Una lucha sin héroes. [Editando]

Capítulo 25

—¿Por qué tú también vienes? —Lo observó de reojo y frunció el ceño—. ¿Crees que no podremos solos?

—No, sé que eres muy capaz —admitió serio. La observó de reojo mientras luchaba. Suspiró y preguntó—: ¿Seguirás distanciando a todos?

Ciel guardó silencio ante aquella pregunta. Damián se había limitado a observar y escuchar, mientras luchaba. Tenía la esperanza de saber del cambio drástico en Ciel.

—… Esta no eres tú —negó con la cabeza. Ciel abrió los ojos a más no poder, esas palabras resonaron en su mente, frunció el ceño y se mordió el labio inferior mientras apretabas sus puños.

«Lo sé. Ya sé que no soy yo misma, pero ¿Cómo podría actuar de la misma manera que antes? No puedo ignorar todo lo que ha pasado».

—… No es de su incumbencia, Tenma-sa…

—¡No me vengas con eso! —La interrumpió con el ceño fruncido—. ¿Dices que no es de mi incumbencia? Te recuerdo que crecimos juntos, ¿Uhm? —La observó de reojo por un instante y volvió a concentrarse en la lucha—. Hasta ahora, no tuve oportunidad de hablar contigo, evitas a todos, sin importar quien sea ¿Acaso tengo que esperar a que haya algún incidente para hacerlo?

Ciel guardó silencio, sabía que Tenma tenía razón. Sin embargo, no podía simplemente quedarse callada. Convocó un golem y continuó luchando.

—¿Y qué quieres que haga? ¿Qué olvidé todo y deje que hagan lo que se les plazca conmigo? —Los tres golpearon espalda y atacaron juntos—. No me vengas con esa basura. Ya sé que soy egoísta, pero tengo derecho… —De repente guardó silencio llamado la atención de ambos. Ciel frunció el ceño y comenzó a preocuparse.

—¿Qué pasa?—preguntaron al mismo tiempo notando la preocupación de Ciel.

—… Algo anda mal —respondió dejándolos confundidos.

—¿A qué te refieres? —Damián insistió.

—Carl no está persiguiendo a Set y Nina, se dirige a la dirección opuesta.

—¿Eso no es bueno? —preguntaron ambos confundidos.

—Lo seria si no fuera por quien está en esa dirección… ¡Debo irme!

Antes de salir corriendo, Tenma la detuvo y dijo—: No pienso obligarte a nada, pero recuerda que no estás sola —sentenció serio sin vacilar, al mismo tiempo, sacó algo de su bolsillo y se lo mostró, era un collar. Ciel se sorprendió pero antes de decir algo, Tenma volvió a hablar—. Ve, nos ocuparemos de estas tres zonas.

—Sí —asintió firme para luego irse rápidamente.

—Me sorprende que aún lo tengas —Le dijo con una leve sonrisa. Tenma no dijo nada. Damián suspiró, ensanchó su sonrisa y agregó—: después de todo tu…

—Cállate —lo interrumpió Tenma haciendo una mueca de disgusto sin dirigirle la mirada.

—Sí, sí, como diga Tenma-sama —se burló Damián.

—Tch.

—¡Mayura/Shimón! —dijeron al unísono.

Mayura dio un salto en dirección a Shimón con sus garras listas para atacar, mientras él descendía en dirección a ella, de la misma manera.

—¡Kozan Kagutsuchi! / ¡Shuzen Zappa! —Mayura pasó al lado de Shimón y exorcizó a un kegare, de un solo golpe, que había detrás de este último. De la misma manera lo hizo Shimón, mientras descendía, sus alas desaparecieron y apareció un espada en llamas. Finalmente, Ambos chocaron espalda con espalda.

—¿Estás lista? —preguntó determinado con un sonrisa.

—Sí —aseguró de la misma manera.
Mayura tomó una postura inclinada hacia adelante viendo hacia abajo con sus dos brazos hacia atrás, un pie adelante, flexionando la rodilla y uno estirado hacia atrás. Shimón sacó un talismán y recitó un encantamiento.

—¡Gouten Karura!

En ese momento,  la espada de Shimón cambió por un equipo de vuelo con alas que representan una espada, siendo esta la verdadera forma de Shuzen Zappa. Ascendió rápidamente, al mismo tiempo en el que atacaba con sus alas en forma de espadas.

—¡Byakko no nanatsu no satorando! —Mayura se movía a una gran velocidad de un extremo a otro, por cada segundo que pasaba su velocidad aumentaba, creando una “jaula” para los kegares. Al mismo tiempo, atacó con siete poderosos golpes mientras saltaba entre los escombros.

Los Kegares no tuvieron oportunidad alguna, ya que Mayura se movía extremadamente rápido y la fuerza de sus ataque esa destructora.

Ambos terminaron rápidamente con esa zona y se reunieron para ir a otra.

—Esa era la técnica de la otra vez, ¿cierto?

—Sí —Mayura asintió sonriente.

—Has mejorado, es una buena técnica —aseguró Shimón con una sonrisa.

—Ciertamente, lo es —apareció con una sonrisa.

Al escuchar aquella voz, ambos voltearon inmediatamente y se sorprendieron al ver a quien tenían de frente.

«¿Qué…?»

—Maldición, ¿Por qué no lo noté antes? —Se reprendió así misma mientras corría con todas su fuerzas.

«¿Por qué no fue tras ellos...? ¿Fue porque aquí están los Comandantes Celestiales? —Negó con la cabeza—. Aunque fuese así, él tiene ventaja. Todos están tan ocupados manteniendo la isla a salvo debido a esos kegares problemáticos que él mismo trajo y aunque terminaran pronto, para él hay tiempo de sobra y aún no sabemos que más tiene planeado ¿o será que… no tiene nada? —Volvió a negar con la cabeza fuertemente, mientras fruncía el ceño—. No, es imposible»

Se detuvo de golpe mientras sudaba frío, comenzaba a preocuparse más. Cerró los ojos por un momento y comenzó a sentir la presencia de todos. Percatándose de las cosas que sucedían en ese momento. Abrió los ojos de golpe, nerviosa y corrió inmediatamente. No podía perder más tiempo.

«Ken-chan está trabajando con los de la casa Ujii para reestablecer la barrera y fortalecerla. Me imagino que ya lo sabe, así que no tiene mucho tiempo, entonces… ¿Qué es lo que ellos dos tienen que pueda beneficiarlo como para perder esta oportunidad de llevarse a los chicos…? ¡Maldición! Este tipo… ¿¡Qué es lo que pretende hacer!?

—Tch —rechistó molesta.

«Vamos, piensa. Tiene que ser algo mucho más importante que su proyecto como para ignorar todo esto. No creo que sea venganza, lo único bueno de ese idiota es que no se deja llevar por eso… entonces, ¿Qué es eso que lo beneficiaria al cien por ciento, mucho más que Nina y Set? —Frunció el ceño confundida—. ¿Mucho más que Nina y Set…?»

Abrió los ojos a más no poder y apretó sus puños fuertemente.

—¡Maldición, debo llegar rápido!