Capítulo 96: Desesperación

471 53 247
                                    

- ¡Que alguien me diga ahora mismo qué ocurre!- exigió Akihiko no soportando aquellos nervios y Naoki lloró todavía más fuerte sobre el pecho de su novio.

- Usagi-san, Naoki está embarazado.

Akihiko miró a Misaki durante unos segundos y luego negó rápidamente con la cabeza. Naoki se agarró con fuerza a su novio, sintiendo su corazón latir con rapidez y sin atreverse a mirar a su padre.

- Eso es imposible- dijo el escritor sin dejar de negar-. No, no, mi niño no... Es imposible.

- Usagi-san, no lo es- le dijo Misaki poniéndose en pie-. Está embarazado y tendremos que ver qué...

- ¡NO LO ESTÁ! ¡NI HABLAR!- bramó haciendo temblar a su hijo.

- Tranquilízate, por favor, no ganamos nada gritando- le pidió Misaki y Akihiko, enfadado, le dio una patada al sofá, sobresaltando a su marido-. ¡Así no se solucionan las cosas!

- ¡NO LO VA A TENER!- gritó señalando a su hijo-. ¡ABORTARÁ Y LO METERÉ EN UN INTERNADO EN SUIZA!

- Tú no eres quien debe decidir eso, tío- dijo Haruki, pese a estar de acuerdo con Akihiko en que Naoki debería abortar, y el escritor le miró con cabreo-. Es Nao quien está embarazado, no tú.

- ¡Haruki, no te metas en esto!- le gritó Akihiko.

- Me meto porque me incumbe- dijo Haruki intentando sonar firme, aunque en aquel momento su tío le daba auténtico pavor.

- Usagi-san, Haru-chan es el novio del niño- dijo Misaki y Akihiko miró a su sobrino colérico.

- ¡TÚ, DESGRACIADO! ¡VIOLADOR!- gritó y se abalanzó hacia su hijo y sobrino con la intención de pegarle al más alto, pero Hiroki, anticipando sus movimientos, se metió en medio y le hizo un placaje, tirándolo al suelo. Akihiko forcejeó y Hiroki, harto de la actitud de su amigo, le dio un golpe en el estómago con la rodilla, cosa que enfadó más al escritor. Akihiko le empujó y Hiroki se tambaleó, golpeándose con la esquina de la mesa del café. El profesor, quien estaba muy enfadado con su amigo por haber intentado pegar a su hijo, le dio un puñetazo en la nariz. Akihiko hizo una mueca y se lo devolvió, dándole en el pómulo derecho.

- ¡PARAD, POR FAVOR!- exclamó Misaki llorando. Nowaki se metió en medio e inmovilizó a Akihiko mientras Kane intentaba retener a Hiroki, quien quería seguir dándole puñetazos a su prácticamente hermano. Naoki lloraba con fuerza contemplando aquella escena mientras su novio intentaba consolarle. Misaki, viendo que Hiroki y Akihiko ya habían sido separados, se acercó sin dejar de llorar a los adolescentes y les agarró para sacarlos de allí-. Todo se va a solucionar, no os preocupéis- les dijo una vez estuvieron en el rellano y sacó su cartera y le dio varios billetes a los muchachos-. Tomad, id a una pizzería o donde queráis y comed algo, ¿vale? No os preocupéis por esto, los adultos somos nosotros y lo vamos a solucionar, ¿de acuerdo?

- Mami, lo siento tanto...- murmuró entre sollozos y Misaki le abrazó.

- No pasa nada, tú tranquilo. Papá y yo te queremos mucho- dijo el mayor. Misaki le dio un beso en la frente a su hijo y luego se dirigió a su sobrino-. A ti también te queremos mucho, no se lo tengas en cuenta, por favor... No es él mismo.

- Sí, tío Misaki.

- Id con cuidado y ya os avisaremos cuando las cosas se hayan calmado- dijo Misaki-. No os preocupéis.

- Adiós, mami- le dijo Naoki y Misaki volvió a meterse en la vivienda, encontrándose con que Akihiko estaba sentado en el suelo intentando parar la hemorragia de la nariz mientras Kane le decía algo con gesto preocupado. Hiroki se encontraba al otro lado de la sala junto a Nowaki, quien le ponía hielo en el pómulo y el labio.

El InternadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora