Ojos De Amor Y Odio

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Si bien Tobirama estaba cansado de ayudar siempre a su hermano, ahora estaba llegando a su límite, pero tampoco podía dejar a la bendición de Dios la aldea y los papeles de alianza y cada distrito de konoha y los próximos en avecinarse, sin embargo, a diferencia de Hashirama, se hallaba concentrado revisando, sellando y corrigiendo el papeleo que poco a poco disminuía de manera notable.

La noche le llegó sin avisar siquiera y ya todos se estaban retirando a sus  hogares.

—Tobirama-sama —llamó una chica encargada del departamento de contabilidad— nos retiramos por hoy, lamento haberle traído tantos papeles hoy.

Tobirama le restó importancia agitando su mano al aire
—No hay problema, Hanna —le dijo sin mirarla— ¿Puedes traer los papeles a tu cargo? me gustaría revisarlos.

—Si, Tobirama-sama, pero, enviaré a alguien más, yo debo retirarme ya —dijo apenada— es el cumpleaños de mi hijo y ya estoy llegando algo tarde.

Tobirama la miró de reojo asintiendo compresivo, sin despegar su entretenimiento del trabajo por completo
—No hay problema, pero que alguien más los traiga ahora, puedes retirarte.

—Si —se reverenció antes de retirarse.

La chica iba saliendo de la oficina, cuando se encontró con un azabache trayendo papeles y con el ceño fruncido mientras caminaba aparentemente tranquilo.

Lo interceptó de inmediato, con ojos de suplica que el morocho no pudo tratar de evitar
—Disculpe, Izuna-san.

Deteniendo su paso, la miró sin mucho interés pero prestándome la debida atención —¿Eh? ¿Qué sucede?

—Tobirama-sama necesita que le entregue los papeles contables de mi departamento, pero tengo que irme, mi niño cumple años y prometí no llegar tarde ¿Podría.... Pedirle que los lleve usted? —juntó sus manos mirándolo como cachorro desolado. Sabiendo que de nada serviría esa mirada más que únicamente tratar de persuadirlo con voz.

Al azabache le dio un tic en el ojo mientras una venita se notaba en su frente, pero no pudo negarse, era un favor y la esperaban en casa, asintió suspirando.

—Bien ¿Dónde están?


....



...






Milagrosamente había terminado los papeleos de Konoha y ciertos distritos, sin embargo, le faltaban lo de Hanna y los del Distrito Uchiha, se preguntó dónde se encontraría Izuna, pues él era el remplazo de Madara y tenía que traer aquellos papeles.

Suspiró.

Se levantó de su asiento al ver que no llegaban los otros papeles que había solicitado, al momento de levantarse, se iba estirando mientras avanzaba a la puerta y boztezaba del cansancio, pero cuando iba a tocar el mango de la puerta, giró y se abrió dejando ver a un azabache que  ingresaba con un montón de papeles en la mano y otras en equilibrio en la cabeza.

El azabache se sorprendió al ver al Senju tan cerca, que, por acto de reflejo al verlo a los ojos, activó su sharingan, retrocediendo de un respingo, varias hojas cayeron al suelo por el acto de reflejo.

Tobirama también estaba desprevenido, creyó que el Uchiha ya se había ido, por lo que tuvo el mismo reflejo de Izuna cuando retrocedió de un Respingo.

Ambos ojos tal cual la sangre, se cruzaron por unos instantes.

—Demonios, estúpido Senju quítate de la puerta —le dijo casi aliviado mientras sus ojos volvía al onix característico, desviando la mirada casi avergonzado.

Eclipse  (HashiMada) (yaoi) (tobiizu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora