Living for the thrill (Maxiel)

978 48 20
                                    

O donde Max y Daniel deberían estar alistándose para su boda, pero ambos huyen del estrés y terminan conduciendo exactamente al lugar donde todo empezó.

N/a: AAAAH vengo queriendo escribir esto hace bastante y por fin se me cae la idea. En fin esto vendría a situarse en universo de mi Soulmate AU (lo mas probable es que después lo publique en el otro libro también con un par de detalles más) pero puede leerse como un OS común, así que disfrútenlo ^^

"Max ni siquiera lo pienses" Pierre se puso frente a la puerta, evitando que su hermano salga de la habitación. Max se secó el sudor que le corría en la frente.

No quería discutir en ese momento. Necesitaba aire fresco, quitarse los nervios, relajarse y estar en su mejor forma para el momento que ansió toda su vida.

Su boda con Daniel.

Incluso antes de conocerlo, sabía que el día que contrajera matrimonio con su alma gemela, de igual forma que hicieron sus padres adoptivos, sería el inicio del resto de su vida.

No podía esperar para ello, pero la presión de que todo saliera perfecto, de que Daniel sí llegara ahí, de que luego irían a pasar la noche de bodas en la casa de ambos -casa que aún no conocía ya que su prometido lo quiso mantener como parte de la sorpresa- le generaba unos nervios y ansiedad inimaginables, que superaban los que tenía al subirse a su auto de carreras.

Por lo que necesitaba salir y conducir unos momentos.

Conducir era de las cosas que más calma al cuerpo le traía y donde podía canalizar sus emociones.

Pero Pierre, Charles y Lewis no estaban de acuerdo con la idea, sea porque temían que el rubio huya o que tenga un accidente manejando y su día especial terminara en tragedia.

"Pierre, te aseguro que volveré a tiempo. Pero necesito salir de aquí. Lo necesito. Debo hacer algo primero."

"Maxie, estás seguro? Me prometes que todo está bien?" Le pidió Lewis, tomando su mano. Max lo miró a los ojos y sonrió.

"Si. Saldré y volveré para finalmente casarme con el hombre de mi vida." Lewis suspiró aliviado.

"De acuerdo, confío en ti... Pierre, déjalo salir."

Pierre hizo caso y dejó al rubio tomar sus llaves e irse de la casa, en cuyo patio trasero celebrarían la boda.

Max, con la camisa y pantalón de su traje nada más, se subió a su Chevy azul y aceleró en dirección a la colina, lugar donde había muchos complejos inmobiliarios lujosos, pero también de varios caminos de ascenso y descenso ideales para que diera un par de vueltas.

Encaró por uno de ellos y subió con mucha velocidad, cuidando de las entradas a las casas, y dando vueltas entre cada cerca, hasta llegar a una subida desde la que se puede observar el divino paisaje hacia abajo, el mar e incluso... no.

No podía ser ese el Honda de Daniel.

Max condujo con prisa bajando la colina hasta el callejón donde Daniel daba trompos con su auto, quien estaba igual de sorprendido que él al verlo.

"Maxie?!"

"Hey tu. Haciendo de novio fugitivo?" Daniel se apresuró a negar con la cabeza y besarlo con intensidad.

"Claro que no, mi amor. Es solo que Michael y Sebastian me estaban volviendo loco y la limosina no llegaba y todo era un caos así que vine a despejarme un poco, aquí donde tuvimos nuestra primera cita." Dijo con nostalgia.

"Dios... Lo recuerdas?" 

"Por supuesto. Fue el mejor día de mi vida hasta hoy."

"Entonces mueres por casarte también?"

"No te lo hubiera propuesto si no fuera de otra forma, leoncito." Max se arrojó a sus brazos y lo besó nuevamente.

"Sabes? Yo también vine aquí a despejarme los nervios, conducir un rato... Pero lo único que necesitaba era hablar contigo. Te veo, nos veo y sé que todo saldrá perfecto. No hay nada que temer."

"Me alegro. Entonces... Qué te parece emprender camino a nuestra boda? No queremos llegar tarde, o si?" Preguntó el mayor, arqueando las cejas. Max rió.

"Sería fascinante,no crees? Todo vuelto un caos, y de repente llegamos tu y yo para sorpresa de todos, nos casamos y nos vamos tan rápido como llegamos."

"Pura adrenalina."

"Exacto. No podría ser más a nuestro estilo." Max pareció pensarlo, pero también sabía que no sería justo para su familia. Que no solo les permitieron casarse en su casa, sino que estuvieron en los detalles de la fiesta y la organización.

"No, vuelve con Mike y Seb. Por una vez, sigamos las reglas. Ya tendremos tiempo para la adrenalina. Hoy es nuestra boda y quiero disfrutar cada segundo de ella." Daniel sonrió comprensivo y luego de un último beso asintió.

"Perfecto, mi querido. Entonces... Nos vemos para dar el sí en exactamente once minutos?" Max asintió y se subió a su auto.

"Los estaré contando, mi rey. "

Ambos se miraron una última vez, antes de encender sus autos, y conducir en sentidos opuestos.

Pero que no tardarían en volver a coincidir.

Y como se prometieron, luego de ser declarados flamantes esposos,  huyeron de su fiesta directo a su casa para dejar fluir la adrenalina que corría por sus venas,

Y que era la fórmula de su gran amor.



Racing Drivers Gay ShitDonde viven las historias. Descúbrelo ahora