Pasión De La Luna.

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Madara le miró perplejo, con los ojos bien abiertos, como tratando de asegurarse de que lo que estaba viviendo, no era una simple ilusión y que no acabaría nunca.


El moreno sonrió enternecido de ver al Uchiha sorprendido, hecho un bonito desastre, con las mejillas rojas y lágrimas que comenzaban a secarse por sí solas desde sus mejillas, acunó el rostro de Uchiha entre sus manos, besando su frente mientras limpiaba con sus pulgares, todo rastro de lágrimas del azabache, le miró a los ojos, perdiéndose en ellos.

Eran incontables las veces en que el caía ante el encanto de ese Uchiha, ver sus ojos y perderse por horas en su mirar, apreciar tal profundidad y sumergirse  en cuanto le puede mostrar con su onix mirada.

Besó sus mejillas, pasando por donde alguna vez las lágrimas surcaron esas rojas mejillas, llegó a sus ojos, Madara los cerró y Hashirama pudo besarlos también, nuevamente alzó su mentón y le dio un cálido y suave beso. Apresado sus labios con los ajenos, sintiendo como nunca ese sabor dulce a dango, que el Uchiha siempre iba a tener. Saboreando cada centímetro de esos finos y rosados labios, fue acorralado por el Uchiha contra la pared. Sacándole una ligera risilla por la acción del Uchiha, se dejó hacer cuando el Uchiha se separó lo suficiente para verle a los ojos,entendiendo que pedía permiso para continuar, aunque no había necesidad de hacerlo, Hashirama dejaría que Madara destruyera todo una aldea y el no se quejaría por eso, lo haría por otros motivos que no pensaba decir ahora, estaba concentrado.

El Uchiha comenzó besando y lamiendo las mejillas morenas del Senju, que soltaba ligeras risas por el cosquilleo y la sensación que le provocaba.

__¿buscas torturarme con cosquillas y dulces besos? Porque lo estas logrando Maddy. -sonrió ante sentir otro beso pero en su mandíbula- ah~

__¿puedo amarte libremente?

__puedes hacerlo, incluso si el mundo se nos viene encima... Yo no voy a dejarte.

El Uchiha se alzó de puntitas para plantar un beso en la frente del Senju, haciéndole reír por la ternura que eso implicaba. Tener que pararse así para poder alcanzarle por la diferencia de estatura.

__ni una palabra de que soy pequeño.

__ni una sola.

Una corriente eléctrica le recorrió por el cuerpo al sentir como el Uchiha descendía por su torso y se detenía en su regazo, suspiró cuando sintió la mano del Uchiha sobre su entrepierna.

El Uchiha no perdió tiempo, besando el miembro ajeno por sobre la tela mientras lo sujetaba y movía su mano en un compás delirante para el Senju, apoyó su cabeza en la pared tras de sí, para poder resistir a la tentación de marcar a Madara de todas las maneras posibles, si veía ese rostro hermoso y sensual, esa boca bella, caliente y sabrosa, saboreando su miembro, la sola imagen mental que tenía le hacía endurecer aún más.


Jadeó cuando el Uchiha liberó por fin su erección y comenzó a introducirlo en su boca.

Se permitió mirar al Uchiha sintiendo que se correría en cualquier momento ante la fascinante felación que el Uchiha le daba.

Pasó sus manos por el cabello azabache de su prometido, enredado entre sus dedos esos rebeldes mechones y jalarlos un poco, así hasta que logró marcar su propio ritmo ante la felación proporcionada.

__Demonios...eres sexy.

El azabache sonrió sintiéndose triunfante de ser el único que podía hacer eso con el Senju y ser el único al que el deseara. Aumentó el ritmo para incitar al moreno a que le follase la boca -aunque eso significará atragantarse- y así lo hizo.

Eclipse  (HashiMada) (yaoi) (tobiizu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora