Mushroom Kingdom Middle School

Deseos

Temporada IV: Capítulo XXV

Ya había oscurecido, se aproximó la noche en la ciudad de Nueva York. A Peach le habían traído la suficiente ropa para estar aquí por una semana lo cual se tomó su ducha nocturna.

Al terminar se puso su ropa interior y luego se puso una toalla cubriendo la mayor parte de su cuerpo saliendo del baño de la habitación de Mario. No se sentía tan acostumbrada al tener un espacio tan pequeño pero se sentía agradecida y cómoda.

Estaba apunto de tirar la toalla al suelo sin embargo fue sorprendida por el chico a quien le pertenece la habitación.

—¡Lo siento, no me acordaba! — Gritó apenado y cerró la puerta con firmeza.

Aquel incidente causó acelerarle el pulso a la princesa y no pudo evitar sonrojarse de la pena. Hubo varios segundos de pensamiento hasta que ella misma decide cambiarse a su pijama, que consistía en un conjunto de una camisa blanca y un pantalón de tela rosa pastel, pero eso sí, no era cualquier tela, era finísima y muy suave para la piel de la princesa. A su vez se puso sus pantuflas y decidió salirse de la habitación de Mario, quien se reencontró con éste al bajar las escaleras.

Hicieron contacto visual pero de pronto el joven Luigi hizo interrumpir el incómodo momento poniendo sus brazos alrededor del par.

—Qué bueno que los veo juntos, mamá me dijo que la cena estaba lista.

Dicho esto se aleja nuevamente, no sin antes juntarlos un poco causando que ambos chicos se sonrojaran. La princesa Peach quería optar por alejarse y dirigirse al comedor, sin embargo Mario la toma con su mano sana, diciendo:

—Lamento aquel incidente, sinceramente no me acordaba de que te vas a hospedar en mi habitación...

—No te preocupes Mario, solo fue un accidente. — La rubia comentó con alivio y reposó su mano encima de la de él — A la próxima hay que tocar la puerta, no queremos toparnos con desgracias ja ja.

—Sí, seré más precavido. — A Mario se le soltó una pequeña risa y soltó de Peach — Si te hace falta algo ya sea alguna almohada o algo así no dudes en pedírmelo.

—Oh no te preocupes, de hecho tu habitación es muy cómoda... por cierto, ¿dónde dormirás?

—Con Luigi — Él responde con un suspiro pesado —, o en la sala... porque dudo que él me deje dormir.

—¿Y eso por qué? — Preguntó un poco curiosa — ¿Tiene pesadillas?

—Ehhh te puedo decir que habla solo, a veces dice cosas muy extrañas. Pero si no habla en las noches siempre ronca, ¡un tractor es menos ruidoso que mi hermano!

—Ja ja, ya veo... — Cubrió su boca para evitar reírse de su amigo.

—Pero bueno, creo que ya nos estamos saltando la parte más importante... ¡la cena!

Ambos encaminaron juntos hacia el comedor donde Marco y Luigi ya estaban sentados en sus lugares. Mario se sentó a un lado de Luigi y Peach se sentó en el asiento que estaba entre Mario y su padre. A decir verdad la princesa se sentía un poco incómoda ya que era la primera vez que se quedaba a dormir en una casa de chicos.

Louise ya tenía los platos listos y fue dándolos a cada quien su plato, Peach respondió con un dulce "gracias" mientras que el resto al recibir su platillo rápidamente fueron devorándolo como si nunca hubiesen comido antes.

—¡Ajem! — Louise expresó molestia y se sentó en el asiento libre.

—Gracias... — Mario, Luigi y Marco comentaron al unísono con algo de pena.