Capítulo 31

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(POV Allison)

Hace ya 3 días que mi padre no sale de su camarote, mi madre y yo empezamos a preocuparnos de verdad. A veces por las noches escuchamos ruidos y golpes, sabemos que es porque está borracho. Emma le ha hecho mucho daño a mi papá y no creo que eso esté bien. Me duele decir esto, pero ya no quiero a Emma. Ella lo hacía muy feliz y ahora está triste todo el tiempo por su culpa, ya no es el mismo.

Llamo a su puerta pero no me responde, la abro un poco y veo que está dormido. Mi madre me ha dicho que no entre en su habitación, pero ahora no me ve y yo necesito ver a mi padre de cerca.

Cierro la puerta con cuidado y me acerco a él. Tiene lágrimas en los ojos y apesta a alcohol. ¿Por qué has hecho esto Emma? Yo pensaba que eras de los buenos y resulta que eres la peor de todos.

Doy una vuelta por la habitación y me doy cuenta de que hay una mochila abierta con ropa dentro, ropa de ella. Está toda arrugada y desordenada, supongo que papá habrá estado pensando qué hacer con esto. En un rincón me encuentro una foto de ellos juntos, mi padre me dijo que se la hicieron en su primera cita, pero ahora está rota, hecha pedazos. Sigo caminando y mis pies chocan con una botella de ron vacía, la miro y me doy cuenta que hay muchas más. Esto no es justo. ¿Por qué el que sufre es mi papá si ha sido Emma quien ha obrado mal? Pero ella también lo amaba. Espero que por lo menos esté igual de destrozada que él.

Vuelvo a acercarme a mi padre, lo miro y le aparto una lágrima con la mano. Él se mueve un poco y se despierta. Tarda poco tiempo en darse cuenta que estoy aquí.

- Allison. ¿Qué haces aquí? ¡Te dije que no entraras! -Dice enfadado. Creo que sigue algo borracho.

- Solo quería ver cómo estabas. -Digo empezando a llorar.

- ¡FUERA!

Pego un brinco por la dureza de su voz. Nunca pensé que lo vería ser así conmigo, yo lo quiero mucho, no le he hecho nada. Salgo corriendo de la habitación, asustada por su actitud, y subo a la cubierta del barco. Todavía quedan algunas decoraciones de la boda, nadie ha tenido las fuerzas suficientes como para recogerlo.

La verdad es que esto no solo ha afectado a mi padre, el pueblo entero está triste, sobre todo David y Mary Margaret. Ellos han intentado hablar con Killian, pero él dice que no quiere verlos, son los padres de Emma y no quiere recordarla.

Cojo una de las flores que hay en el suelo y me siento con ella en las manos. Quiero hacer algo para ayudar a mi padre, pero no sé el qué. Quiero verlo tan feliz como antes, quiero que vuelva a ser cariñoso, quiero que vuelva a sonreír, que me saque a navegar, que me cuente historias piratas... ¡Quiero a mi papá de vuelta!

Empiezo a llorar más fuerte y me seco las lágrimas con la mano, pero no sirve de nada, no puedo parar. Noto como si el pecho me estuviera ardiendo y, aunque no pensaba que fuera posible, mi llanto aumenta, con más lágrimas, e incluso empiezo a gritar. Esto duele mucho, nunca antes había sentido algo así, me estoy asustando.

- ¡Allison! -Dice mi madre corriendo hacia mí.

- Alli, eh, eh, mírame. ¿Qué pasa hija? -Pregunta preocupada mientras me coge en sus brazos.

- ¡Quiero a papá! -Grito desesperada.

- Mi niña, ya sabes que ahora no puedes verlo.

- No, él no es mi papá. ¡Quiero que vuelva! Él es malo y borracho.

- Cariño, dale tiempo, ¿si? Ya verás como poco a poco volverá a ser como antes.

- Pero duele. -Digo llevándome la mano al pecho.

El amor es inesperado (Segunda parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora