Olvídame

Capítulo 21

~Desenterrando recuerdos~

- ¿Por qué me trajiste aquí Caleb? -pregunto con sospecha.

El recuerdo viene de manera fresca a mi memoria...

Era un día como cualquier otro junto a mi mejor amigo, no podían faltar las carreras en dónde él me perseguía hacia nuestro lugar favorito o en caso de que no se pudiera cualquier otro, como hoy.

Era la forma de divertirnos, ser unos niños y la forma de lidiar con lo que nos pasaba día a día, Caleb era esa persona única en el mundo con quién podía ser yo misma y me agradaba la forma en que me hacía saber que me comprendía.

Pero ese día confirmé que quizás se estaba convirtiendo en más que un amigo para mí, algo que ya sabía pero me rehusaba a aceptar.

- ¡No me atraparás! -exclamé entre risas mientras corría hacia un roble frondoso.

- Es imposible ganarte Jess. -Caleb se rindió y se acercó algo sofocado hacia al árbol para hacerme algo de compañía.

- ¡Sabía que algún día lo admitirías! -le dije con cara de satisfacción mientras posicioné frente a él.

-Solo esta vez... -se apresuró a decir- Esta vez es una ocasión especial.

- ¿Por qué? -pregunté extrañada.

- Por lo que está a punto de pasar -respondió y seguido de eso sacó una navaja de su bolsillo, yo abrí los ojos abruptamente en total sorpresa.

- ¿Estás demente? -Le grité y él se sonrió- ¡Es peligroso!

-Tranquila, es solo una navaja. -Me dijo para tranquilizarme- Si no hago nada extraño con ella no pasará nada, ahora observa.

Hice lo que me pidió y enseguida pude observar como grabó nuestras iniciales en el tronco del árbol y las encerró en un deforme corazón, que en ese entonces significó tanto para mí y me derritió por completo.

-Te amo Jessia. -Confesó y de repente los nervios invadieron mi cuerpo- Me he dado cuenta de mis sentimientos hacia ti y no puedo ocultarlos por más tiempo, te amo Jessia Collins.

-Yo... -Traté de responder pero Caleb me lo dificultaba con su cercanía, mi cuerpo me gritaba lo obvio, lo que había tratado de ignorar, saber cómo respondía mi ser cuando se encontraba así de cerca me ponía de los nervios, eso significaba algo y yo sabía la respuesta- Somos muy jóvenes para amarnos Caleb...

-Jamás se es joven para amar Jessia. -Dijo acercándose hacia mí- Yo solo sé que te amo y que no puedo renegar de lo que siento, solo sé que se vuelve una necesidad estar junto a ti y sé que haría lo que fuera por permanecer a tu lado.

-Yo...

- No es necesario que digas palabra...

-También te amo Caleb -me apresuro a decir.

No sabía cómo había pasado o en qué momento lo hice, tampoco sé que me llevó a corresponderle, solo sé que le di riendas sueltas al deseo que sentía en ese momento, no pensé en nada más, solo sabía que mis labios se habían unido con los suyos desatando un volcán de emociones dentro de mí al punto de sentir que el corazón se quería salir de mi pecho, la sensación que me producía estar cerca de Caleb o al sentir el simple roce de su mano en mi mejilla hacía que quisiera suspirar todo el día.

No sé cuánto duró el beso, solo sabía con certeza que jamás olvidaría las sensaciones que me había causado ese momento...

- ¿Lo recordaste cierto? -pregunta Caleb con una amplia sonrisa en su rostro a lo que yo asiento como respuesta.