Capítulo 13

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¡Hola, aquí el otro capítulo!

Pd: No me había dado cuenta que no puse (en el cap. anterior) la fecha en la que salía el capítulo 13.

¿Qué cosas no? 

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Todos se encontraban sorprendidos. Nina estaba confundiendo sucesos pasados (no tan pasados) con el presente. Estaba asustada. De hecho, era más sorprendente que reaccionara hasta ahora y mucho más después de haber perdido a sus padres el día de ayer. Todo aquello era demasiado para una niña de cinco años. Verla así les partió el corazón.

—¡No quiero que les haga daño! ¡No quiero perderlos! —volvió a decir temblorosa. Ciel la abrazó con ternura para tranquilizarla.

—Ciel, ¿Qué está pasando...? —preguntó Mayura angustiada ante el estado de Nina. Ciel no respondió; en cambio, Nina parecía estar empeorando.

—Es demasiado para ella —respondió Kankurou en lugar de Ciel­, llamando la atención—. Es sorprendente que haya resistido hasta ahora. Su estado psicológico no es el mejor —comentó y Tsuki Zeze bufó en tono de burla, listo para decir algo—. No digas nada —ordenó Kankurou con el ceño fruncido.

—Tú no puedes darme órdenes.

Ciel chasqueó la lengua y apretó fuertemente sus dientes. Si no fuera por el estado de Nina, ya se hubiese abalanzado contra él, cosa que todos notaron. Set se acercó a Nina y le acarició la cabeza cariñosamente.

—Tranquila, todo estará bien —hablaron ambos con dulzura.

—Nadie nos hará daño —continuó Ciel.

—¡Ja! Después de todo...

—¡Ya basta, masa! —ordenó Tenma con el ceño fruncido, sorprendiendo a todos. Él mejor que nadie conocía ese sentimiento. Ciel lo observó y le agradeció con la mirada. Ambos habían experimentado ese sentimiento de una manera u otra.

—Tranquila, no nos separaremos de ti nunca. Lo prometo —dijo Ciel de manera serena, abrazándola con ternura.

Unos minutos después, Nina había dejó de llorar. Yacía acurrucada en el pecho de Ciel.

—Nunca estarás sola —agregó Set de la misma manera acariciándole la cabeza. Nina asintió cansada por tanto llorar, extendió su brazos a Set al estar segura que Ciel no haría nada. Set por otro lado, encantado la cargó en sus brazos. Nina enrolló sus brazos en el cuello de él y se durmió debido al cansancio mental. Ciel al notarlo, volteó a ver a Tsuki Zeze de manera tranquila, pero con una mira tan fría que parecía que atravesaría su piel.

—Te lo dije ¿no? —Habló severa y duramente. Tsuki tragó en seco—. Esta es mi última advertencia...

—Ciel, es suficiente —ordenó Arima serio, quería terminar con todo eso. Ciel lo observó con el ceño fruncido.

«¿Suficiente...? ¿Por qué me detienes a mí...?», pensó molesta a punto de replicar. Sin embargo, fue interrumpida antes que dijera algo.

—Lo siento Arima-sama, pero con todo respeto Zeze-sama ha iniciado todo —habló Mayura con el ceño fruncido. No estaba de acuerdo con la decisión de Arima, si debía detener a alguien era a Zeze no a Ciel, es lo que ella pensaba.

«¿¡Mayura!? ¡¿Qué estás haciendo?!», pensó Shimón sobresaltado.

—Me he mantenido en silencio, pero no puedo simplemente ignorar lo que ha provocado. Tampoco pienso tolerar como los ofende a ninguno de ellos. Creo que el enojo de Ciel es justificable, en cambio sus palabras no. Ciel nació en esta isla, deberían conocerla. Y también, debería actuar más acorde a su posición y no discriminar de esa manera egocéntrica y cruel. Me gustaría saber, ¿Odia a mi hermana? —preguntó Mayura seria, sorprendiendo a todos. Tsuki solamente guardó silenció incapaz de responder.

Hubo silenció por unos minutos.

—El que calla otorga... —dijeron Benio, Rokuro, Mayura, Shimón, Tenma, Ciel y Set. Todos a excepción de Ciel estaban sorprendidos ante ello, no podían creerlo.

—Siendo así, le pido de la manera más atenta que deje de atacar a Ciel. Ella no le ha hecho nada a nadie y si tiene algo en contra ella, aquí estoy yo —declaró seria con el ceño fruncido.

—Ten cuidado con lo que dices —amenazó Tsuki de manera hostil.

—Mejor cállate de una vez, tío.

—¡Ya fue suficiente! —dijeron Shimón y Tenma al unísono, serios. Estaban molestos ante la actitud de ese anciano.

—Sí, es suficiente —habló Ciel, llamando la atención y se dirigió a Zeze con una mirada fija—. Y es por eso que diré esto: Si te acercas a ellos, si los miras, si hablas o piensas algo sobre ellos, te mataré —sentenció seria sin vacilar con una mirada penetrante—. No me importa a que casa pertenezcas o si me gano el odio de Miku-sama o de todos en la isla, cosa que no sería nada nuevo. Mantente alejado de ellos. No creas que soy la misma chica ingenua que dejaba que todos la pisotearan, que hacia cualquier cosa para poder conseguir un plato de comida. Y por último, ten más cuidado con lo que dices, no pongas en vergüenza a Miku-sama y a la casa Zeze —dijo tranquila de manera fría. Tras escuchar esas palabras tragó en seco, nervioso y sudando frío.

—Ahora, Arima-sama —Ciel llamó su atención—. Si no es molestia para Mayura-sama, nos quedaremos en la casa Amawaka.

—N-no es ninguna molestia. Son bienvenidos —mencionó Mayura forzando una sonrisa.

«¿Por qué me llamó "Mayura-sama"?», pensó desilusionada.

—Bien, entonces ya está decidido —afirmó Arima—. Con esto doy finalizada esta reunión —anunció.

Aún finalizada la reunión, había un ambiente tenso. Todos estaban inconforme por lo que había pasado. Si nadie había dicho nada, era por respeto a Arima y lo que este representaba.

Arima suspiró y agregó—: Una cosa más —Captó la atención de todos—. Tsuki Zeze, tienes prohibido relacionarte con ellos. Esta es una advertencia, para la próxima, que espero que no haya, serás castigado ¿Entiendes?

—S-sí, Arima-sama... —tartamudeó nervioso sudando frío.




Todos salieron de aquella habitación no muy alegres. Había sido un desastre y muchas cosas pasaron.

—Ciel, vamos a casa. Nina necesita descansar y ustedes también —mencionó Mayura amablemente con una sonrisa. A pesar de todo, estaba feliz por tener a su hermana de vuelta.

—Sí, gracias... —respondió con una leve sonrisa.

—¿Ya se van? —preguntó Shimón apareciendo.

—Sí —contestó Mayura. Shimón la observó fijamente por unos segundos—. ¿P-pasa algo? —preguntó nerviosa.

Suspiró rendido y pensó: «Bueno, no importa... Después de todo, lo hizo por su hermana. Simplemente Mayura es admirable.»

—No —negó y le sonrió—, no es nada.

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Espero que les haya gustado.

Proximo Capítulo: Viernes 31/07/2020.

Adiós y gracias por leer.

Una lucha sin héroes. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora