Un Simple Error

8. Plan

—A ver si entendí —se acomodó en la cama sentándose y cruzando sus pies en flor de loto, —Hay un chico que te gusta desde hace meses —asentí—Ayer le mandaste un mensaje diciéndole que te gusta —volví a asentir— Querías borrar el mensaje y te quedaste sin batería, por eso estabas casi destruyendo el Jeep, él te contestó el mensaje, pero él ya sabía que te gustaba —volví a asentir y llevó una papita a su boca para comérsela— Después empezaron a hablar hasta la madruga y él fue con quien estabas hablando en el Jeep, ¿No? —preguntó y asentí.

—De acuerdo, tengo que procesar mucha información —dijo tratando de tocar su sien, pero lo evité.

—La mascarilla Abdiel —le regañé.

—Perdón, perdón, solo que ¡guau!, es mucha información literalmente mi cabeza hizo —con sus manos hizo una explosión—No puedo creer esto, pensé que me iba a preocupar de eso dentro de 4 años más pero ya vi que no —se acostó en la cama quedando a mi lado viendo hacia el techo de mi cuarto.

—¿Por qué preocuparte? —pregunté.

—Bueno, no es fácil ver crecer a tu princesa, a la mujer de tu vida, es difícil ver a tu hermanita crecer, una parte de crecer es que tengas novios y no quiero pasar eso —dijo con un poco de preocupación.

—Gracias por recordarme que no he tenido novio —alcé las cejas volteándolo a ver.

—Es mejor que te quedes soltera, los hombres son malos... Bueno un porciento lo es, no quiero que te topes con ellos, Emma —acarició mi mejilla con su pulgar.

—Yo digo que todo va bien con él, estamos conociéndolos, así empiezan las relaciones duraderas, como la de mamá y papá —dije sonriendo.

—Me encantaría decirte que es fácil, pero te estaría mintiendo, lo vas a descubrir tu sola, solo es cuestión de tiempo —suspiró.

—Yo digo que todo va a ir bien —dije manteniendo mi sonrisa.

—Eso esperemos pequeña, eso esperemos.

—Bueno dejando el tema de tu gran chico ese, mejor quítame la mascarilla que ya se te pasó el tiempo —dijo sentándose en la cama.

—¡Oh!, cierto, ven —le hice una señal para que me siguiera.

Fuimos al baño para quitarle la mascarilla y tomar un par de cosas que iba a utilizar con él. Cuando regresamos a la cama le acomodé de nuevo la banda que utilicé para sujetar su cabello rebelde, le saqué la ceja, limpié su cara, usé un exfoliante para labios y otras cosas más.

—Esta es una de las ventajas de tener una hermana, tienes un Spa para poderte relajar y cuidar tu piel —soltó un suspiro y no pude evitar soltar una risita al ver a mi hermano tan relajado.

Escuché el sonido de mi celular avisando que me llegó una notificación, dejé a mi hermano para que dejara secar la crema hidratante y fui por mi celular, era un mensaje de él.

Él: Vaya disculpe usted, tú que eres millonaria y uno aquí son su jabón del súper.

¿Ya comiste?

Yo: No soy millonaria jaja

Sip, hace como unos 15 minutos y tu ¿Ya comiste?

Él: Si lo eres, miedosa :)

¿Qué comiste?, sí, comí unas hamburguesas de pollo con mis amigos, apenas acabo de llegar a mi casa, al fin.

Yo: Y sigues con lo de miedosa, ¡soy Emma!

Comí spaghetti, no tenía mucha hambre, que bueno, ahora si podrás dormir.

Él: Eso lo sé chaparra, solo estoy jugando ;)