Capítulo 10

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Dedicado a: hinatacuteruser93715416Anto_Luna y Holawuehace

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—Damián está vivo.

Sus ojos se abrieron de par en par y sus labios se entre abrieron, estaba atónita. No podía creerlo.

—¿...V-vivo...? —balbuceó desconcertada con la mirada baja—. ¿Damián... está vivo? —inquirió levantando la mirada con los ojos cristalizados.

—Sí —afirmó Arima y los demás asintieron.

—¿¡Que hay de Kai...!? —se sobresaltó, pero nadie contestó. Bajó la mirada y apretó sus puños—. Entiendo... Kai realmente murió...

—Cuando llegamos a magano, Kai ya estaba muerto y, Damián... si hubiésemos llegado un poco más tarde... estaría muerto —comentó Kengo serio.

—Sin embargo, Damián perdió la memoria —agregó Miku.

—¿Qué...?

—Él... no recuerda quien eres y lo que pasó aquel día —mencionó Kankurou suavemente—. A parte de eso, recuerda todo lo demás.

—En otras palabras, no recuerda nada que tenga que ver conmigo ¿cierto?

—Sí —afirmaron todos.

Un silencio incomodo inundo la habitación por unos minutos.

—Así es mejor —aseguró Ciel.

—¡¡Ciel!! —exclamaron Set y Nina entrando a la habitación, alegres.

—¿¡Nina, Set!? —se sorprendió de verlos, antes de decir algo más ambos se le tiraron encima, cayendo los tres al suelo—. Auch...

—¡Estábamos preocupados! —exclamaron ambos.

—Hmm... chicos... ¿Podrían...?

Set y Nina inmediatamente se levantaron y Set le extendió la mano a Ciel para ayudarla y ella la aceptó.

—Me alegro que estén bien —les sonrió sinceramente.

—¡Tonta! —exclamó Set, mientras Nina hacia un puchero molesta.

—¿Eh...? —pronunció desconcertada y sorprendida al igual que todos.

—¡Nada de "¿eh?" —replicó con el ceño fruncido—. ¡¿En qué diablos estabas pensado, enfrentándote a ellos tu sola?!

—je, je, je —rió nerviosa rascándose la nuca.

—¡¡Nada de "je, je, je", estábamos preocupados!!

—¡¡Sí!! —apoyo Nina y Ciel suspiró rendida.

—Lo siento, pero era necesario —habló seria—. Era mi deber protegerlos y seguiré haciendo, una y otra y otra y otra vez, si es necesario.

—¡Pero...!

—Set —lo interrumpió. Colocó una mano en su hombro y dijo—: Agradezco que te preocupes por mí, pero es algo que tengo que hacer. Si puedo protegerlos, lo haré sin dudarlo dos veces. Es mi deber como Onmyouji —habló seriamente sorprendiendo a todos. Set y Nina bajaron la mirada, sabían que ya nada haría que cambiara de opinión.

—... Está bien —dijo Set forzando una sonrisa, suspiró pesadamente y añadió—: Es imposible hacerte cambiar de opinión.

—Tienes razón, es terca como una mula —se burló Nina con una sonrisa.

Una lucha sin héroes. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora