Cαρíƚυʅσ Vҽιɳƚιυɳσ

2.1K 183 80
                                    

— ¿_____? —

Frunció el ceño y llevó su mano a su mejilla, ella no reaccionaba.

Beverly se tragó el nudo en la garganta y observó el lugar al escuchar un ruido.

— Richie... —

— Se ha ido —una lágrima cayó por la mejilla de Bill, su mejor amiga.

— Está bien, no es nada —volteó a verlos—. Sólo esta herida, hay que sacarla de aquí. Ben, está bien. No, está bien. Tenemos que sacarla de aquí, Bev.

— Richie... —él agachó la cabeza y seguido, giró a verla.

— ¿Qué? —

— Cariño, está muerta —.

Richie movió su cabeza para ver el cuerpo inerte de la chica.

— Tenemos que irnos. Vamos, Richie —ordenó Ben con un leve toque de impaciencia.

— T-tenemos que irnos —.

— Vamos, viejo. Vamos —.

El de anteojos se negó y se aferró a su cuerpo. Sujetó el cabello de la mujer con fuerza sin querer soltarla y apoyó su cabeza en el hombro de _____ mientras lloraba en silencio.

No podía perderla, acaba de recuperarla. Tenía que haber alguna forma, no podía terminar así. Esto no podía ser su... final feliz.

El lugar comenzó a hacerse pedazos y todo empezó a flotar.

— ¡Aún podemos ayudarla! ¡Aún podemos ayudarla, chicos! —

Ben y Mike lo tomaron por los brazos y lo obligaron a separarse.

— ¡Chicos, aún podemos ayudarla! —suplicó.

Lo arrastraron fuera del lugar.

— ¡No, cookie! ¡Cookie! —

El lugar se desmoronaba y grandes pedazos de cemento caían al agua. Atravesaron el lugar en donde habían peleado con Pennywise la primera vez, por las alcantarillas y por último, atravesaron la casa abandonada.

Se detuvieron en la carretera y miraron como la casa caía a pedazos.

— ¡Cookie! ¡Cookie! ¡Tenemos que ayudarla, todavía está allí! ¡Cookie! —

Mike y Ben lo sujetaban y afirmaban su agarre cuando sentían el forcejeo continuo del pelinegro.

La casa se destruyó por completo.

— ¡Cookie! ¡Cookie! —

>><<

La cantera.

Los chicos habían llegado a la cantera y se habían apoyado en las barreras de metal.

La pelirroja fue la primera en cruzarlas. Todos la siguieron.
Se quitaron sus zapatos y el pelinegro se quitó también su camisa amarilla.

Beverly fue la primera en lanzarse. Luego fue Bill, Ben y Mike. Sólo quedaba Richie. El viento le removía los negros cabellos y su mirada estaba ida en algún punto del lugar.

La cantera le traía varios recuerdos.
Había estado ahí varias veces con _____, era la primera vez que estaba ahí sin ella.

De pronto, su voz resonó en su conciencia: «Te amo»

Aquello hizo eco en su cabeza. Sintió el nudo en su garganta obstruyéndole la respiración, el picar de sus ojos avisándole que en cualquier momento se quebraría y el vacío en su pecho diciéndole que realmente había pasado.

𝖯𝖤𝖱𝖥𝖤𝖢𝖳𝖠𝖲                    𝖨𝖬𝖯𝖤𝖱𝖥𝖤𝖢𝖢𝖨𝖮𝖭𝖤𝖲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora