El amor es inesperado (Segunda parte)

Capítulo 50

(POV Killian)

- ¡¿Bebé?!

- ¡Allison! -Gritamos Emma y yo separándonos.

- ¿Vais a tener un bebé? -Pregunta mi hija confundida.

- Eso parece. -Responde Emma.

- ¿Cuándo?

- Si todo sale bien, en nueve meses.

- ¿Eso quiere decir que voy a tener un hermanito?

- O hermanita.

- ¡Sí! ¡Yo quiero una hermanita! -Dice ilusionada.

Allison empieza a saltar de la emoción y yo suelto el aire que no sabía que estaba conteniendo. La verdad es que no sabía cómo decirle a mi hija que ahora voy a tener un bebé, me daba pánico su reacción.

- Allison, cielo -la llamo-. ¿Podemos hablar?

- ¡Claro!

Ella se acerca y yo le echo una mirada a mi mujer para que nos deje solos.

- Creo que voy a llamar a mi madre para cenar esta noche en su casa y poder darle la buena noticia. -Dice saliendo de la habitación.

- ¿Qué pasa, papi?

- Ven, siéntate. -Digo cogiéndola de la mano y dirigiéndola a la cama.

- ¿He hecho algo malo?

- No, no. Solo quería comentarte una cosa. Antes de que llegue el bebé, me gustaría que supieras alguno.

- Pero todavía falta mucho para eso.

- Sí, ya lo sé, pero quiero que lo sepas cuanto antes. Una vez que tu hermanito o hermanita esté con nosotros, voy a tener que pasar mucho tiempo con él, pero eso no significa que a ti te quiera menos.

- ¿Eso quiere decir que ya no podrás cuidar de mí? -Pregunta apenada.

- No, no. A ti te voy a cuidar siempre. Es solo que no podremos pasar tanto tiempo juntos, los bebés son delicados y difíciles, Emma va a necesitar mucho mi ayuda con él, puede que incluso antes de que llegue, pero tú siempre vas a tener un sitio muy especial en mí. ¿Vale?

- Vale, pero, ¿por qué me dices esto?

- Porque tengo miedo de que cuando eso pase, tú sientas que ya no me importas, o que no te quiero, pero todo eso no es cierto. No hay nada, ni nadie, a quien pueda querer más que a ti.

- Yo también te quiero, papi. ¡Más que a nada en este mundo!

Allison me da un abrazo, al cual respondo con gusto, y la pego con fuerza a mi pecho. Mi pobre pequeña, todo está cambiando demasiado rápido, solo espero que pueda acostumbrarse pronto a esta nueva vida.

- ¿Puedo hacerte una pregunta? -Dice separándose.

- ¡Claro!

- ¿Y cómo se hacen los bebés?

- ¿Qué? -Pregunto sorprendido.

- Ya sé que eso pasa cuando dos personas se quieren, pero no entiendo cómo se hacen.

- ¡¿Swan?! -Grito nervioso- ¡Necesito ayuda! 

(POV Emma)

- ¿A qué hora vendréis? -Pregunta mi madre al teléfono.

- Sobre las ocho, así puedo ayudaros a hacer la cena.

- Emma, no deberías hacer esfuerzos.

- Pero no es un esfuerzo para mí, igualmente tendría que cocinar en casa.