Una propuesta descarada

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Más tarde, Kaji estaba almorzando con sus amigos Ebina y Hara en el comedor del hospital.

"Oye, Kaji ¿sabes lo que le sucede a Daimon? ¡Me da miedo cuando pasa por mi lado! Es como si estaría a punto de matar a alguien... ¡Cielo santo!". Dijo Hara, estremeciéndose de miedo, acomodándose los anteojos.

"Qué se yo lo que le pasa a ese demonio...". Respondió muy agotado, con la cabeza apoyada en la mano mientras tomaba un poco de sopa de algas. La conferencia le había resultado muy estresante rodeado por las malas vibraciones de aquellas dos mujeres.

"Y la jefa de enfermeras no se queda atrás... Su expresión inexpresiva me aterroriza...". Agrego Ebina. Hara lo miró peguntándose si su compañero alguna vez se había visto en un espejo.

"¡Aish! ¿Qué es eso de expresión inexpresiva? ¡Mejor aprende a expresar tus ideas con propiedad, Ebina!". Se quejó Kaji de pésimo humor. Estaba aterrorizado con que el director Hiruma descubriera su relación romántica con Michiko y los despidiera a los dos por culpa de la lunática.

"Oye, tonto, ven conmigo". Le ordenó Michiko de repente, deteniéndose a su lado, terriblemente furiosa.

Los 3 cirujanos se sobresaltaron y la miraron muy asustados.

"¡Oye! ¿Acaso no viste esto?". Molesto, Kaji apuntó hacia la identificación que llevaba colgada al cuello. "¡Aquí dice que soy el director del departamento de cirugía, así que soy tu jefe, demonio, háblame con propiedad!"

"¡Que vengas conmigo, idiota!". Lo ignoró y lo tomó fuertemente del brazo, levantándolo de golpe y llevándoselo a rastras de allí mientras Kaji protestaba y toda la cafetería ponía los ojos sobre ellos, en completo silencio. Sanae, que estaba sentada muy sola en una de las mesas, almorzando, se les quedó mirando apáticamente pero con mucha atención.

"Va a matarlo, estoy seguro, su cadáver aparecerá en uno de los canales de por aquí cerca...". Comentó Ebina con gran pena. "¡Fue un gran compañero!".

"¡Pobre Kaji! ¿Qué habrá hecho para que Daimon esté así de furiosa con él?". Se preguntó Hara, tomando un bocado del almuerzo de Kaji.

Hiromi, preocupada, se quedó mirándo hacia la puerta por donde se había ido su amiga con Kaji, pensando que debería decirle algo a Akira para que frenara los impulsos salvajes de Michiko contra su novio.

"¡Daimon! ¡Espera! ¿Pero qué demonios te ocurre?". Kaji penas pudo decir mientras ella lo metía de un empujón a su oficina. Daba gracias que su secretaria también estaba almorzando en ese momento en la cafetería.

Si responderle de inmediato, Michiko cerró la puerta y le puso seguro, dirigiéndose rápidamente hacia un asustado kaji, agarrando su cuello con una mano, haciéndolo retroceder hasta chocar de espaldas contra el escritorio.

"... Da-Daimon...". Murmuró, muerto de miedo al ver sus ojos centelleantes.

"Dime, idiota, ¿cómo puede ser que esa mujer esté tan encaprichada contigo? ¿En verdad no tuviste sexo con ella?".

"...N---No... En ese tiempo fue cuando conocí a Nanami... y me hice cargo de ella cuando la operé porque su madre estaba detenida... Nunca tuve más tiempo para otra cosa... Además, en ese tiempo ya no era tan importante para mi andar de conquista...".

Michiko se le quedó mirando fijamente y finalmente lo soltó, asi que Kaji, suspiró aliviado y se llevó la temblorosa mano hacia su cuello.

"Creo que debemos aclarar esto, Daimon. ¿Quieres sentarte un momento en el sillón? Te prepararé algo de café y conversaremos...". Le dio la espalda, acercándose a la máquina de café dispuesto a preparar uno.

DOCTORA XXX MICHIKO DAIMON (Doctor-X/Doctor-Y)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora