Racing Drivers Gay Shit

Cooldown time (Piarles)

Un pequeño consuelo para los y las que nos sentimos un poco indignadas por  el enojo injustificado de Charles, después de haber hecho una súper carrera.

Charles no quiso quedarse a ver el podio que se perdió. Seguía furioso y necesitaba tranquilizarse antes de dar cualquier entrevista y se le escapara algo de lo que se arrepentiría. Ya en su tráiler, fue sacado de sus pensamientos por una llamada, Pierre.

No necesitaba ver la pantalla para saber que era él. Pierre siempre lo llamaba para ver cómo estaba luego de tener una mala carrera, pero en ese momento, no necesitaba el consuelo de nadie. Esperó unos minutos, en los cuales siguió ignorando los llamados, hasta que lo llamaron para cumplir su obligación con los medios.

Una vez que todo lo relativo a la carrera terminó, la ira se fue para dejarle lugar a la decepcion y la tristeza. Estaba empacando para irse, y recordó que no había hablado con su novio, por lo que se acercó hasta el motorhome donde él estaba y entró sin tocar. Pierre estaba sentado con su teléfono, con sus cosas ya empacadas y seguramente esperando que le avisen cuando debía ir al aeropuerto.

─hey

─hey.

─lamento no haberte respondido tus llamadas. Estaba muy molesto y sinceramente necesitaba estar solo.

─ está bien, lo entiendo, creo.─dijo el otro suspirando. Haciendo lugar para que charles se sentara junto a él.

─ hoy hice el ridículo.

─charles...

─y no me digas que no, porque...

─ te diré lo que yo quiera.─eso frenó en seco al más joven.

─oye.

─no, oye nada. No estoy de humor para escuchar tus lloriqueos.

─Porque estas siendo tan rudo conmigo?

─Solo estoy siendo honesto.

─ no se que te ocurre pero esperaba al menos algo de aliento de mi novio, sabes?

Pierre se levanto y se paro frente a el, su ceño fruncido y su tono de voz alzándose luego de haber perdido la paciencia.

─maldición charles solo a eso viniste? Que quieres que diga? "pobrecito charles, se perdió un podio"... No. Porque estas actuando como un bebé, y no todo tiene que ser sobre ti...

─y quien dijo que todo es sobre mi?- Charles interrumpió y se paró a su altura, pero Pierre hizo caso omiso y siguió.

─Así que supéralo, ve a tu casa y enfócate en la siguiente carrera, que al menos sabes que tienes un auto que evoluciona a pasos enormes, y no uno que se te cae a pedazos. Adiós.

Pierre le abrió la puerta, pero charles no se movió, por lo que luego de unos segundos soltó un gruñido de frustración y la cerró, volviéndose a sentar.

─No vine a pelear Pierre. Por favor, dime que ocurre. No puedo arreglarlo si no me dices que anda mal.─ el francés suspiró.

─ No quise gritarte, pero en verdad me enfada que tu sientas que el mundo se cae a tu alrededor solo por perder un puesto, cuando las otras 57 vueltas de tu carrera fueron impresionantes, y casi eres piloto del día.

─Pierre yo...

─Aguarda, déjame terminar... y me enfada sobretodo porque, mi carrera sí fue un desastre, con penalidades injustas, un motor que no funciona y haciendo esos estúpidos trompos como si fuera un idiota. Me sentía mal, y lo único que quería era hablar contigo, y ni siquiera te dignaste a responder una llamada.

En ese momento Charles se sentía un imbécil, un egoísta. se había dedicado a hacer berrinches cuando sus problemas no fueron nada comparados con los que tuvo su novio.

─ Perdóname, por favor perdóname amor.

Dijo envolviéndolo en sus brazos, Pierre le correspondió.

─tienes razón en todo, soy un estúpido.

─No lo eres, eres maravilloso─ dijo Pierre separándose y acariciando su mejilla.─ solo un poco llorón.

Charles se rió y recibió los labios del otro, iniciando un beso delicado.

─así y todo me quieres, verdad?

─ M-hmm. Nunca lo dudes.

Dijo tomando su mano para ayudarlo a levantarse.

─ tu tampoco lo dudes. Ni de mi, ni de tu talento. Siempre habrá veces en las que el auto no funcione, pero esas cosas exceden tu capacidad. Vienes teniendo una temporada soñada, no dejes que una o dos carreras malas te afecten, si cariño?

Pierre asintió sonriendo, y charles hizo lo propio, aliviado de ya no estar mal con su chico.

─Aun no empaco, sabes?- Pierre soltó una risita.

─ Te ayudo, nene?

─Por favor.

Y de esta forma, ambos muchachos salieron del lugar, aun tomados de la mano y su mal humor dispersándose por el mero hecho de volver a estar juntos.