El Internado

Capítulo 50

Estaba en todas partes, no se hablaba de otra cosa que no fuera de aquella noticia: se había aprobado el matrimonio igualitario en Japón. Misaki no se lo podía creer, podría casarse en su país y sería legal.

- ¡Usagi-san!- Exclamó Misaki entrando en la vivienda de su hermano. El escritor al verle extendió los brazos y el menor corrió hacia él, saltando a sus brazos y enroscando sus piernas en la cintura del mayor.- ¿Lo has visto?

- Sí, mi amor.- Akihiko le besó acariciando su trasero.- Podremos casarnos en Tokio.

- ¡Pues vaya mierda! ¡Yo quería que me pagarais otro viaje!- Se oyó gritar a Kane desde la cocina.

- Hoy he estado a nada de arrojarlo al Hudson, cada día admiro más a Hiroki por aguantarle.- Dijo Akihiko y Misaki bajó lentamente de él.

- Ten paciencia, nos ha traído a nuestro niño.- Le dijo Misaki acariciándole la mejilla.- Además, se va en dos días.

- ¿Cómo está tu hermano?

- Mucho mejor, le darán el alta muy pronto.- Sonrió Misaki.

- ¡Mami!- Naoki corrió hasta su madre y se abrazó a él.

- Cariño, ¿qué habéis hecho hoy?

- Hemos ido a patinar y, ¿sabes qué?

- ¿Qué?

- ¡Kane se ha caído y se ha dado en el culo!

- ¿Pero se ha hecho daño?

- Sí, Misaki, en mi dignidad.- Dijo Kane saliendo de la cocina junto con Mahiro.- Había hecho contacto visual con un americano y no veas cómo estaba...

- Te recuerdo que tienes novio y es uno de nuestros mejores amigos.- Le reprochó Misaki.

- No pensaba hacer nada, pero me gusta sentirme deseado. Me gusta levantar pasiones y lo que no son pasiones. ¿Lo has pillado, Misaki?

- Sí, Kane.

- Me refería a los penes.

- ¡Pene!- Repitió Naoki riendo y haciendo reír a su primo.

- Nao-chan...- Dijo Misaki acariciando su cabecita.- No hagas el tonto.

- Pero pene es como la mano o como el pie.- Dijo Naoki y Misaki suspiró.

- Eso es indiscutible, Misaki.- Asintió el escritor.

- Voy a hacer la cena.- Dijo Misaki.- Mahiro, corazón, tu papá vendrá muy pronto.

- ¿De verdad? ¿Veré a papá?

- Sí, Mahiro, muy pronto.- Le sonrió Misaki.

Aquella noche ya metidos en la cama, Misaki y Akihiko comenzaron a hablar de la boda que tendría lugar en julio.

- Este salón es muy bonito pero no sé, Usagi-san, me parece muy caro para solo una noche...

- ¿Otra vez con eso? Ya te he dicho que elijas lo que te guste sin mirar el precio.

- Me cuesta mucho no mirar el precio. Tenemos un hijo y no quiero ir derrochando dinero.

- Pero es nuestra boda, Misaki, solo nos vamos a casar una vez.- Le dijo el escritor.

- Está bien.- Suspiró el estudiante.- Mira este hotel, ¿qué te parece? Es muy bonito.

- ¿Te gusta?

- Sí, ¿a ti no?

- Está muy bien, yo me imaginaba algo más...lujoso pero está bien.

- Yo no quiero nada lujoso, creo que un hotel así está muy bien. Es bonito, elegante y tiene un amplio jardín donde podríamos casarnos y hacer el cóctel previo al banquete. Quedará muy bien, no es un hotel como los que sueles frecuentar tú pero a mí me parece muy mono.