Racing Drivers Gay Shit

"I love to love" (Sewis)

Sebastian no se cansaba de observar a Lewis. Aprender de él, sobre él.

Fue así que descubrió lo enamorado que estaba. Ni siquiera era meramente un crush, o atracción. Lewis personificaba todo lo que a él le gustaba; belleza, amabilidad, audacia, fuerza, buenos principios, colores, música...

Lewis además tenía ese encanto que dejaba prendado a más de uno en el camino, y eso -por más que no fuera su culpa- era quizá su principal defecto. Pese a ser de las personas más populares del mundo, Lewis era difícil de alcanzar. Era libre, de todos y de nadie. Bailaba por la vida de todos y con todos, sin hacerse cargo de lo que provocaba en las personas, ni del odio ni del amor.

Sebastian lo sabía, y a veces se ponía triste, saber que Lewis jamás sería suyo y que era poco probable que siendo capaz de repartir tanto amor, se lo quiera dar a él. Pero también era consciente de lo afortunado que era, teniendo a Lewis en su vida, compartiendo momentos con él tanto en reflectores como en la intimidad.

Incluso si eran mínimos, como tenerlo en su casa, jugando con ambos perros, riendo y moviéndose al ritmo de la música que reproducía su computadora, y resonaba por todo el ambiente; mientras él se limitaba a leer o escribir desde su sofá.

"but my baby just loves to dance, he's got to dance" murmuraba al ritmo de la canción, soltando una risita cuando Bruno se paró en dos patas y Lewis lo sostuvo justo a tiempo, para ahora bailar con él.

"Oye Seb! Lo hace mejor que tú.". Reía el moreno.

"Como lo sabes si jamás me invitaste a bailar?". Desafió alzando una ceja, pero algo avergonzado al notar que sonó como un reproche, uno totalmente más dirigido. Lewis, sin embargo no se lo tomó como tal, dirigiéndole una sonrisa juguetona.

"Entonces ven aquí, veamos que tienes."  Dijo extendiendo una mano en su dirección.

Sebastian apenas alcanzó a ponerse de pie que Lewis lo atrajo hacia sí, entrelazando una de sus manos y poniendo la otra en su espalda. Empezaron a bailar ligero, tan de cerca que Sebastian lo oía tararear.

"I'm spinnin like a top, we'll dance until we drop..."

Ambos trastabillaron al querer girar al mismo tiempo, y terminaron aún más cerca. Seb veía su reflejo en los ojos brillantes de su compañero, quien además le brindó una sonrisa tímida para completar la tierna imagen.

Sebastian parpadeó un par de veces, algo ensimismado.

"Que bonito sonrojo tienes."

El rubio no supo que contestar, limitándose a tragar en seco. Al notar que no se movía, Lewis cerró el espacio y juntó sus labios en un beso.

Sebastian se aferró a el, intentando disfrutar del momento lo más posible, pese al agridulce sentimiento que crecía en lo más profundo de su ser, de que no sería más que otro del montón. De que Lewis lo quería y le importaba, claro que sí. Pero no estaba enamorado.

El estribillo de la canción se repetía una y otra vez, llegando a su fin.

I love to love... But my baby just loves to dance.