Capítulo 37

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37 | dijiste que te importaba, y me extrañabas también.




(las escenas escritas en esta letra significa que son en tiempo pasado)



Y ALLÍ ESTABAN DE NUEVO, James movió ligeramente la cabeza hacia atrás cuándo Danna le rozó el hinchado y ensangrentado labio con la pequeña gasa. La menor hizo una mueca de preocupación —Lo siento — murmuró en voz baja. El mayor intentó esbozar una sonrisa para calmar a su hermana.

—No te preocupes, estoy bien— mintió, perdiéndose a si mi mismo mientras su hermana continuaba limpiando su rostro. La habitación estaba en silencio y James solía apreciar cada pequeño retrato o dibujo que colgaba de las paredes color rosa pálido.

—No tendrías que haberlo hecho, solo lo hiciste enojar más— susurró la castaña en voz baja, casi inaudible, con terror. Su padre era un hombre horrible y desafiarle solo era peor.

Cuándo lo desafiabas sus palizas solían durar el doble.

—¿Y qué? — cuestionó —¿Tendría que haber dejado que te rompiera la nariz? Ni muerto — aseguró mientras arrugaba las facciones inconscientemente lo cual le provocó dolor. Danna le reprendió con la mirada, pero James sabía que tenía razón. Su padre solía golpear a su madre con brutalidad, y él no pensaba dejar que pusiera una mano encima de su hermana por nada del mundo, ni de ninguna forma.

Danna agradeció que lo que tenían a mano fuera suficiente para detener el sangrado y además, ayudar con la cicatrización, para cuándo terminó se deshizo de lo que había usado y detuvo a su hermano antes de que se levantará de la cama. —¿Podemos dormir juntos está noche?

No hizo falta más para que James asintiera, decirle no a Danna era difícil y mucho más cuando sabía el motivo de algo que quería.

Estaba asustada y no quería estar sola.

Él tampoco.

Esa noche ambos se acurrucado debajo del acolchado de florecitas de la menor y James le recitó un hermoso cuento en donde las princesas eran libres y los dragones eran amigos, en donde el terror era solo una metáfora y la alegría reinaba.



Y allí estaba de nuevo.

Sola.

Solo ella.

—Al parecer la primera evaluación ha salido bastante mal, lo mejor será internarlo inmediatamente, tal y como todos los imaginábamos James se puede convertir en un peligro mortal para Danna o cualquier se cruce en su camino, el oficial Swan ya ha tomado personalmente la denuncia...

La voz de Carlisle fue como un sonido distante y molesto, algo a lo que ligeramente le prestó atención. Notó que Alice respondió por ella. Sus ojos se movieron por las páginas sin comprender realmente lo que estaba leyendo. No estaba segura de querer hacer eso. Recargo su cuerpo en el alto escritorio intentando hallar estabilidad pero no había nada. Las lágrimas se le amontonaron en el los ojos más no soltó ninguna.

Ni una sola.

Movio su mirada hacía Edward a su lado intentando hallar algo de apoyo, el cual, recibió. —Es una forma de ayudarlo, si lo tratan, aquí pueden hacer algo...— declaró mirándola fijamente con sus ojos dorados repletos de compresión.

BREAK UP WITH YOUR GIRLFRIEND | EDWARD CULLENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora