Capítulo 22

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A/N

Antes de empezar con el capítulo, me gustaría aclarar una cosa. Killian critica la vestimenta de las chicas de hoy en día, lo cual no quiere decir que esté de acuerdo. Es solo que me parecía algo divertido ya que él es un pirata de hace más de dos siglos y la ropa de ahora dista mucho de la de entonces. 

Dicho esto, empecemos.


(POV Killian)

Hoy es un gran día, nunca pensé que diría esto pero, ¡HOY VAMOS DE COMPRAS! Sí, lo sé, yo alegrándome de ir a una tienda a mirar ropa, pero la razón por la que estoy tan contento es porque hoy le toca a mi princesa. Por fin vamos a comprarle el vestido de la niña de las flores. Realmente la idea de pegarme horas viendo ropa hasta dar con el atuendo perfecto, no es que me haga mucha gracia, pero tendríais que ver la cara de felicidad que puso mi pequeña cuando le dijimos que ya teníamos cita.

Allison no ha conocido todavía la ropa de este mundo y estoy algo nervioso. Sé que aún es muy pequeña, pero he visto cómo van vestidas algunas de las compañeras de Henry y no me gusta nada. ¿En serio eso tan corto puede considerarse una falda? ¡Por el amor de Poseidón! Si incluso se les ven las rodillas. Bueno, es solo un vestido y además tiene que ser largo, de lo contrario no cumpliría con las expectativas de Emma.

Estoy aterrado porque obviamente tienen que estar presente tanto Milah, como madre de Allison, y Emma, como la novia. Ninguna de las dos ha vuelto a dirigirse la palabra desde aquella vez cuando hablaron en el barco sobre la marcha de Milah y no hay buena relación entre ambas.

Llegamos a mi barco para recoger a las pelinegras y salir en busca del vestido perfecto para mi pequeña. No creo que sea muy difícil, cualquier cosa le quedará bien.

- ¡Papá! -Dice Allison en cuanto me ve.

Ella viene corriendo y yo me agacho para cogerla y darle un gran abrazo.

- Hola, pequeña. -Digo dándole varios besos en la mejilla.

- ¡Emma! - Dice extendiendo los brazos hacia ella.

Emma me la arrebata de mi agarre a pesar de mi, no tanta, resistencia. Ambas se abrazan y mi prometida le da un beso en la frente antes de dejarla en el suelo. Justo en ese momento aparece Milah, quien mira a la rubia con recelo, pero no dice nada.

- Hola. -Dice Emma algo incómoda.

- ¿Nos vamos? -Pregunta Milah.

- Sí, cuanto antes le compremos el vestido a esta princesa, mejor. -Digo volviendo a coger a Allison.

Sé que no es una bebe y debería andar por sí sola, pero no puedo evitarlo, me perdí los 7 primero años de su vida y pienso compensarlo cueste lo que cueste.

El camino hasta la tienda se me hace más largo de lo normal debido a la incomodidad del momento, ninguna de las mujeres que van conmigo han articulado palabra, solo se escuchaba mi conversación con mi hija. Entramos al pequeño local y los ojos de Allison se abren de par en par, mostrando el brillo natural que hay en ellos, solo que esta vez es más notable debido a su emoción. En seguida empieza a correr por toda la tienda mirando todos los vestidos posibles de la sección de niñas.

- Mira mamá, me gusta ese... no ese... no espera, este es aún mejor... ¡Oh por Dios! ¡Mira!

Milah no puede evitar sonreír cuando su hija le coge de la mano y empieza a arrastrarla por todos los rincones señalando diferentes perchas donde hay vestidos de muchos tipos y colores. Este va a ser un día muuuuuuuy largo. ¡Allison quiere probarse todos los vestidos! En serio, TODOS. Pero no puedo negarle nada a mi niña, así que si hace falta nos quedamos aquí hasta pasado mañana.

El amor es inesperado (Segunda parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora