Hoy era el cumpleaños de Taehyung.
La mano de Jungkook temblaba a medida que se acercaba a la casa del mayor. ¿Qué pasaría si no le abría la puerta o no estaba?
Jungkook suspiró y sacudió un poco su cabeza para acercar su mano a la puerta y tocar tres veces esta.
Esperó y esperó, pero nada.
Jungkook miró la cajita entre sus manos y apretó los labios. La mano de Jungkook se alzó nuevamente pero la apretó bajándola nuevamente, era en vano. Era obvio que Taehyung no le iba a abrir la puerta. Giró sobre sus talones y al momento de hacerlo escuchó una voz.
—Que alegría volver a verte. —el menor nuevamente se giró para ver a Taehyung con una camisa blanca suelta y unos pantalones de pijama, sin sus infaltables pantuflas de terciopelo azul.
—Creí que no querrías verme. —dijo Jungkook y bajó la mirada.
—Siempre quiero verte, Jungkook.
Jungkook sonrió y Taehyung lo imitó.
—Feliz cumpleaños, TaeTae. —dijo el menor y se acercó a Taehyung pero este fue mas rápido y lo agarró de la cintura para acercarlo a su rostro y darle un gran beso en los labios.
—Lo siento, no me puedo contener.
—No te disculpes, está bien. —vaya, a Jungkook le había gustado el beso.
La cena se la pasaron riendo y contando anécdotas del pasado, ahora se encontraba Jungkook tomando café y Taehyung tomando té.
Jungkook estaba preparado para decirle que le gustaba, él quería decirle lo mucho que le gustaba.
—Taehyung, hay algo que te quiero dar. —dijo Jungkook y Taehyung sonrió medianamente.
—Tu presencia es mi mejor regalo. —dijo Taehyung y Jungkook se sonrojó.
—Además de mi presencia hay algo más, toma. —le entregó la cajita aterciopelada y Taehyung frunció el ceño.
—¿Qué es? —preguntó y Jungkook se encogió de los hombros.
—Tu madre me lo dio. —respondió Jungkook — vamos, ábrelo.
La mano de Taehyung abrió la caja y sus ojos se llenaron de lágrimas al instante.
—¿Qué ocurre? ¿No te gusta?
—E-era una cadenita que compartíamos con Jiwoo...
—Oh vaya...
Jungkook sintió una punzada en el pecho, pero la ocultó muy bien.
Después de que Taehyung se tranquilizara y se pusiera la cadenita, Jungkook tembló y tosió para que Taehyung lo mirara.
—¿Hay algo más que quieras decime? —preguntó y pudo ver los ojos brillar de Taehyung.
—Me... —trató de decir Jungkook pero el timbre de la casa sonó y Taehyung se levantó frunciendo el ceño.
Jungkook esperaba y esperaba pero Taehyung no volvía, cosa que le pareció extraña. El menor se levantó y se dirigió hacia la puerta dejándole ver la figura parada y congelada de Taehyung.
—Taehyung, ¿estás bie...
Jungkook se le congeló cada fibra de su ser. El menor miró al suelo y se empezó a cuestionar si lo que estaba viendo era real.
—Ji-jiwoo... —pudo articular Taehyung y Jungkook alzó la mirada.
¿Cómo era posible?

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𝗘𝗡𝗧𝗥𝗘 𝗣𝗜𝗡𝗖𝗘𝗟𝗘𝗦 𝗬 𝗧𝗜𝗡𝗧𝗔 ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ
FanfictionEn donde TaeHyung es un mundialmente reconocido pintor malhumorado y JungKook es un reportero que trabaja en una revista al que le piden un reportaje sobre él, en pocas palabras; conocerlo a fondo. 🥇𝗣𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿 𝗽𝘂𝗲𝘀𝘁𝗼 𝗲𝗻 #𝗩𝗸𝗼𝗼𝗸 (𝟬𝟵...