๑ೋ ❝O68 | 𝑷𝒓𝒆𝒔𝒆𝒏𝒕𝒂𝒓❞

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—¿En qué diablos estabas pensando? —le recrimina Mackenzie molesta con los brazos cruzados a Seth.

—Pensaban irse, ¿qué esperaban que hicieran? —responde Seth sin tener alguna otra excusa que dar.

—No sabes en qué peligro has puesto a mi papá —asegura la neófita frustrada—. Los Vulturis matarán a quien sepa de nosotros.

—No le dije nada sobre ustedes, le dije sobre nosotros y le dije que eras diferente —explica Seth nervioso.

—Y que adoptamos a una sobrina —responde Edward a la defensiva.

—En serio, Seth, él no se quedará tranquilo —asegura Mackenzie molesta—. No es tan tonto como para creerse el cuento de que Edward y yo adoptamos a una sobrina, Atenea se parece a nosotros, no tiene sentido eso.

—¿Al menos consideraste por un segundo el dolor físico que le provocará a ella? —pregunta Edward molesto, pensando en el dolor que sentirá su esposa—. Será como si le metieran un hierro ardiente por la garganta, eso asumiendo que Mackenzie pueda controlar su sed.

—Charlie ha estado muy mal —confiesa Seth—. No ha podido dormir bien, Bella ha tenido que mentirle varias veces para que él pueda sentirse más tranquilo, pero Charlie está inquieto al no saber nada de ti.

—No finjas que estás haciendo esto por Mackenzie y por Charlie cuando lo hiciste nada más por ti —asegura Edward molesto.

Esas palabras hicieron que la neófita negara ligeramente estando indignada, pero terminó por aceptar que Seth hizo todo eso para que Atenea se quedara a su lado y así poder protegerla.

—Lamento que piensen eso porque Charlie estará aquí en diez minutos —termina por revelar Seth con la mirada baja.

—¡¿Qué?! —grita Mackenzie alterada.

El joven moreno retrocede por reflejo al ver la molestia de la neófita y tras darse cuenta de como las puntas del cabello de esta tomaron un intenso color rojo.

Mackenzie suelta una maldición entre dientes y se da la vuelta para regresar al interior de la casa Cullen, en donde se encontraban esperándolos toda la familia ya reunida, pero igual estando al tanto de lo que pasó.

Al momento en que la neófita estuvo en la sala, Alice se acercó a ella para tomarla de las manos.

—Tranquila, vamos a resolverlo —asegura la vampiresa de corte pixie para tranquilizar a su cuñada.

Alice sale de la sala para ir a su habitación y buscar algo para Mackenzie, Esme le extiende su mano a su nuera, pero, al momento en que la castaña la aceptó, hizo que se sentara frente a ella. La menor de los hermanos Cullen llega algunos segundos después con un pequeño objeto en sus manos.

๑ೋ 𝑺𝒘𝒂𝒏 𝑮𝒊𝒓𝒍𝒔 - 𝑬𝒅𝒘𝒂𝒓𝒅 𝑪𝒖𝒍𝒍𝒆𝒏® ๑ೋDonde viven las historias. Descúbrelo ahora