~Sucesos afortunados y confesiones inesperadas~
—Shhh... Déjala descansar Asher. —escucho vagamente tratando de abrir los ojos.
Siento como si una estampida de elefantes ha pasado por encima de mí, siento el cuerpo sumamente pesado, débil y prácticamente sin fuerzas.
—Ya está despertando. —escucho una voz y cuando por fin consigo abrir despacio los ojos solo veo sombras y segundos después puedo ver como la imagen se hace más clara en mi mente.
Solo es la abuela Jo...
Ella...
¡Espera!
— ¿Abuela Jo? —Pregunto espantada— ¿Qué hace aquí?
—Querida... —dice— eso es lo de menos en estos momentos, ¿cómo te encuentras?
—Me encuentro mejor abuela. —digo aún sin comprender.
—Bien. —Dice con seriedad—Porque podrás escuchar mi regaño con claridad.
—Abuela...
— ¿Cómo es posible que no me hayan avisado? De haber sabido que mis retoños están enfermos hubiese venido a primera hora en el primer tren. —dice seria no parece estar enojada pero es una posibilidad que no quiero descartar— ¡Por Dios! Están solas por aquí, no tienen suficiente dinero y como si fuera poco sabiendo que somos una familia con posibilidades no piden ayuda, ¡par de orgullosas!
—Lo sentimos abuela, no queríamos molestarte. —me disculpo para que se tranquilice— Pero... aun no entiendo cómo llegaste aquí.
— ¿Acaso eso realmente importa? —Pregunta la abuela con desdén y todos le miramos atentamente— Bien, Ayla fue quién me pidió que viniera...
Ayla... debí saberlo.
—Abuela, lamentamos no avisarte.
— ¡Son unas irresponsables! —Exclama— pero por ahora no gritaré más, no saldrás de la cama hasta que te tomes un buen caldo, tenemos cosas importantes de qué hablar.
La abuela termina la frase con seriedad pero luego suaviza su expresión y me mira con atención esperando una respuesta.
Está molesta...
Pero aun así no deja de ser una mujer encantadora, se preocupa por nosotros y es difícil para ella vivir lejos de nosotros, sé que nos ama y quiere lo mejor para nosotras pero tiene razón... debimos avisarle.
—De acuerdo abuela Jo. —digo y ella se acerca para sentarse a mi lado encima de la cama.
—Me llevaré a los niños. —dice con determinación.
— ¿Te refieres a Asher y a Ayla? —pregunto.
—Sí linda... ellos necesitan otro ambiente.
Es lo mejor, mamá y yo hemos hablado de esto aunque no sé si conviene que se vayan tan pronto, de algún modo sienten que tienen responsabilidades aquí.
—Mamá y yo hemos hablado de esto abuela y estamos de acuerdo. —Respondo— Pero que no sea de inmediato, ellos sienten obligaciones aquí y lo mejor sería esperar unos días.
Ella sonríe acariciando mi rostro con suavidad y me envuelve en un abrazo.
—Dos semanas... —concluye— tal vez más o menos, solo sé que quiero lo mejor para ellos, estarán mejor en el este.
Asiento y la abuela me da un sonoro beso en las mejillas.
—Gracias por venir abuela. —le digo con sinceridad.
ESTÁS LEYENDO
Olvídame
Teen Fiction"Donde hay resentimiento y un pasado de por medio, tal vez y solo tal vez, exista una brecha para el amor" El problema realmente está en... ¿Estás dispuesto a pasar por alto cualquier cosa por amor? En el pueblo Vollmond Nild, en el oeste de Estad...