Con los meses y semanas pasando, el grupo de amigos pasó a tercer año. Las vacaciones fueron divertidas ya que todos practicaron los movimientos y ataques aprendidos. Xiaojun y Jisung mejoraron poco a poco hasta que pudieron estar a la altura de los demás, siendo Renjun el único que era más fuerte.
El tema de su fuerza fue algo que incrementó más lento que sus demás habilidades, como se venía presenciando desde tiempo atrás. Ya había logrado mover sin problema alguno la camioneta, dándole la certeza de que, si podía hacer eso, de igual forma empezaría a creer que usarla se convertiría en algo natural para él.
La universidad se volvió una tarea secundaria, aunque no por eso dejaba de prestarle atención y hacer los deberes. Xiaojun seguía siendo el primer lugar y Haechan seguía quejándose de las tareas, brindando un aura familiar al que Renjun estaba acostumbrado. Los amigos todavía asistían a la misma clase, y Jaemin y Jeno aún se sentaban a un lado del castaño en una mesa sólo para dos. Los profesores, así como los demás compañeros, ni siquiera intentaron prestarle atención al trío, habituados a verlos uno tan cerca del otro y sin interés de cambiar algo al respecto.
De hecho, Renjun se encontró pensando en cuánto había cambiado su vida desde que llegó a Jeolcheon. Ahora él sabía usar magia, tenía dos novios, tenía amigos, se sentía menos inseguro respecto a todo lo que le rodeaba y sobre sí mismo conforme trabajaba en su actitud. Todo era nuevo e increíble, y sucesos le pasaban sin que pudiera creerlo. Lo mejor de todo era que se sentía diferente a cada día que pasaba, sintiéndose mejor y descubriendo que no se arrepentía de haber escogido la vida y las consecuencias que vendrían.
Al menos ya no le causaba ansiedad saber que no era perfecto, y era gratificante tener pensamientos en la soledad de su habitación sobre ello sin sucumbir a la decepción y abrumarse. Jaemin y Jeno incluso le ayudaban a tomar el control de sus momentos intensos para que no necesitara tan seguido un guía o para dirigir su ansiedad hacia un rumbo menos insano.
Renjun tomaba partido en sugestionarse un poco y ocasionar un pequeño ataque de ansiedad; Jaemin entonces lo abrazaba por la espalda tan suave como podía y le daba besos en el cuello mientras hacía que ambos se sentaran en el suelo, o Jeno lo sentaba en su propio regazo y lo sostenía con cuidado, esforzándose también en no hacerlo de manera posesiva.
Fue incluso más difícil para los tres que el entrenamiento, ya que esto era una cuestión mental, y aunque todavía sentía que le hacía falta esa actitud firme, ya lograba calmarse eventualmente con los tratos más sensibles.
Por otro lado, la forma autoritaria y dominante del par seguía siendo igual en la cama, lo que no le importaba en lo absoluto porque las preferencias sexuales no cambiaban, o al menos eso había investigado Renjun cuando la curiosidad fue más que su vergüenza. Jaemin y Jeno eran abiertos al cambio, ya sea en ellos mismos o en el propio Renjun. Sin embargo, hacerlo en un ámbito que era demasiado íntimo e instintivo, los tuvo un poco reacios y disgustados, a pesar de que prometían intentarlo sí él se los pedía. El castaño no lo hizo, obviamente.
Tenía la confianza suficiente en ambos para admitir disfrutarlo también.
En el cumpleaños de Jaemin, Renjun cumplió su promesa, pasando todo el día junto al mayor, quien parecía especialmente contento por ello. Festejaron con carne que Johnny cazó en alguna parte de los bosques, cocinando solamente lo que sería para el grupo que no eran Oscuros o Nocturnos.
Jaemin tampoco deseaba regalos, ya que no era algo que necesitara o le interesara, admitiendo pasarlo de mejor manera en aquella pequeña reunión, y claro, con su pequeño novio sobre su regazo. De hecho, el mayor obtuvo su propio obsequio del castaño en la soledad de su habitación, haciendo que el menor tuviera que ocultar las marcas con maquillaje. Por suerte sus padres no lo notaron ya que la pasó casi todo el día dentro de su alcoba.
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Celestial [NoRen / RenMin]
FanfictionPrimer libro de la trilogía "Celestial". Cuando Renjun tenía 7 años, su abuelo le dijo que algún día haría grandes cosas por el mundo. Le habló de la existencia de la magia, de criaturas malas y peligrosas, y de muchas otras cosas que hicieron a Ren...