Capítulo 130: Sorpresa

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- Lo estás haciendo genial, campeón- le dijo Naoki.

- Me duele mucho- dijo Hiro-chan entre sollozos.

- Sé que duele pero es gracias a estos ejercicios que has vuelto a apoyar el pie- le dijo Naoki-. Venga, que en nada nos vamos a casa.

- Hiro-chan, un poquito más y acabamos por hoy- le dijo el fisioterapeuta.

- ¿De verdad que me haré mucho más fuerte con estos ejercicios?- preguntó Hiro-chan con lágrimas en los ojos.

- Claro que sí, ¿no te notas más fuerte que antes?- le dijo Naoki y su hijo asintió-. Lo estás haciendo genial, estoy muy orgulloso de ti.

- Mami, voy a seguir un poco más porque estoy cansado de ir con la silla- dijo el pequeño.

- Muy bien, cariño, sigue esforzándote- le dijo Naoki.

Acabaron la sesión de rehabilitación y Naoki arrastró la silla de ruedas de su hijo hasta el aparcamiento del hospital, donde les esperaba Haruki leyendo.

- ¿Qué tal le ha ido hoy al nene más valiente?

- Me duele pero tengo que hacerlo porque así mi pierna se hace fuerte- dijo Hiro-chan mientras su madre le subía al coche.

- Claro que sí, esa es la actitud. Sigue así y seguro que en un par de...

- Haru- dijo Naoki mirándole con desaprobación.

- Es verdad, nada de poner fechas- asintió Haruki.

- ¿Hay van a venir Sosuke y Kotaro?- preguntó Hiro-chan.

- Claro- dijo Naoki-, vendrán nada más salir de la guarde.

- Yo también quiero ir a la guarde...- murmuró el niño y sus padres se miraron con tristeza.

- A la guarde van los niños pequeños, Hiro-chan- dijo Naoki.

- Exacto, la guarde ya no es para ti- le dijo Haruki-. La próxima vez que vayas al cole será al internado.

- Al internado van los mayores- sonrió el niño.

- Pues prepárate que en septiembre empiezas- le dijo Naoki y su hijo frunció el ceño.

- ¿Y si mi pierna aún no está fuerte del todo, mami?

- No pasa nada, podrás ir de todas formas- le dijo Haruki-, pero tendrás que perder alguna clase para ir a rehabilitación.

- Irás, cariño, no te preocupes.

- Bien- sonrió Hiro-chan.




- Llegas tarde- le dijo Shinobu sin apartar la vista de la carta y Kane le sonrió tomando asiento-. ¿Por qué estás tan feliz? Es lunes.

- Sato-chan me va a regalar un viaje- susurró Kane emocinado-. Él no sabe que lo sé pero he visto la reserva del hotel. ¡Me va a llevar a la Riviera Maya!

- ¿De verdad? Él no es muy de viajar.

- Lo sé, es que es tan detallista y romántico...- sonrió Kane-. Y eso que mi cumple ya ha pasado y me regaló el lego de Harry Potter.

- Igual planea abandonarte por allá- le dijo Shinobu.

- Claro que no, seguro que es un regalo para darme las gracias por lo buen marido que soy. Siempre me quejo de él pero en verdad es tan atento... Uy, lo siento, yo aquí presumiendo de lo romántico que es mi marido cuando el tuyo... Bueno, tiene otros fuertes.

- Miyagi es súper detallista y romántico- le dijo Shinobu con el ceño fruncido y Kane sonrió-. El otro día salimos a cenar y tenía frío porque me olvidé la chaqueta, así que me acompañó a comprarme una.

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