otra vez. Los señores Jung observaban divertidos la situación.

Jungkook se corrió ahora hasta con su silla y prácticamente colocó su oreja en la boca del Omega.

─ ¿Puedes repetir una vez más?

El pelirrojo suspiró avergonzado, aún no se acostumbraba a pedirle cosas a Jungkook y peor cosas como un helado. Pero es que de verdad tenía tanto antojo de helado que hasta sentía un hoyo en el estómago.

─ Helado... ─ Susurró, sonrojándose más.

Jungkook se separó y miró a su pequeño Omega, le sonrió porque ver que Hoseok tuviera ganas de algo era como un milagro después de la última semana.

─ Me encanta el helado. ─ Comentó el Alfa. ─ Hay un lugar aquí en la ciudad que es mi favorito para comer helado, podemos ir cuando termine la cena.

Las orejitas de Hoseok se levantaron alegres y una gran sonrisa se dibujó en su rostro.

─ No lo consientas tanto, se va a acostumbrar. ─ Le dijo el padre Omega a Jungkook con tono burlón.

─ Dice el adicto consentidor. ─ Respondió el padre Alfa haciendo que todos rieran y que el padre Omega se empurrara en su asiento. Ésta le iba a costar caro al padre Alfa o al menos eso pensó Jungkook.

El pequeño Omega terminó su comida a velocidades inimaginables para poder ir por helado. Estaba tan emocionado que Jungkook tuvo que tragar su comida también para que el pelirrojo no acabara la cena sólo.

Ambos se pusieron de pie y se despidieron de los señores Jung mientras se dirigían a la salida. Abrieron la puerta y ambos dieron un gran salto del susto al encontrarse con Namjoon frente a ellos.