Epilogo

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Dylan

Desperté, sintiendo pequeños y suaves besos por toda mi espalda. Me encantaba amanecer con Nika, pero sabia que esta vez nos habíamos pasado y habrían problemas.
Escape por la ventana de mi cuarto para venir y pasar la noche con mi compañero, quería empezar mi cumpleaños con él y si que me hizo sentir un feliz cumpleaños al dar las doce. Mis padres al descubrirlo, iban a intentar matarme, pero no había manera de ocultarlo.

Esta vez, mientras Nika y yo hacíamos el amor le pedí que me marcara y él no dudo en hacerlo. Pero ahora con los rayos del sol colándose por las cortinas, no podía evitar caer en cuenta de que mi padre al descubrirlo, mataría a Nika con sus propias manos.

-Buenos días cumpleañera ¿Te duele?- pregunto besando su marca, la cual aún picaba un poco.

-Buenos días mi amor, no, solo pica.- respondí, volteándome para quedar cara a cara con él.-¿Qué haremos ahora? Debemos enfrentar al osito de peluche.

Con solo esa frase, la sonrisa de Nika menguo. No era tan fácil decirle al comisario del pueblo que el día del cumpleaños número dieciocho de su hija, la marco como su compañera. Si por mi padre fuera, esto sucedería recién en mi cumpleaños treinta y tres, como mucho.

-Dudo mucho que siga siendo un oso de peluche cuando sienta tu olor. ¿Tienes al alcance tu bastoncito Bo Peep? Creo que necesitare algo para defenderme.- escondí mi rostro en su pecho. ¿Es que nunca lo olvidaría?

-Si lo pensamos de esa manera vaquero, ¿Crees que mi padre te desafié a un duelo? Woody ¿Estas listo para las pistolas al amanecer?

La cabeza de Nika cayo hacia atrás y escuche su gruñido, ahora que lo pensaba, no era divertido, mi padre era bastante impredecible y podría sugerirlo.

-Ni lo digas, soy un hombre lobo muerto. Me duele pensar en toda la tortura que ejercerá sobre mi.

-Yo te protegeré.-  esperaba no llegar al punto en que mi padre enloqueciera, pero era la única forma en que podía visualizarlo.

-Dylan te amo, pero si tu padre viene a por mi, tu no interfieras. Se que no se atreverá a lastimarte, pero no quiero correr el riesgo.

Clave mi mirada en el techo, suspirando unas dos veces. Sabia que estábamos jodidos, demasiado jodidos, pero no me arrepentía de nada .






                                        (***)





-¡Te voy a matar, maldito infeliz!- cubrí mi rostro al ver el grado de furia que había tomado mi padre al verme. De no ser por Robert, Nathan y Michael, ahora mismo habría tacleado a Nika.

-Papá no hagas esto, sabias que esto pasaría, tu lo hiciste con mamá.

-Ahora no digas nada Dylan, ya hablare contigo. ¿Ahora te escapas? No solo eso ¿Te acuestas y te dejas marcar por él?- gruño, entrecerrando los ojos hacia un Nika un poco intimidado.- ¿Qué paso con mi niña pequeña?

-Ya crecí, no me quedaría así por siempre.

-No, esto no esta bien. ¡Ya suéltenme maldita sea! ¡No me podrán retener por siempre Bouchard, date por muerto!

-Basta Benjamín, estas haciendo una escena. Yo a su edad hacia bastante que había tenido sexo.

-Summer, no digas eso, están los niños. Faith vete a tu cuarto y lleva a Laurie contigo.

-Lo siento papá, ya escuche a mamá y Laurie también lo hizo.

-¿Ven lo que provocan? ¿No pudieron resistirse unos años más? ¿Por qué el maldito apuro?

Por motivos religiososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora