Capítulo 47

815 61 186
                                    

Shinobu despertó de mal humor, conforme avanzaba el embarazo dormía peor. Se incorporó en la cama y cogió su móvil, se metió en Instagram y comenzó a ver las fotos que solía subir antes del embarazo. En todas se veía perfecto. Abrió la cámara interior y sintió ganas de llorar al verse. En aquel momento entró Miyagi llevando una bandeja con su desayuno.

- Buenos días, gordi.

- Me vuelves a llamar así y te corto los huevos y me hago unos pendientes con ellos.

- Shinobu-chin, te lo he dicho desde el cariño. Venga, amor, que te traigo el desayuno.- Dijo el profesor posando la bandeja sobre la cama.- Un zumito, una tostadas y fruta.

- Miyagi, tengo papada.- Dijo Shinobu con lágrimas en los ojos.- Ya no puedo subir selfies...

- Yo también tengo papada, Shinobu-chin.

- ¡Pero eso es porque tú eres viejo!- Exclamó el rubio llorando.- ¡Yo la tengo por gordo! 

- No llores, mi vida, no estás gordo...

- ¡ESTOY GORDO POR TU CULPA! ¡NOWAKI Y TÚ ME HABÉIS HECHO ESTO!

- Tenías que engordar un poco pero no estás gordo, estás embarazado.- Dijo Miyagi abrazándole.- Y hoy vas a salir de casa.

- No, Miyagi, por favor... No puedo salir siendo un hipopótamo...

- Llevas dos semanas sin salir, no puedes seguir así. ¿No ves que no es sano?

- Me doy vergüenza...- Lloró Shinobu.

- Kane y Satoru van a venir a por ti y vas a ir con ellos a dar una vuelta.- Le dijo Miyagi tajante.- Nowaki me ha dicho que no sea blando contigo y que, como sigas así, te hará ir al psicólogo. 

- Yo lo que necesito es un dietista...

- Por favor, Shinobu, no seas cabezota.- Le dijo el profesor.- Si lo prefieres, tu padre nos ha ofrecido la casa de campo.

- Yo de ese no quiero ni agua. Que ahora estemos a buenas no hace que olvide todo lo que nos ha hecho.- Dijo Shinobu secándose las lágrimas.

- Pues entonces tienes que salir a la calle, que te dé el aire.

- Que vengan Kane y Satoru pero que no me hagan salir... Por favor, Miyagi...

- No puedo ceder, Shinobu. Tienes que salir, aunque sean veinte minutos, con eso me conformo.

- ¿Y si veo a alguien que conozco?

- Pues te dará la enhorabuena y ya está.- Miyagi le sonrió de lado mientras le acariciaba la mejilla.- Sigues estando muy bueno, Shinobu-chin.

- Yo no me gusto...

- Shinobu-chin, anímate que me pone muy triste verte así.

- Soy una morsa.



Hiroki repeinó a su hijo haciéndole una raya a un lado. El niño se encontraba de brazos cruzados y le miraba con mala cara a través del espejo. Nowaki entró en el baño y se sorprendió al ver la escena.

- Hiro-san, ¿qué haces?

- Peinar al niño.

- Creo que a Haru-chan no le gusta.

- Me da igual, hoy va a venir mi madre y tiene que estar presentable.- Dijo Hiroki claramente nervioso por aquel acontecimiento.- ¿Verdad que quieres estar guapo para conocer a la abuela?- El niño continuó de morros y no dijo nada. Kane entró en el baño y frunció el ceño al ver a su ahijado.

- ¿Por qué va disfrazado? ¿Ya son carnavales?

- No va disfrazado, va bien vestido.- Le dijo Hiroki.

El InternadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora