Racing Drivers Gay Shit

Asuntos pendientes (RB on Fire pt. II)

O donde Charles se quiere desquitar con Max por haberle hecho perder una carrera.

N/a: Heyyy aqui tenemos la tan solicitada parte dos del AU donde Max y Charles son compas en Red Bull y son aún más tóxicos que ahora que compiten en diferentes equipos xd.

Esto tiene sexo del foeeerte así que me abstendría de leer esto en público si fuera ustedes.

Ahora sí, enjoyˆ ˆ

Otra carrera había pasado. Otra victoria echada a perder por el maldito de Max y Charles estaba hasta las pelotas de que Max lo perjudicara y el equipo no hiciera nada.

No sabía en qué momento se había volteado la tortilla y Max volvía a ser el favorito, pero eso debía cambiar y pronto.

Lo bueno, es que ya no necesitaba de Christian o del otro anciano insoportable.

El ya había encontrado la forma de moldear a Max a su antojo. Solo que esta vez debía usar tácticas un tanto más... Agresivas.

Por tales motivos intentó calmarse un poco, buscar dónde demonios tenía el lubricante y el dildo, esconder todo y dirigirse lo antes posible al hotel para averiguar el número de la habitación de Max.

No le costaría mucho más que unas palabras bonitas y una sonrisa coqueta con el o la recepcionista.

Fue entonces que el lindo monegasco puso su plan en marcha, ejecutándolo sin inconveniente alguno y una vez dentro de la habitación de su compañero de equipo, arrojó su bolso en la cama, y como sabía que Max no tardaba en llegar aguardó unos minutos al costado de la puerta.

Cuando Max llegó, Charle lo tomó por sorpresa.

Lo sujetó por detrás, cubrió su boca y puso su pierna entre medio de las suyas.

"Tu y yo tenemos asuntos pendientes, cariño. No te vas a salvar de esta."

Max, que hasta el momento estaba paralizado del miedo, al oír que era Charles, empezó a forcejear. Entonces Charles lo arrojó con fuerza a la cama y se paró de brazos cruzados frente a ella.

"Tú estás loco. Vete ya de aquí." Charles no se inmutó.

"No. Date la vuelta."

"Qué?" Charles se arrodilló en la cama, tomando a Max de los tobillos y jalándolo para tenerlo más cerca. Luego dijo con su voz más intimidante...

"Que te des la vuelta. Si no lo haces tendré que follarte sin preparación, y no creo que tu pobre agujero lo soporte." Max tragó en seco y luego de pensarlo unos segundos, asintió y se dio la vuelta.

Charles entonces le quitó descuidadamente el pantalón y la ropa interior, para luego alzar las caderas del neerlandés y que este se deba apoyar en sus codos y rodillas.

"Charles..." Jadeó cuando sintió el frío lubricante bajar por su trasero hasta sus muslos.

"Tan ansioso ya? Y pensé que la zorra era yo. Mira como me tomas..." Respondió admirando como sus dedos entraban con facilidad.

"Cállate."

"No, zorra. Tu eres la que debe callarse. Ser bueno y dejar de llorar por los rincones para luego ser un maldito sucio en la pista y fuera de ella."

"Mira quien hablaaAH." Charles le dio una fuerte nalgada y sacó sus dedos, para ahora jugar con el dildo en la ya dilatada entrada.

"Sigue sin callarte y ya verás lo que haré contigo, Max. No te dejaré dormir en toda la noche. Te follaré por horas y cuando yo me canse te haré chuparmela hasta el amanecer." Dijo introduciendo el juguete, haciendo que Max gima con ganas.

"Aunque dudo que eso sea un desafío para ti cariño, algo me dice que eres insaciable. Que te haces el rudo y en realidad mueres por esto. Por estar llenito." Y para su sorpresa Max no respondió, solo jadeó e intentó tocarse con una de sus manos, lo que Charles impidió y le ganó otra nalgada.

"Definitivamente callado te ves más bonito. Date la vuelta y abre mis pantalones, quiero ver esa boquita tuya haciendo algo útil."

Max se enderezó solo para mirar al otro desafiante por sobre el hombro, pero Charles respondió arqueando una ceja y sacando de su bolsillo un pequeño control remoto.

Y fue el momento que Max supo que estaba perdido.

Con resignación se dio la vuelta y le bajó las prendas inferiores al otro, y sin perder el tiempo se metió la creciente erección en su boca, haciendo que el otro suelte un gemido ronco, que le erizó la piel.

"De eso hablaba, cariño. Tan bueno para mi." Charles suspiró y encendió el vibrador en la mínima potencia para darle algo de placer a Max, que lloriqueó aún con su miembro en la boca.

"Decías algo?"

"Necesito venirme." Charles sonrió complacido y sin responderle le empujó para hacerlo caer en la cama nuevamente.

Una vez que tuvo a Max en la posición que quería, de rodillas y con su cabeza enterrada en la almohada, retiró el vibrador y lo penetró de una sola estocada, haciendo que Max tuviera que ahogar sus gritos en la tela.

Esperó unos segundos a que Max se acostumbre al mayor tamaño y luego empezó a empujar, lento pero profundo, sacando los más lujuriosos sonidos que alguna vez oyó a Max hacer.

Por eso momentos después tomó al rubio del cabello y jaló hasta que estuvieran espalda con torso, y Max pudiera sentirlo más profundo, y amenazando con venirse pronto.

"No te vendrás hasta que yo lo haya, zorra." Charles apuró sus embestidas y pronto vació su orgasmo dentro de Max, que no aguantó más y ensució la preciada cama en la que estaban.

Ambos estaban agitados y pronto Charles se dejó caer sobre el rubio del lado limpio, para recuperar el aliento juntos.

"Mierda, Charles." Charles sonrió, aún jadeando.

"Para que lo pienses de nuevo luego de lanzar tu coche encima mío como hoy."

"No te vino mal un trago de tu propia medicina."

"Y a ti no te vino mal una buena cogida."

Ambos estallaron en risas, y pronto se quedaron dormidos.