El dolor con amor se cura ©

Capítulo 5

Vi que las luces de la casa estaban apagadas excepto la de la habitación de mi hermano asique decidí abrir la puerta de la casa con sumo cuidado para que él no me escuchara llegar, porque sabía que aún teníamos una conversación pendiente.
Cuando llegue a la puerta de mi habitación pensé que estaba a salvo pero cuando la abrí y vi a Bryan de espaldas a mi sentado al borde de la cama supe que no me libraría tan fácilmente de nuestra charla.
Él se giró al escuchar como cerré la puerta y verme allí parada.
- Tenemos que hablar de lo de este mediodía.
- Es muy tarde, mañana tenemos clase.- dije seriamente intentando no mostrar ningún tipo de sentimiento.
- Por favor.-rogo él.
Encendí la luz y vi cómo Bryan tenía la cara llena de moratones y su labio había estado sangrando. Me acerque a él y suavemente le pase la mano por su mejilla.
- Por qué?
- Me dijeron que aquel idiota había estado todo el día diciendo cosas horribles sobre tu vuelta y sobre Angel. No quería pegarle, solo fui para advertirle de que se callara y siguió insinuando cosas que eran totalmente mentira y siguió y siguió hasta que ya no me aguante más, le dije que se callaba o lo mataría y no se cayó, estaba provocándome y lo último que quería era que te dañaran. El final ya lo sabes.- dijo agachando la cabeza.
Se le veía muy arrepentido porque sabía que me había fayado, aunque el tipo lo tenía bien merecido.
- No tenías que hacerlo Bryan. Seguro que tendrías que pegarte con todos los del instituto por todo lo que habrán dicho de mí durante todo este tiempo y en especial lo que habrán dicho hoy.
- Hoy los comentarios que pude escuchar eran que se sentían mal por ti, que eras muy fuerte al haber asistido a clase al tan poco tiempo de haber pasado y ese tipo de cosas. Muchas personas me mandaron mensajes preguntando a ver si podían acercarse para hablar pero les dije que no. No quería que te sintieras incomoda si ellos venían.
- Abrazo?-pregunte con cara triste.
- Ven aquí enana.-dijo el abriendo sus brazos.
Nos sumergimos en un enorme abrazo en el que al final los dos nos quedamos dormidos profundamente hasta que la grandiosa alarma volvió a sonar.
Como todas las mañanas maldecía la vida de ese despertador, sabía que poco le quedaba para que fuera verano y no tuviera que escucharlo por unos meses de nuevo, lo que me producía una felicidad enorme.
Por un segundo pensé en como haber salido de casa y pasar el día en clase me había distraído tanto de mi dolor, y pensé que mi hermano había hecho bien en haberme medio obligado a volver a asistir a las clases.
Volví a alistarme y baje a desayunar con mi familia. La verdad los había echado mucho de menos durante todo este mes, pero no quería que me vieran tan rota como mi madre llego a verme, no quería verlos sufrir al no poder hacer nada por ayudarme, porque eso era algo que tenía que pasar sola, hasta que el dolor disminuyera.
- Buenos días.-dije intentando simular una pequeña sonrisa en mi cara.
Mis padres me saludaron de vuelta, pero Bryan se me hacía raro que todavía no estuviera en la mesa, yo era siempre la que se levantaba más tarde de los cuatro, ya que era la que más tiempo necesitaba para prepararse.
- Y Bryan?
- Me echabas de menos ya hermanita.-dijo él una vez acabo de bajar las escaleras.
Sonreí al verlo, ya estaba pensando que tendría que asistir a mi segundo día de vuelta al instituto sola, eso sí que no podría hacerlo.
Mi móvil vibro y mire que Jonah me había enviado un Whatsapp.
“Buenos días. Necesitas que te lleve a clase? Lo digo por lo que paso ayer con tu hermano…avísame”
“No, pero gracias de todas maneras Jonah, todo está arreglado con mi hermano. Nos vemos en la escuela”
- Nos vamos ya o llegaremos tarde Bryan.
El cogió la tostada que tenía en el plato y ante mi insistencia salimos de casa después de despedirse de nuestros padres y nos dirigimos al coche. Una vez dentro le empecé a preguntar qué tipo de cosas había dicho James de mí y de Angel para que él se hubiera puesto así. Bryan no era el típico chico que se peleaba por nada, cuando lo hacía, tenía buenas razones para golpear a la otra persona.
- Ali no te lo diré, no quiero que te entristezcas por ese idiota.
Sabía que aunque le insistiera no me lo diría asique nos mantuvimos en silencio durante el tiempo que duro el trayecto y después de aparcar el coche Bryan fue a abrir la puerta cuando le agarre la mano.
- Quieres volver a casa?- dijo el pensando que no estaría bien si vería a James.
- Quiero que hoy vayas con tus amigos, no quiero que estés todo el día conmigo.
- No hare eso Ali, eres mi hermana y ahora es cuando más me necesitas y no te dejare sola. Ellos son mis amigos pero tú eres mi familia entiendes? Ahora somos uno, asique si quieren estar conmigo tendrán que aceptar que tú también estarás conmigo.
- Pero Bryan…
Él no me dejo seguir y salió del coche para ir a mi lado y repetir la misma escena que el día anterior pero esta vez no se puse los cascos y mire al frente. Alguna que otra persona se me acercaba para darme la bienvenida de vuelta al centro y decirme que ayer no querían molestarme dándole la bienvenida.
Bueno, pensaba que sería peor, aunque lo prefería así. El día fue algo raro ya que todo el mundo se fijaba en Bryan y comentaban como había dejado James que ni hoy había podido ir a clases.
Las clases fueron aburridas como siempre, eso era algo que nunca cambiaria pero aun así, cuando la campana anuncio que teníamos el descanso para ir a la cafetería a comer me acerque a donde Kelly ya que sabía que ayer hice mal en no saludarla más cariñosamente.
- Hey Kelly, siento lo de ayer.-dije tocándole el hombro.
- Hey Ali. Bueno no puedes actuar como si nada, era tu primer día de vuelta asique me supuse que sería por eso pero me alegro de que hayas venido a saludarme.
- Vendrías conmigo a comer a la mesa de Bryan y sus amigos? No quiero estar sola son todos ellos.
Kelly iba a negarse pero al pensar en cómo estaría sola rodeada de hombres, pensó que no estaría mal que una mujer estuviera conmigo, por si necesitaba distraerse y eso.
- Hay sitio para una más en la mesa Bryan?- dijimos cuando llegamos a la mesa donde Bryan estaba acabando de guardar todo en la mochila.
- James no está asique me supongo.
- Y aunque lo estuviera, no creo que tendría ganas de sentarse en la misma mesa que tu después de lo de ayer.
Después los tres nos dirigimos a la cafetería y mientras Bryan fue a hablar con los chicos, Kelly y yo nos dirigimos a coger algo de comida, era día de pizza asique me apresure a cogerme unas cuantas porciones más de las debidas como cuando estaba con Angel. Kelly me miro sorprendida cuando vio todo lo que cogí aunque no me dijo nada.
- Alison es bueno volver a verte de nuevo.- dijeron un par de chicos que estaban sentados en la mesa con Bryan.
Sonreí un poco y me senté a la mesa al lado de Bryan.
Pude escuchar como uno de ellos, no sabía cómo se llamaba, pero sabía que era primo de James, estaba diciéndole a Bryan que su primo estaba hecho mierda después de la golpiza que le dio ayer.
Cuando él me vio mirando callo y dio un bocado a su trozo de pizza.
Sonó la campana que indicaba que era el fin de la comida, saque una pequeña caja de plástico y metí los cachos de pizza que me sobraban mientras el resto de la mesa me miraba con sorpresa.
La última clase se me hizo muy larga, no veía la hora de que acabara y saliera de aquel horrible infierno.
Miraba a Kelly a cada rato y veía como ella se estresaba a cada segundo porque no acababa de comprender lo que el profesor explicaba. Antes de que volviera a mirar la hora la campana sonó y salí corriendo sin esperar a nadie.

Bryan
“Bryan no me esperes, tengo una cosa importante que hacer”
Me llego a los pocos segundos de ver como Alison salía corriendo. Que tenía que hacer?
Luego recordé de vuelta a casa, toda la pizza que se había cogido, como después se la guardo en una caja de plástico…seguro había ido al cementerio porque ella siempre compartía su pizza con Angel, asique antes de poder aparcar en casa, salí de camino al cementerio para esperar a mi hermana, mire a ver si ella se encontraba allí y como supuse, allí se encontraba ella, sentada en el suelo comiendo pizza y hablándole a la tumba de Angel, se la veía tan feliz allí, como si él estuviera sentado enfrente de ella…
Espere y espere por varias horas hasta que vi a mi hermana salir.
- No subes?-dije el cuándo ella paso por su lado intentando quitarle los nudos a sus cascos.
- Bryan?!- dijo algo extrañada- Que demonios haces aquí?
- Sabia donde estarías, pensé en como habías actuado hoy con todo lo de la pizza y me acorde que siempre hacías eso y después tú y Angel ibais a su casa y la comíais allí a la tarde y después me llamabas para que te llevara de vuelta a casa. Asique aquí estoy para llevarte a casa aunque no me hayas llamado.
- Gracias pero no tenías por qué.
Se subió en el coche y hablamos de porque ella y Angel siempre hacían eso, y esta vez ella fue capaz de hablar de él sin que su cara acabara llena de lágrimas, eso me puso muy feliz, ver como ella estaba mejorando cada día.