Voy A Amarte Siempre

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                         EPÍLOGO

Tomen sus palomitas y prepárense porque el epílogo es largo xd




Izuna creía que toda su vida se resumiría en una guerra interminable de su clan con el Senju, que siempre estarían en guerra, que su hermano siempre se quedaría junto a él y tal vez algún día hayan matado a todos los Senjus, serían solterones codiciados por mujeres y hombres, pero serían de los que siempre serían solteros... Porque nadie era digno obviamente. Imaginaba su vida envejecer con su hermano, hacer absolutamente todo con su hermano, morir con su hermano —o tal vez solo antes o después de su hermano—, de hecho su vida giraba en torno a su hermano. Tajima había muerto, cuando el había cumplido 14 años, su madre había muerto cuando el no tenía la noción del tiempo, murió a los 4 años de que su último hijo —osea él— haya nacido. Sus hermanos murieron honorable mente en combate. En una guerra interminable —que así se consideraba antes— nunca se había llevado bien con todos, lo consideraban el más débil e incluso no pasaban mucho tiempo junto a él, sin embargo siempre le protegían, Fue Madara el que lo cuidó desde el principio, a pesar de ser peor que una madre con él, él fue el primero en confiar en su fuerza, al ser el mejor de todos sus hermanos, Madara fue quien le entrenó, quien demostró su gran fuerza y valor para hacerle tener fuerza, para pulir su destreza, para ver su determinación y hacerle crecer con la noción de la realidad y la ternura en la familia. Por que Madara jamás le abandonó, nunca lo hirió, siempre veló por él y le amó por sobre todas las cosas incondicionalmente. Incluso en tiempos de guerra Izuna ya sabía de lo que su hermano tenía por el Senju —aunque ni Madara se daba cuenta antes— pero se sintió culpable en algún punto, cuando Madara una vez le dijo "no tengo tiempo para amar a quien no seas tu, mi vida se resume en ti, yo te voy a proteger Izuna", agradecía inmensamente que su hermano le ame con esa intensidad, pero también quería que Madara se dé el tiempo de ser libre de amar "romántica mente" a alguien, que tenga que hacerlo feliz por sobre todas las cosas. Izuna logró ver que Hashirama era la otra cara del corazón de Madara, la felicidad que Madara tenía con tan solo saber que su existencia todavía se ubica en la faz de la tierra. Izuna sabía que su hermano era demasiado romántico, cursi y muy dulce —a su manera— era una persona sensible, que se dejaba llevar en ocasiones por las emociones fuertes, aunque también solía mantener compostura ante los enemigos y ser brutal al momento de defenderse y atacar. Pero era una de las personas más nobles que pudo conocer, tierno, cariñoso y que amaba con locura a pesar de las cosas que el mundo no veía en la persona que Izuna si lograba ver. Por eso Izuna amaba tanto y admiraba a su hermano mayor. Si le dijeran que pudieran revivir a su madre o a su padre a cambio de Madara, el dejaría a sus padres, si por el fuera, dejaría que su hermano consuma el mundo con tal de verlo feliz, daría su vida para que el viva eternamente y lo defendería con uñas y dientes. Por que Madara era y siempre sería la única persona que puede saber que el bien siempre viene acompañado del mal y junto a Hashirama, también descubrió que el mal, también está acompañado del bien...

Izuna sabía que su hermano era la otra mitad del alma de Hashirama, se complementaban con potencia, amor, su relación era tan ardiente y bella, que daría millones de cosas tan solo por verlos juntos en otra vida. Izuna amaba con locura a su hermano. Lo amaba con tanta locura que ahí estaba.

Desesperado sin saber exactamente qué hacer, porque Madara apretaba con demasiada fuerza las manos de los hermanos Senju, más la de Tobirama —era obvio su coraje a pesar del dolor— el albino quería mutilarse la mano, pero no le daría el gusto a Madara.

La pelirroja le decía a Madara que regule lo más posible su respiración, que Inhale que exhale, inhale, exhale, pero su hermano hacía de todo menos eso.

Gritaba, lloraba, se ponía rojo de tanta fuerza que hacía, rezaba, decía cosas que no tenían lógica, incluso hasta le rezó a Itachi.

__¡por Itachi!

Eclipse  (HashiMada) (yaoi) (tobiizu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora