El amor es inesperado (Segunda parte)

Capítulo 6

A/N
Siento mucho si hay faltas de ortografía, pero es que es super tarde y se me cierran los ojos, espero que os guste.

(POV Henry)

Me despierto cuando Killian entra en mi camarote, abro los ojos y lo veo guardando mis cosas.

-¿Killian? -Digo medio dormido.

-Hola muchacho. Necesito que me ayudes.

-¿Qué pasa?

-Acabos de llegar al puerto, necesito que recojas tus cosas y las de tu madre rápidamente y en cuanto se despierte os vayáis a casa.

-¿Qué? ¿Por qué?

-Hazme caso, es lo mejor. Cuando estéis ya en casa me envías un mensaje. ¿De acuerdo?

-Vale, pero ¿qué pasa?

-Ya lo entenderás.

-No me digas que mi madre se asustó cuando le pediste matrimonio.

-Ojala, pero no llegué hacerlo.

-¡Killian!

-No tuve oportunidad, tu madre se asustó por otra cosa.

-¿Por qué?

-Prefiero no hablar de eso.

-Te recuerdo que he sacado la cabezonería de mi madre.

-Ayer discutimos. -Dice agachando la cabeza.

-¡¿Qué?! ¿Qué paso?

-No lo sé, esa es la peor parte. Estaba borracho y lo último que recuerdo es a Emma gritando que la llevara a casa. -Dice casi llorando.

-Killian tranquilo, sé que tu jamás le harías daño.

-Pues lo he hecho.

-Debe de haber otra explicación.

-¿Cuál? Me gritó Henry, nunca la había visto así.

-Pues entonces debe haber una solución.

-Lo siento chico, pero esta vez no podemos hacer nada. Ni si quiera sé lo que pasó.

-Pues entonces habrá que averiguarlo.

-Tú asegúrate de que abandonáis el barco pronto.

-De acuerdo.

Killian se va y yo empiezo a recoger mis cosas después de vestirme. Una vez que acabo me voy a la habitación de mi madre y hago lo mismo, dejando un conjunto fuera para que se lo ponga.

-Mamá, mamá despierta.

-Mmm. ¿Qué pasa hijo?

-Hemos llegado a Storybrooke, es hora de volver a casa.

-¿Ya? ¿Tan pronto?

-Sí. Killian quiere que dejemos el barco temprano.

Al nombrar a Killian los ojos de mi madre se abren de par en par.

-¿Qué hago aquí? ¿Cómo he llegado al camarote?

-Ni idea, supongo que habrá sido Killian. Mamá, ¿qué ha pasado entre vosotros?

-Nada.

-Y yo voy y me lo creo...

-Nada hijo.