Kaji se despertó abrazado a su almohadón anti estrés (la autora de este loco y sexi fanfic duerme abrazada a una gran tortuga de felpa), se incorporó lentamente restregándose los ojos y se quedó sentado sobre sus talones en la cama, pensando. Otra vez volvía a despertarse en soledad después de 2 meses. Se había acostumbrado a despertarse y ver a Michiko a su lado durmiendo como un tronco... La elegancia y delicadeza desaparecían cuando ella dormía, en vez de eso era como un animalito inocente y salvaje a la vez... Roncando a pierna suelta... Luego se cambiaban de ropa e iban juntos al trabajo...
La extrañaba muchísimo pero no iba a pedirle que se quedara con él a menos que ella se lo dijera primero, no era lo suficientemente valiente como para soportar otra negativa desabrida por parte de ella.. Luego de un rato pensando, se levantó, se vistió y se fue a trabajar. Almorzaría en la cafetería del hospital, como siempre.
Michiko bajó corriendo las escaleras, se había quedado dormida y maquillarse le había llevado tiempo, por lo que ya no tenía tiempo para almorzar, poniéndola de muy mal humor.
"Michiko, te dormiste otra vez... ¿cuándo vas a madurar?". Le dijo Akira, esperándola en la puerta para despedirla.
"El año pasado...". Replicó de mala gana, poniéndose los zapatos apresuradamente, dirigiéndose hacia la puerta.
"No te desquites con el doctor Kaji, ¿eh? Te conozco. Ya tiene suficiente...".
"¿Qué quiere decir con eso, Akira?". Lo asesinó con la mirada, sorprendiendo a su mentor.
"N---no quiero decir nada con eso...". Se apresuró a decir, por lo que Michiko se fue sin decir más, dejándolo sólo con Ben Casey entre sus brazos. Akira lo miró y dijo. "Michi tiene un carácter horrible a veces, ¿verdad, Casey? Realmente el doctor Kaji es un santo soportándola". Miró muy preocupado hacia la dirección por donde había tomado su pupila. "Sólo espero que puedan superar el problema del doctor Nishiyama...".
Antes de que Michiko llegara al hospital, Kaji fue llamado por el director del departamento de cirugía, su amigo y ocasional amante. Ebina. Con los nervios de punta, Kaji fue a su despacho decidido a poner punto final al asunto. Apenas entró al despacho Ebina lo tomó del brazo y lo arrinconó contra la pared, haciendo que diera un pequeño grito de sorpresa.
"Dime, Kaji, ¿por qué me evitas? ¿Qué no somos amigos?". Lo sostenía tan fuerte de los hombros que le hizo doler.
"Oye, no exageres, duele...". Le dijo, haciendo una mueca de dolor.
"¡Responde! ¡Por favor!". Lo sacudió, desesperado. Kaji lo miró perplejo.
"Bueno..., Tú sabes... La verdad... Tú y yo sólo seremos únicamente amigos, además, tengo novia y no puedo corresponderte como tú quieres, además, no me gustan los hombre y... ¡¡¡!!!". No pudo seguir, Ebina lo estaba besando tan fuerte que no podía respirar. Trató de soltarse, retorciéndose, pero no logró nada, estaba atrapado contra la pared, con las fuertes manos de su amigo presionándolo contra ella. Haciendo uso de todas sus fuerzas, Kaji logró empujarlo, apartándolo de él. "¡Oye! ¡Te lo digo en serio! ¡No quiero estar contigo de esa forma! ¡No hagas que te golpee!". Levantó el puño, amenazante pero muy asustado.
Sin darle tiempo a reaccionar, un lloroso Ebina volvió a abrazarlo con todas sus fuerzas, presionándolo contra su cuerpo, acariciándole la cabeza mientras lo rodeaba por la cintura con el otro brazo, apoyando la barbilla sobre su hombro.
"Si, si, lo sé, te entiendo... Sólo quiero que sepas que siempre estaré ahí para ti si me necesitas... Ya no te preocupes más...". Se sorbió los mocos y Kaji puso cara de asco, pero enseguida se conmovió por el llanto de su amigo y deshizo el puño para abrazarlo al final.
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DOCTORA XXX MICHIKO DAIMON (Doctor-X/Doctor-Y)
FanfictionA la cirujana Michiko Daimon nunca le interesó tener sexo ni novio, pero un día, cuando se pelea por enésima vez con su frustrante compañero de trabajo, descubre que tiene un lado dominante que quiere ejercer sobre él, especialmente con su lindo tra...